Cata de vinos tintos: grandes tintos para grandes ocasiones

25 años de San Sebastian Gastronomika se pueden celebrar de muchas maneras y una de ellas es con una cata de vinos tintos en Arzak.

Este espacio se convierte en único gracias a la disposición de la casa, esa actitud que te hace pensar en el respeto y el amor que hay por el vino. Mariano Rodríguez, Shua Ibáñez y Lucía Marcilla preparan la cata con tanto esmero y detalle que a los demás solamente nos queda hablar y disfrutar.

Color cereza intenso, profundo, poco evolucionado. En nariz predomina la fruta negra (confitura de arándanos), mora y endrina, acompañada con notas de madera, tostados y especiados. Corpóreo, sabroso, con una equilibrada acidez y un largo posgusto. Elaborado con Tempranillo madurada a la perfección y de las mejores parcelas.

Tiene una capa alta y un color rojo picota. En nariz tiene una intensidad muy alta donde aparecen notas de fruta madura con aromas especiados. En boca tiene una acidez marcada y bien integrada, con un tanino muy pulido y cuerpo medio. Muy sedoso y elegante. Muy largo y equilibrado. Sugiere gran capacidad de envejecimiento.

Rubí brillante, con tonos teja. Maduro y elegante, su riqueza aromática es cambiante y sutil, desnudándose a medida que el vino respira. Notas tostadas y de coco que se suceden por aromas terciarios. Taninos redondos y asedados, retrogusto complejo y persistente.

Rojo rubí intenso con capa muy alta, limpio y brillante. En nariz tiene un carácter muy típico de la Petit Verdot, balsámico y mineral. Una imponente acidez hace que el paso por boca resulte fresco a pesar de la potencia de esta variedad. Es una boca amplia y equilibrada, con un largo y persistente final. Esta añada es una de las mejores de Tadeo.

De color rojo picota, profundo y vivo, con reflejos violáceos. Nariz intensamente floral, con recuerdos a violetas y lilas. Aromas de frutas rojas, matorral de sotobosque y notas balsámicas. Equilibrada, delicada y sugerente. Boca fresca y placentera, fina y equilibrada en su potencia. Con un final goloso, delicado y largo.

Rojo intenso de capa alta. Aroma potente y elegante, presenta gran diversidad de matices con un fondo de fruta roja madura sobre una madera muy bien integrada. Majestuoso, aterciopelado y tacto sedoso, que se desliza por la boca con densidad, notándose el tanino maduro y bien polimerizado con el roble. Final de boca muy largo y armonioso.

Intenso color rojo cereza y violáceo profundo. Aromas intensos de frutas negras y rojas maduras, unidas a sutiles notas especiadas y minerales. Mora, arándanos, ciruelas y un leve toque de pimienta negra. En boca, de entrada es una explosión de fruta y concentración, con taninos muy redondos y potentes, de agradable persistencia.

100 % Tinto Fino (Tempranillo). Este vino se presenta en copa con un elegante color púrpura. En nariz expresa el potencial aromático de la tinta fina con sus frutos rojos y toques a regaliz. La crianza en barrica le proporciona notas especiadas en nariz y un toque sedoso con buena acidez en boca invitándonos a tomar otra copa.

Una viña de Tempranillo muy especial, situada en la falda oeste de Monjardín, con más de 40 años de edad, de muy poca producción y características únicas. Color cereza y buena capa. Elegante e intensos aromas de frutas negras maduras, especiado y muy balsámico. Al paladar es un vino con estructura, taninos sedosos, elegante y equilibrado.

Color cereza vivo y limpio, con tonos rubí en el borde de la copa. En nariz, sin mover la copa, matices minerales y a tinta, recuerdos a fósforo y toques a pimienta blanca y toffee. Al agitar la copa es intenso y seductor. En el ataque, fresco y con nervio. En el paso de boca, taninos jugosos, amables y cremosos. En retrogusto es largo, con taninos que hacen salivar.

