Apertura con energía y plural de escenarios

La fiesta callejera y nocturna, que buscaba interactuar con el público, fue el guiño colorista de una Quincena Musical que fue fiel a la ortodoxia en su concierto inaugural en el auditorio del Kursaal. El alcalde de Donostia, Eneko Goia, el diputado de Cultura, Denis Itxaso, y el viceconsejero de Cutura, Joxean Muñoz, entre otros, compusieron la representación institucional que presidió el concierto, mientras un relajado Patrick Alfaya, director de la Quincena, recibía a patrocinadores y aficionados. «Todo está preparado y pensamos que el público va a disfrutar a lo largo del mes con los más de 90 conciertos programados», apuntaba Alfaya como declaración de intenciones.

Había expectación por escuchar la propuesta de la Mahler Chamber Orchestra, la formación europea de jóvenes fundada por Claudio Abbado, y su repertorio con obras de Mendelssohn, Chopin y Beethoven no defraudó. El pianista coreano Seong-Jin Cho y el director, Jacob Hrusa, compartían con el resto de los músicos los largos y calurosos aplausos. La Mahler repite este viernes en el Kursaal con el Orfeón Donostiarra y Easo Eskolania.

La Quincena Musical se quiere diversa y por eso la cita más convencional del Kursaal se completó con los conciertos inaugurales programados en distintos escenarios a lo largo del día. La preocupación por la climatología adversa fue una constante pero prácticamentre todos los actos previstos pudieron celebrarse, desde la cita mañanera en el parque de Cristina Enea con el Lauburu Sax Quartet hasta los conciertos que llenaron el Salón de Plenos del Ayuntamiento, tanto por la mañana, con el Dúo Guschlbauer, como por la tarde, con Easo Eskolania, Easo Gaztetxo y Arabatxo Abesbatza.

La respuesta del público fue también notable en las citas para los más pequeños, con el taller Hitzak ideado por Maushaus en San Telmo, o el llenazo en San Vicente con las actuaciones del Euskal Herriko Gazte Abasbatza y el Cor Joven Nacional de Catalunya, que dejaron pequeña la iglesia de la Parte Vieja.

También San Telmo registró el lleno en el concierto de los jóvenes cantantes que cerraba el curso de técnica vocal. Portavoces del festival destacaban también la emotividad que se había vivido en los recitales de la llamada 'Quincena solidaria', con la soprano Julia Blasco, el tenor Facundo Guerrero y la pianista Sarah Pérarnaud en la residencia de mayores Txara II por la mañana y el centro de Sorabilla en Andoain.

Uno de los momentos más multitudinarios, y de mayor belleza, se vivió por la tarde en las terrazas del Ayuntamiento, en Alderdi Eder, con el gran espectáculo de Kresala denominado 'Ikono / grafiak'. La dirección artística de Faustino Aranzabal y de Idoia Ibarzabal al frente de los dantzaris del grupo, la colaboración de una amplia plantilla de músicos conocidos (desde Miren Zeberio y el Euskal Barrokensemble hasta Iñaki Salvador o Felipe Ugarte) y las voces de Aizpea Goenaga, Asier Hernandez y los jóvenes y txikis del Orfeón Donostiarra, entre otros, completaron la hermosa reunión ovacionada por el público. La 80 edición de la Quincena Musical arranca cargada de energía: la Quincena se presenta como una joven octogenaria.