Verâ Jourová | Vicepresidenta de la Comisión Europeade Valores y Transparencia
«Yo soy producto de las cuotas, pero superé a dos candidatos masculinos porque estaba más preparada»Considerada una de las mujeres más influyentes del mundo, Verâ Jourová, vicepresidenta de la Comisión Europea de Valores y Transparencia, defiende la presencia de «más mujeres líderes»

Estrecha colaboradora de Ursula von der Leyen, advierte del populismo de la extrema derecha ligado a la crisis demográfica. «Mi mejor papel es el de madre, pero estoy en contra de mensajes antiguos del tipo 'Quédense en casa y tengan más hijos'».

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onsiderada una de las mujeres más influyentes del mundo, Verâ Jourová (Třebíč, República Checa, 1964), vicepresidenta de la Comisión Europea de Valores y Transparencia, huye de etiquetas y se define como «una mujer normal». Por sus manos en estos diez años de ejercicio político en Bruselas han pasado asuntos tan delicados como la renovación del Consejo General del Poder Judicial, donde ejerció de negociadora para cerrar el pacto entre PSOE y PP; ha plantado cara a las grandes plataformas digitales (como Facebook o Google) para reforzar los derechos de los usuarios, y ha levantado la voz ante la violencia hacia las mujeres y la discriminación de género. «Hacen falta más mujeres líderes», proclama.
– Siempre insisto en la necesidad de que la Comisión tenga un equilibrio de género. Significa que de 27 miembros, la mitad deberíamos ser mujeres. Porque la combinación de hombres y mujeres es muy útil. Los hombres tienen una tendencia a ejercer una política de poder y las mujeres siempre solemos tener un carácter más negociador. Y no quiero decir que las mujeres solo representen el poder suave. Tenemos líderes muy fuertes en este momento. Y creo que mi jefa –Ursula von der Leyen– ha demostrado cuán fuerte y resolutiva puede ser. Por cierto, ella ha sido mi primera jefe femenina en la vida. Sí, sí. Y eso sucedió cuando tenía 55 años. Ahora estamos a punto de iniciar el nuevo mandato de la Comisión Europea en la que habrá tres mujeres muy fuertes. Ursula von der Leyen, que repite presidencia;Roberta Metsola, la presidenta del Parlamento Europeo, y Kaja Kallas, jefa de la Política Exterior de la Unión Europea. Pero todavía faltan líderes mujeres.
– Los políticos de la derecha extrema siempre remarcan su preocupación sobre la evolución demográfica. Su mensaje se dirige especialmente a las mujeres jóvenes y básicamente les dicen:«Quédense en casa y tengan más hijos». Yo soy una mujer liberal. Y también soy madre. Ese es mi papel favorito. Pero estoy muy en contra de la tendencia en la política en la que las mujeres están empujadas hacia el concepto antiguo caracterizado por la cocina, la iglesia y la cama. Porque esto es exactamente lo que está sucediendo: las mujeres desaparecen de la vida pública, desaparecen de la carrera profesional. Si la sociedad no crea condiciones para que las mujeres estudien, tengan familias y al mismo tiempo tengan carreras profesionales, entonces la sociedad en sí se perderá algo crucial. Incluso económicamente no es nada inteligente.
– Volviendo a la extrema derecha, a los populistas no les interesan las soluciones complicadas y el tema de la igualdad no es sencillo. Requiere hacer ajustes legislativos, como hemos hecho para que, por ejemplo, las mujeres tengan sus trabajos protegidos durante el permiso de maternidad. Y requiere inversiones en servicios como guarderías o que se den las condiciones adecuadas para los trabajos a tiempo parcial. Supone un esfuerzo legislativo y también económico. Pero está demostrado, con cifras, que el dinero que se invierte en estas cuestiones tiene un retorno rápido en beneficios a la sociedad.
– Yo misma fui producto de la política de cuotas. En 2014, fui nominada por el gobierno checo porque Jean-Claude Juncker envió un claro mensaje a los Estados miembros: si nominas a mujeres obtendrás una cartera más fuerte. Tuve dos competidores masculinos. Objetivamente, era la mejor candidata entre los tres. No solo por mi formación, sino también por mi inglés y mi preparación. Y aún así, después de haber sido elegida, tuve que escuchar bastantes ofensas, en el sentido de que mi principal mérito era haber nacido mujer. Así que por una parte yo misma he sentido que el sistema de cuotas es eficiente, pero al mismo tiempo siento que, de repente, el haber llegado a esa posición se reduce a una cuestión de discriminación positiva. Desde mi experiencia personal he visto la otra cara de las cuotas. Por ejemplo, en la Comisión Europea se discutió y aprobó la cuota del 40% en los puestos no ejecutivos de los consejos de administración de empresas cotizadas para dentro de un par de años. Y, honestamente, para mí ese porcentaje es menos importante que otros aspectos, como formación específica para las mujeres para que puedan promocionar, crear las condiciones para que madres y padres puedan avanzar en su carrera profesional. Solo con cuotas no podemos resolver todo.