Vino limpio, de capa alta. De color rojo picota con ribete granate. En la nariz es limpio, mucha complejidad y buena intensidad aromática. Seco, con estupenda acidez y perfecto equilibrio. Tras una entrada suave, resulta bien estructurado y amplio, algo mineral. Los taninos están perfectamente pulidos. Tras el trago deja un largo recuerdo.

Rojo profundo y vivo con ribete rojo. La nariz es intensa con la madera perfectamente integrada. En boca tiene volumen medio y continuo, sin vaguadas y resalta la frescura. Hay mucha fruta en la boca. Fresco y envolvente, con el tanino fino y vivo. Tiene la longitud de las añadas atlánticas en las que se mantiene la frescura y la viveza está presente. Será un vino de larga guarda.

Tiene la capa alta, de color intenso y brillante. Nariz muy intensa y llena de matices diferentes en muchas capas superpuestas. Elegancia, intensidad y frescura al mismo tiempo en boca. Quizás es la añada más corpulenta, pero es una de las de mejor balance. Vino delicioso y con la suficiente presencia. Armónico y largo.

Imponente rojo granate. Su aroma nos obsequia con ahumados, pan de higos, toffee y cuero. En boca es intenso y se expande a medida que lo degustamos. Taninos todavía vivos a pesar de la edad y retrogusto intenso y persistente. Es excepcional cómo llega a la mente a través de los sentidos. 100 % Tempranillo de viñedos de más de 70 años.

Un vino fluido, denso, hermoso y exultante. Como cesta de fruta viva y placentera. Un vino de carácter radiante, de brillo y textura, de firmeza y complexión plena. Deseo y confirmación de un encanto nacido de un compromiso: acompañar a la naturaleza en su concreta demanda de armonía esencial.

Violeta brillante de intensidad media. En nariz, destaca por su intensidad aromática. Grosellas, fresas y frambuesas silvestres en perfecto equilibrio con los aromas del roble francés. En boca, presenta una enorme explosión frutal, siendo un vino untuoso y denso, muy elegante en su recorrido.

88 % Tempranillo, 10 % Graciano, 2 % pieles de Viura y Malvasía. Buque insignia de la bodega y fi el reflejo de su filosofía. Elaborado a partir de los hombros de los mejores racimos de viñedos de edad media superior a los 60 años. 27 meses de crianza en barricas de roble de 225 l. 74 % roble francés, 26 % roble americano, 60 % barricas nuevas.

Intenso color cereza picota. En nariz destapa un amplio abanico de frutas rojas, ciruela, zarzamora y arándanos rojos aderezados. En boca sobresale por el equilibrio entre el alcohol y la acidez, la frescura, con unos taninos pulidos y amables que le otorgan una refinada estructura y un paso en boca fresco y delicado, así como un retrogusto de larga amplitud.

De color rojo rubí azulado. Kumquat, jazmín y piedra de chispa. Fresco de textura carnosa y crujiente. Taninos sedosos y solemnes que envuelven esencia de monte. Longitud extrema que predice un fluido muy especial. Garnacha fresca y liviana, cerezas, recuerdos a tomillo y marcado carácter de suelo. Un vino atómico, fino y concreto.

100 % Tempranillo. Color muy atractivo, rojo intenso con reflejos violáceos. En nariz es franco y expresivo, predominan los frutos negros. De su crianza en barrica provienen aromas especiados y sutiles torrefactos. En boca es fresco y ágil, de entrada suave y un largo final. Armoniza con infinidad de platos.

Rojo picota, bien cubierto y ribetes de gran intensidad. En nariz tiene una alta intensidad de aromas, con mucha fruta roja que recuerdan a casis, granada y cereza picota, acabado en un torrefacto. En boca se aprecian unos taninos jugosos de fruta roja como cerezas picotas y granada, con una buena acidez dando frescura y peso.

Rojo cereza picota de capa media alta. En nariz destaca por sus notas a pimiento, fruta roja madura y notas a tostado. En la entrada en boca destaca por su vivacidad, de cuerpo medio-alto. Los taninos son suaves, confiriendo un paso untuoso y elegante.

Tonos rojos violáceos brillantes con sutiles reflejos rubí. En nariz, fruta negra y roja, con recuerdo a coco, vainilla y especias. En boca, frutas maduras con tostados finos de taninos potentes y maduros. Vino complejo, elegante, untuoso y bien estructurado. Tempranillo de viñedos propios en vaso de más de 50 años.

