El cocinero de 21 años que hace historia y se cuela en La Guía Michelin

Marcela Salazar

San Sebastián

Martes, 4 de marzo 2025, 14:45 | Actualizado 14:54h.

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La Guía Michelin 2025 acaba de desvelar su nueva selección de restaurantes 'Bib Gourmand', con 77 nuevas nuevos restaurantes en Francia. Aunque entre todos ellos destaca el de un joven de apenas 21 años que ha conquistado a los inspectores por su excelente relación calidad-precio y su cocina auténtica.

Se trata del joven chef Matéo Ravel, que a sus 21 años ya tiene una visión de la restauración digna de un veterano. Este cocinero dirige el restaurante 'La Table des Matrus', que la propia Guía Michelin define con las palabras «juventud, pasión y creatividad». Un restaurante de moda ubicado en Saint-Etienne, la capital del departamento de Loira, en el sudeste francés.

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Matéo Ravel rebosa energía en su restaurante con cocina abierta y tuberías a la vista, que saca a flote gracias a su red de pequeños productores y viticultores naturales del Loira con los que trabaja. En el restaurante que ha abierto hace apenas dos años, también se dedica a las preparaciones caseras de bebidas fermentadas a base de levaduras autóctonas como las cervezas, kéfir (un producto lácteo parecido al yogur) y limonadas. Aunque también es especialista en pan de masa madre, tocino salado madurado y también crea recetas llenas de sabor: como su tarta de berenjenas, mejillones con patatas fritas y mayonesa.

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Aunque el talento de este joven viene de familia, ya que este chef es hijo de un panadero y su padre todavía posee varias panaderías en la región de Saint-Etienne. Además de que su madre que también se dedicó durante un tiempo a la restauración.

«De niño, quería seguir los pasos de mis padres y convertirme en panadero», confiesa Ravel. «A medida que fui creciendo, me dediqué a la cocina e hice prácticas con Serge Vieira», un reconocido chef en el país francés. En tiempos de Covid Matéo Ravel abandonó la región de Saint-Étienne para trasladarse a Lyon y perfeccionar su formación, pero el joven tenía hambre de independencia. «Ya tenía planes de montar mi propio negocio cuando tenía apenas 19 años. El local estaba en subasta y yo era el único postor, por lo que la operación se cerró rápidamente», cuenta.

Dos años después de su apertura, su Table des Matrus se ha consolidado como uno de los lugares imprescindibles del centro de la ciudad. Pero, según afirma el joven «a medio plazo no es imposible que busquemos trasladarnos a un lugar más espacioso y cómodo», explica la joven promesa.