«Mi primera jefa mujer –Ursula von der Leyen– la he tenido con 55 años. Faltan más líderes femeninas»
– Es cierto que los hombres tienen miedo a perder poder pero también hay una falta de confianza a veces entre las mujeres para aceptar ser líder, porque no se muestran tan confiadas en sus capacidades personales, como resultado de tantos años de desigualdad y de la falta de referentes de liderazgo femenino.
– Honestamente, tengo que decir que en los círculos de la política europea no me he sentido subestimada o más cuestionada. Pero si quiere le puedo contar una historia.
– Cuando era comisaria de Justicia, estuve al cargo de una operación contra el blanqueo de dinero, que es un crimen. Llegamos a la conclusión de que teníamos que lanzar una investigación a varios bancos en Malta. Una investigación de este tipo supone un grave problema reputacional para el país, por lo que no quería que se vieran sorprendidos. Así que para anunciarles la decisión debidamente convoqué una reunión en Bruselas con varios ministros para explicarles las razones y ofrecerles un análisis legal y que se fueran preparando. Vinieron cuatro ministros que estuvieron el 95% del tiempo hablándome de lo fantástico que es Malta. Por educación, les escuché y tras 55 minutos, al final, en 5 minutos, les conté que al día siguiente íbamos a iniciar una investigación. Pero no estaban escuchando. Permanecieron en silencio porque obviamente no estaban prestando atención así que el día siguiente se mostraron ofendididísimos porque 'nadie les había contado nada'. Estoy segura de que si hubiese habido un hombre en mi lugar al menos le hubiesen escuchado por respeto.
– Estamos investigando varias plataformas para evitar discursos de odio, la violencia sexual, la violencia contra los niños o la pornografía infantil. Tenemos que parar todos esos ataques horribles, especialmente contra los niños, y desde hace tiempo mi paciencia se está agotando. Hay que esperar los resultados de las primeras investigaciones y no se sabe si habrá sanciones. Pero cuando hablo a los responsables de las grandes plataformas casi todos reconocen que lo que se ve es demasiado. Hablando de la violencia contra las mujeres, también se ejerce 'online'. En el caso concreto de las que se dedican a la política, algunos partidos tienen cuotas y saben que las mujeres son candidatas atractivas y ayudan a ganar elecciones. Pero cuando esas mujeres asumen sus cargos y empiezan a ejercer su papel, los mismos partidos que las han aupado ni las protegen ni las defienden. Suelo echar de menos las respuestas de colegas cuando, por ejemplo, se producen agresiones 'online' contra los políticos concretos.
– Algunos celebran y aplauden la IA, y para otros es lo peor, el demonio. Estoy en medio porque creo que puede ayudar a la gente de muchas maneras, pero al mismo tiempo, si no somos lo suficientemente cuidadosos, puede supone un riesgo. Durante la elaboración de la Ley de IA europea me he cansado de decir que estamos en tiempo de enseñanza, que debemos ser muy cuidadosos para que la inteligencia artificialno asuma los aspectos negativos de la sociedad...
«Anuncié una sanción a Malta, pero no me escucharon. Si hubiera sido hombre...»
Verâ Jourová
Vicepresidenta de la Comisión Europea de Valores y Transparencia
– Estuve en España varias veces y tuve encuentros con ambos partidos y con los jueces como representantes del Poder Judicial. Primero, quería entender cuán profundo era el bloqueo. Tenía claro que había que involucrar a ambos partidos, porque por nuestra experiencia en cualquier tipo de reforma judicial, con la aprobación de un único partido no puede sobrevivir a la próxima elección. Conseguimos que ambos partidos discutieran el tema, fue largo pero al leer el texto del acuerdo me pareció que podría ser una buena solución. Félix Bolaños y Esteban González me invitaron a asistir a este momento histórico de la firma del acuerdo y puedo asegurar que fue uno de mis mejores días en Europa, porque era el ejemplo de que merece el esfuerzo eliminar las posiciones polarizadas y sentarse en la mesa.
– La política migratoria es uno de los temas más espinosos. Cuando miras el mapa de Europa hay Estados que necesitan una solución y solidaridad, especialmente los mediterráneos. Hay otros países que están sufriendo una amenaza híbrida como Polonia, que ve en su frontera con Bielorrusia a gente empujada por la miseria. El de la migración es un tema del que abusan los partidos populistas, que ofrecen soluciones muy fáciles que en la práctica no pueden funcionar. Entonces, respondiendo a la pregunta, creo que habrá gran presión para que los nuevos miembros del Parlamento abran de nuevo el pacto migratorio. Personalmente, me gustaría ver el pacto actual en vigor, porque aporta buenas soluciones, porque pone el énfasis en la protección de la frontera externa, porque reconoce que la migración descontrolada puede suponer un gran riesgo de seguridad para la Unión Europea y para los ciudadanos. Pero creo que inevitablemente la discusión continuará y se volverá más difícil.
– Estoy orgullosa de pertenecer a la Comisión de Política Europea que dice claramente que apoyamos a Ucrania, que la apoyaremos ayudando con equipos militares, con los refugiados. El apoyo financiero es absolutamente clave y continuaremos haciendo esto mientras sea necesario. La segunda cuestión clave es que el tiempo para las negociaciones y la forma de la futura paz debe ser formulada por los ucranianos y la representación ucraniana. No puedo hablar de plazos, porque hay varios factores que influyen.
– En este momento la Unión Europea tiene una política muy clara. Queremos un alto el fuego, detener esta horrible tragedia.
– Tengo cinco nietos. Me gustaría que sus hijos puedan leer que todos los líderes del mundo reconocen su respeto por las vidas humanas y han acabado todas las guerras.
Créditos
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Fotografía European Commission
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Narrativa visual Izania Ollo, Oihana Huércanos Pizarro y Amaia Oficialdegui
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Desarrollo web Gorka Sánchez