Color ciruela negra de capa muy alta. En nariz ofrece notas de fruta madura, ciruela pasa y orejones sobre un fondo de tabaco y especias dulces. Vino con una acidez equilibrada y gran volumen. En boca la fruta se muestra fresca sobre un fondo goloso y seductor de notas de cacao. Taninos dulces y equilibrados hacen que este vino sea redondo, sabroso y largo.

Color cereza oscuro con tonos vivos, presenta en nariz un bouquet complejo de aromas frutales, ahumados y de especias. En boca es sólido, largo y de gran concentración, lo que augura una buena conservación. Gran intensidad de la fruta para apreciar mejor la tipicidad de la zona. Tempranillo (92 %), Mazuelo y otras variedades.

Vino de tonalidades cerezas y granate de aspecto brillante. Nariz a fruta negra, regaliz y flores de violeta tan característicos del Tempranillo, ensamblado con el aroma especiado y mineral del Graciano. En boca, entrada suave y sensación de elegancia y equilibrio, que termina en una larga persistencia.

Fresco, elegante, tenso. El 10 % se ha criado en depósitos ovoides de polímero, lo que aporta al assemblage final aromas de frutos rojos y florales, perfumados y elegantes, con una boca viva, concentrada, con matices frescos y sabores puros. Es un vino moderno, procedente de viñedos de altura, de clima continental, con un balance final asombroso.

Intenso rojo cereza picota de capa muy alta. En nariz embriaga su aroma intenso y concentrado, donde predomina la fruta madura. En boca tiene ligeras notas de eucalipto, fruta madura, compota y un característico toque mineral final. Llena el paladar con un tanino firme, elegante y sedoso. La sensación frutal y especiada da un final largo y satisfactorio.

Color rojo cereza intenso, de buena capa, con sutiles ribetes teja. De nariz directa con expresión de fruta infusionada que abren paso a una explosión de pimienta negra, clavo. De boca jugosa, paladar fluido, fi no, medio de boca levemente cremoso, combinado por notas licorosas de arándanos negros, especias dulces, regaliz.

Rojo cereza picota muy cubierto, en nariz es intenso destacando frutos negros maduros que ganan intensidad. Durante la cata se percibe una base frutal, matices de los aromas propios del Tempranillo y notas especiadas. En la boca es voluminoso, de tanino maduro y sedoso. El posgusto es largo y muy persistente.

De color rojo cereza profunda con ribetes violáceos. Nariz cautivadora en la que predomina la fruta roja como cereza o frambuesa. Muy buena intensidad. Destaca por su entrada suave, fresca, con una magnífica acidez. Un vino que combina la particularidad de su terruño con una cuidada selección de barricas, que marca un posgusto especiado.

Uvas seleccionadas a mano provenientes de parcelas reservadas. Aromas a cuero curtido, cacao fino y fruta confitada. Expresivo, poderoso, intenso, bien tramado. Complejo y equilibrado. Para grandes platos y paladares exigentes. Syrah y Cabernet Sauvignon.

Cereza picota con ribete granate y capa alta. En nariz destacan los frutos rojos, especias, notas a cedro y complejas notas ahumadas. Paladar elegante, sabroso, taninos aterciopelados, perfecta acidez y gran mineralidad. Final persistente y cálido. Elaborada a partir de un 60 % de Tinto Fino, 10 % de Tinta de Toro y 30 % de Tempranillo de Rioja.

Ensambla las tres variedades presentes en la finca: un 92 % de Tinto Fino, un 5 % de Cabernet Sauvignon y un 3 % de Merlot. El reflejo más honesto del valle de Carraovejas. Equilibrio, estructura y delicadeza presentes sobre un fondo vivo. La pasión por el detalle en cada proceso. La frescura y la elegancia con la personalidad del origen.

