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Siempre recuerdo cómo me quedó pendiente el comer una Carbonara de verdad en aquel templo de la cocina italiana de nuestra ciudad que era Civico ... 14, que lamentablemente cerró. Pero, aquella deuda, la saldé con creces en mi visita al Restaurante Torino zarauztarra, una gran embajada de la cultura gastronómica italiana de la localidad costera.
Fue mi amigo Juanma Roteta quien me puso sobre la pista, y, me dijo que no tenía que dejar pasar la oportunidad de probar su Carbonara. Una Carbonara como dios manda, de verdad, siguiendo la receta tradicional italiana, aunque con un toque contemporáneo. Por un lado, saltean el guanciale italiano en una sartén, para, una vez en su punto, retirarlo y retirar la grasa. En esa misma sartén saltean la pasta, previamente cocida, al que añaden un poco de la misma agua de la cocción, que con el aceite del guanciale liga y crea la primera cremita. A parte, en un bol mezclan las yemas de huevo, solo usan las yemas, con el parmesano, para crear la crema que es con la que condimentarán la pasta. Añaden la pasta a esa crema, la mezclan, y la sirven en el plato, que terminan con los trozos de guanciale salteados anteriormente que le aportan un toque crujiente más que interesante al plato. Un plato que es puro sabor, que es puro placer, el sabor de la verdadera cocina italiana en boca.
TORINO
Dirección: Bizkaia Kalea 1
Teléfono: 943733034
Comedor: 1 para 70 comensales.
Cierre: martes y miércoles
Precio: carta 20-25€
Paola Franco y Silva Fussetti son los artífices de que podamos viajar a los sabores y recetas italianas sin movernos de Zarautz. Paola, nos recibirá en su casa y nos guiará a través de las propuestas de la carta, una profesional que lleva toda la vida trabajando en hostelería. Mientras tanto, Silva es el artista en los fogones. Sus padres tenían un restaurante en Italia, y, tras alejarse durante varios años de los fogones, volvió a cocinar. Abrieron las puertas del Restaurante Torino en noviembre del 2020. Al ser preguntados de por qué eligieron Zarautz como destino, la respuesta fue por el surf, a Silva le gusta surfear las olas y esta era la localidad referencia surfera más cercana a su hogar.
La auténtica cocina italiana, la esencia y alma de las tradicionales recetas que han traspasado fronteras y son conocidos en todo el mundo. Una cocina italiana de verdad, fuera de imitaciones o copias, una cocina italiana para italianos, o al menos, la que a Paola y Silva les gustaría encontrar en un restaurante que se apellide italiano. Una cocina casera, como aprendió Silva de su familia, un guiño a sus casas, a la tradición, a la historia, sabores y recetas de Italia. Aunque muchos ingredientes lleguen desde el país transalpino, para respetar sus sabores, también quieren mostrar la riqueza de nuestra tierra y mar, valiéndose de productos cercanos para ofrecer una visión de la cocina italiana desde Zarautz. Una cocina con mucho sabor.
No fue fácil completar la comanda en nuestra visita, porque es leer la carta del Torino y apetecerte atacar todos los platos. Nosotros decidimos tocar todos los palos y la verdad que salimos más que satisfechos de la experiencia. Además de La Carbonara, nos sorprendió muy gratamente la pasta rellena. No sabíamos por cual apostar y Paola tuvo a bien ofrecernos los tortelli caseros, la pasta la elaboran ellos mismos, rellenos de alcachofa, ricota y pistacho, toda una explosión de sabor en boca, una delicia.
Potenciaba su sabor el pesto de pistachos. Para empezar, nos dejamos recomendar por el carpaccio de ternera. Un fino y elegante carpaccio que elaboran en su propia cocina. Marinan y ahúman la carne, para luego cortarla en finas láminas que se convierten en puro placer en boca. Lo acompañan de una fondue de trufa muy interesante, donde la trufa no está muy pronunciada, consiguen una fondue muy equilibrada que acompaña a la perfección la carne, cediendo el protagonismo a la ternera. El toque fresco lo aporta la rúcula.
Al empezar a leer el surtido de pizzas, es para volverte loco, ¿Cuál elegir? Paola no tuvo dudas con la pizza Parmiggiana, buscando algo más ligero viendo el homenaje que íbamos a tener. Una pizza que elaboran con una base de tomate, sobre la que juegan con las rodajas de berenjena fritas, queso stracciatella y la culminan con parmesano.
Una pizza que se come muy fácil y que nos dejó más que satisfechos. Para terminar, no podía faltar un buen tiramisú, no hubo dudas, un tiramisú que elaboran siguiendo la receta de la abuela de Silva, que no utiliza alcohol, un buen café, bizcocho y crema mascarpone, ahí se esconde el secreto.
A partir de ahí, propuestas como el ravioli de riccotta y espinacas, el carpaccio de atún o la burratta con speck. Una gran embajada de la cocina italiana, un lugar donde
viajas a las casas italianas sin movernos de Zarautz. On egin!
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