El Puntido 2021 es un tinto concentrado con aromas potentes de fruta madura, notas de moca perfumada y recuerdos de caja de cigarros. En boca es voluminoso, goloso y delicado. Con unos taninos maduros, una acidez perfilada y un final largo y elegante. Marcos Eguren lo define como «la mineralidad del Tempranillo en una zona límite de cultivo».

Poder catar vinos tan especiales es un auténtico lujo. La Única de Pagos del Rey es un proyecto diferente de Félix Solís con uvas provenientes de sus bodegas en la Ribera del Duero (zona de Burgos), Rioja (Fuenmayor) y Toro de su prestigiosa bodega Bajoz. La Tempranillo en sus tres versiones con sus crianzas individuales, sin añada porque, en algún caso, es una mezcla de añadas (CVC - conjunto de varias cosechas), al final un coupage que es un homenaje al buen vino. Gastronomía y tertulia, la cultura mediterránea en cada botella. Un placer único para los amantes del vino.

Quod Superius 2018 de Bodegas Hispano+Suizas en Utiel Requena es el fiel reflejo de lo que podemos considerar un gran vino. Variedad local, la Bobal, a la que se le une Cabernet, Merlot y Shiraz. Zona de mucha altura, interior, pero con una clara influencia mediterránea. La variedad Bobal es la que marca el carácter del vino, muy aromático, elegante, sedoso, señorial, se desliza en la boca, te llena el paladar y es largo con mucha armonía. Pablo Ossorio es uno de los grandes enólogos.

Las bodegas riojanas con viñedos singulares tienen una joya a la que se le ha dado el valor que se merece. Dominio de Berzal lo tenía desde tiempos inmemoriales y con ese viñedo ha sacado Dominio de Berzal Laderas de José Luis 2018 para que los aficionados al vino podamos disfrutar. Hay mucha intensidad en este vino, una fruta roja muy fresca, salen notas de tostados en nariz. Y qué rico es, jugoso, con una buena acidez, fresco.

Ese gran personaje del mundo del vino que es David Moreno elabora este David Moreno Vado de la Reina 2018 como un homenaje a esos vinos elegantes que se elaboran para beber y disfrutar. La Garnacha de la Rioja Alta (Valle del Najerilla) que se mantuvo porque venía bien a otros vinos de la zona, ahora, en solitario y seleccionado de viñedos singulares, es capaz de dar fruta y flores y toda esa frescura del clima atlántico. Este vino que expresa la tierra y la personalidad de su creador.

Finca La Montesa 2020 dice Rioja pero es diferente, primero porque es una Garnacha que proviene de la Rioja Oriental (antes Baja) y lo elabora Álvaro Palacios con la idea de transmitir a través del vino el alma del frescor de las tierras altas y el entorno árido donde crecen los viñedos. Un vino que se bebe a gusto, sin complicaciones, directo y al paladar. Sabor, elegancia y largura.

Hace tiempo que los vinos de Arlanza están colocándose entre algunos de los mejores del país. Buezo Petit Verdot Reserva 2005 es un buen ejemplo. Con una muy cuidada elaboración que incluye 16 meses de crianza y 90 en botella, es un vino muy complejo, muy aromático, con fruta roja madura y especias. Tiene una entrada en boca sedosa y se alarga con una buena acidez y una buena estructura. En Arlanza están haciendo vinos diferentes para que los disfrutemos.

Pantocrator 2011 ha recibido entre otros premios el de mejor vino español. Bodegas Tarón, la bodega situada más al norte de la DO Rioja, demuestra su capacidad para hacer grandes vinos con viñedos de más de 50 años seleccionados en un año excepcional. Una elaboración exquisita con dos años de crianza y seis de botella en la bodega. Han pasado más de once años y aún revives la fruta negra, las especias y la elegancia de su conjunto. Sorprende la acidez y la frescura. La han guardado, ahora solo toca disfrutarlo.

Viña Pomal Gran Reserva 2012 es un gran clásico riojano sin complejos porque se enorgullece de sus orígenes, es un vino serio que solo se elabora en años excepcionales. De viñedos situados en torno a la bodega en Haro, tiene fruta negra intensa, aparece la vainilla, la pimienta y el tabaco en boca. Una entrada suave, de mucha elegancia y lo mejor es ver cómo evoluciona en copa.

Se cumplen 60 años de la marca Jean Leon y si hubiera que destacar un vino por su significado debería ser este Jean Leon Le Havre 2013. Este es el vino con el que arrancó su sueño, Cabernet Sauvignon de sus tierras del Penedés. Un vino que destaca por su complejidad, su equilibrio y su elegancia. Y, además, lo han distinguido con la etiqueta clásica.

Valduero es la bodega que más está destacando entre los grandes consumidores. Este Valduero Gran Reserva 2 Racimos Tierra Alta 2014 es un vino excepcional de las zonas más altas de la Ribera del Duero, viñedos de más de 70 años de los que se seleccionan únicamente dos racimos y con cuatro años de crianza, todo está hecho con detalle. Fruta negra, muchas especias y tostados, boca intensa, taninos vivos, muy persistente, lo mejor es cómo va evolucionando en la copa.

Reserva de Remírez de Ganuza 2015 es un vino emblemático de la Rioja Alavesa. Desde su primera añada es un vino que quiere expresar el viñedo viejo de altura del que proviene en Samaniego. Es difícil encontrar un vino con tanta intensidad y elegancia. La entrada en boca tan ampulosa, madura, compleja y señorial es para recordar durante mucho tiempo.

Viña Arana Gran Reserva 2015 sigue siendo la apuesta que hace la Bodega Rioja Alta para presentar un nuevo estilo de Gran Reserva a un público más joven. Frescura, intensidad, que se puede disfrutar ahora mismo pero que tiene un gran potencial de guarda. Se encuentra llena de fruta roja fresca y toques sutiles de tostados y bollería. Es en boca donde destaca la finura, lo amable que resulta y los taninos casi dulces. Un vino con estructura y acidez y de final largo.

Beronia 198 Barricas 2015 es un vino diferente que sorprende. Fruta muy madura en nariz y enseguida aparecen los toques elegantes de las especias como la vainilla y algo de caja de puros. En boca se hace complejo, juegan la fruta y las especias. Está para abrir y beber, pero la acidez te está diciendo que evolucionará a mejor.

Bodegas La Marquesa se ha hecho un nombre entre las grandes de la Rioja. Con este Valserrano Gran Reserva 2016 se afianza aún más. Una selección de sus viñedos más antiguos y una elaboración cuidada dan esos primeros toques de frutos rojos, hierbas y los tostados y la madera elegantes. La entrada en boca es jugosa y cremosa, toda la complejidad de la nariz vuelve a salir y la acidez permite que sea refrescante y largo.

El respeto por el vino se refleja en botellas como esta de Monte Real Gran Reserva 2016 de Bodegas Riojanas. Una Tempranillo con más de 50 años en vaso de parcelas cerca de Cenicero (Rioja Alta) es capaz de dar su mejor expresión de fruta negra, moras, arándanos y especias como el clavo o tabaco y chocolate. Boca cremosa, muy elegante y acidez. Al final lo defines como elegancia.

Para Coto de Imaz, la tradición es un tesoro, por eso Coto de Imaz Gran Reserva 2016 sigue el camino trazado de un clásico riojano. Selección de viñedos, dos años de crianza y tres en botella que sale al mercado en su mejor momento para apreciar en nariz la fruta y las especias y esos ligeros toques de cuero. Su paso por boca es lo que lo hace envidiable Suave, goloso, madera y cueros muy elegantes, redondo y ese toque de acidez que le augura aún más vida.

Corimbo I 2016 que llega de La Horra en Burgos, de donde salen algunos de los mejores vinos de la Ribera del Duero. Este es un vino muy equilibrado, sin aristas. Intensidad en nariz de fruta negra, ciruelas, en la copa se abren frutas rojas. Aparece el paisaje entre las hierbas. Una añada corpulenta que llena el paladar, el final es delicioso por su frescura.

La Fleur Vivaltus 2016 tiene todos los nombres y argumentos a su favor: Montxo Martínez, enólogo e hijo del enólogo histórico de Yllera, y Jean Claude Berrouet (Petrus entre otros vinos), viñedos de altura en la Ribera del Duero de Burgos y tiempo. Han sabido interpretar la Tempranillo (con toques de Cabernet y Merlot) para que nazca un vino lleno de armonía y frescura. Frutos rojos, flores, concentración, pero al final te queda la frescura y la elegancia.

Chivite Colección 125 2017, presentado como IGP Tres Riberas (Navarra), se encuentra entre los mejores símbolos de vinos clásicos, elegantes y con proyección internacional. Procedente de viñedos de Villatuerta en Tierra Estella, es la Tempranillo en su mejor expresión, reflejando la tierra de donde procede. El vino es profundo, elegante, se comporta como el gran vino que es, complejo y equilibrado. Chivite siempre ha hecho vinos para disfrutar ahora o para guardar unos años.

Castillo de Monjardín, incluido entre los Grandes Pagos presenta el Monjardín Tempranillo Especial 2017 elaborado con viñedos de más de 40 años de muy poca producción. Este vino tiene una crianza de dos años en barrica que consigue pulir el carácter de la variedad que presenta notas de fruta negra en nariz, especias y toques balsámicos. Es sedoso en boca y destaca la estructura y la elegancia del vino. Sabes que aquí hay un vino para madurar.

Garnacha Riojana demostrando que es una variedad que jamás se tuvo que arrancar en su día. Conde de los Andes Capítulo II 2018 llega de viñedos casi centenarios en parcelas singulares y con un cuidado muy especial se consiguen este estilo de vinos con un carácter único de personalidad distinguida. Fruta roja fresca, cerezas y flores. Frescura gracias a una acidez de gran elegancia que le aporta al vino distinción. Un vino para beber entre amigos.

Roda I 2018, añada difícil que supone el mejor reto para los grandes enólogos como lo es Agustín Santaolaya, que es cuando presenta los mejores vinos, los que hace con más cuidado y seguimiento. Encuentras todos los matices de fruta roja y negra y las especias que hacen que te guste este vino, que se disfruta entre amigos, y luego la elegancia de una madera que sabe dar consistencia al vino. Un final largo, disfrutón.

La bodega Cornelio es una manera de vivir el viñedo y la elaboración del vino. Hay un tremendo trabajo en los viñedos en vaso en la zona de Rioja Alta. Y en vinos como este Cornelio Imperial Autor 2018 se seleccionan las mejores cepas de más de 50 años. La elaboración es libre, sin criterios restrictivos buscando lo mejor del vino. Fruta intensa, carnosa, especias de la madera que ensamblan perfectamente. En boca, un paso tánico elegante y sedoso, largo y en ese recorrido vuelven a salir la fruta y las especias.

Mayor de Ondarre Reserva 2018 es la expresión tradicional de los mejores viñedos de la bodega, una edición especial proveniente de viñedos viejos de Tempranillo y otras variedades, algunas sin catalogar. 16 meses en barrica y 20 meses en botella antes de disfrutar del complejo aroma de frutas rojas y negras, de las especias como la vainilla, canela o clavo, ahumados que recuerdan al chocolate. Un paso por boca intenso y equilibrado. Un vino cómodo para recomendar porque es fácil y muy elegante en boca.

Desde Páganos llega uno de los grandes vinos de los Hermanos Eguren. El Puntido 2019 llega de una parcela única. Sus vinos siempre han tenido un toque muy personal y reconocible con un equilibrio perfecto entre la acidez y los taninos dulces, carnoso cuando entra en boca, pero fresco en el paladar. Un vino muy sabroso como los vinos de pueblo, para repetir.

Reserva Selección Especial 2019 de la familia Muga es un claro ejemplo de cómo acertar con el consumidor actual con la mirada puesta en la tradición. Las uvas clásicas de Rioja. Una elaboración cuidada da lugar a una armonía de aromas de fruta roja y especias muy clásicas. La entrada en boca es fresca, con una acidez refrescante y con los taninos muy bien dominados. Tiene vida para muchos años.

Bodegas Clunia está en Burgos y la Malbec es una variedad reconocida como argentina, y es el gran acierto de este Clunia Malbec 2019 porque la altura de sus viñedos y el clima se parecía al de Mendoza (Argentina) y acertaron cuando la plantaron. Una elaboración muy cuidadosa da todos los matices de fruta madura y las especias de la madera con un final ahumado. Todo perfectamente ensamblado para un vino diferente y con una buena historia.

Tadeo 2020 de Cortijo Los Aguilares sigue en su línea sorprendente y única. Petit Verdot en la sierra de Ronda donde se ha adaptado perfectamente y elaborado con cariño por Bib García, que lo ha visto nacer y lo sigue haciendo cada año. Muy mineral con frutas negras y una madera perfectamente integrada. El final es fresco porque la variedad en Cádiz se comporta de esta manera. El vino que quieres tener entre manos para hablar de vinos.

Malleolus 2020 es la mejor representación de la bodega Emilio Moro y estamos viendo un ligero cambio en estos vinos, sigue estando todo el carácter de la Ribera del Duero por el que siempre ha destacado, esa fruta negra y madura, el volumen en boca y la estructura, la seriedad y la elegancia que se le supone, pero nos encontramos ante un vino más actual, más fresco, elaborado para compartir ahora mismo.

Quiero pensar que este es uno de los últimos vinos que nos deja la enóloga Elena Adell, que se jubiló de Azpilicueta hace poco más de un mes. Siempre pendiente de los viñedos, ha elegido 16 parcelas de Rioja Alta para la elaboración de Azpilicueta Instinto 2020 y consigue el estilo de vinos que siempre le han gustado, aromáticos en nariz, frutos negros, moras, algo de regaliz y muy fáciles de beber, golosos, suaves y frescos. Gracias por tanto.

La Garnacha Aragonesa está en el top de los vinos españoles gracias a enólogos jóvenes que le han dado el tratamiento que se merece. Fernando Mora es uno de ellos y Las Alas de Frontonio 2021 es un claro ejemplo. Con viñedos de más de 80 años y una cuidada elaboración, uva pisada y crianza en foudres para no molestar al vino, cerezas, violetas y algo de hierbas de campo. Sobre todo frescura, paso por boca suave, elegante.

De una añada considerada como excelente y una familia que busca lo mejor del viñedo y la bodega, salen estos vinos singulares. Figuero Noble 2021 es la mejor representación de la Ribera del Duero de Burgos. En nariz, fruta roja, tostados y especias como el anís o la canela. En boca, la entrada es suave, golosa, fresca con una magnífica acidez, intensidad y persistencia al final. Hay mucha personalidad detrás de este vino que se te hace inolvidable. Pago de Carraovejas 2021 sigue siendo la mejor tarjeta de presentación de una bodega que lleva hasta el último detalle las labores del viñedo, la recolección y la elaboración de sus vinos. El vino debe representar la tierra de donde nace y así es cada botella a la que Pedro Ruiz transmite su concepto de excelencia. Este es un vino fresco, elegante, de los que apetece beber y que transmiten un sentimiento.

Aalto 2021 procede de viñedos con más de 80 años y, desde sus comienzos, siempre ha sido un máximo exponente en Ribera del Duero. Este 2021 mantiene el mejor carácter de esos taninos sedosos firma de la casa, se disfrutan los aromas y en boca hay mucho equilibrio. Destaca la mineralidad y lo largo que es. Esta añada es el mejor homenaje a uno de sus creadores, Javier Zacagnini.

Pago de Cirsus La A Nº5 es un vino complejo, elaborado con una selección de los viñedos de Syrah, Tempranillo y Cabernet por separado y en su momento óptimo. Serio y puesto en el mercado para disfrutar de cada copa. Lo que más destaca es su complejidad tanto en nariz, con fruta de bayas negras, especias y tostados que te llevan al chocolate, como en boca, donde entra sedoso y van jugando todos los detalles que aparecieron en nariz. Profundo e intenso.

Grandes tintos para grandes ocasiones, comidas de alta gastronomía o de cocina más tradicional. Hay mucha diversidad en los vinos fruto de las distintas variedades que se han adaptado y que los enólogos saben expresar la tierra de donde nacen esos vinos.

Salimos ganando todos y disfrutamos más con los vinos.