«Los estafadores de criptomonedas te acaban atrapando psicológicamente»
Un irundarra que perdió 20.000 euros en la estafa internacional de la moneda digital advierte sobre los «brokers que te hacían operaciones aunque tú no quisieras»
La denuncia pública en este periódico de Victifin, asociación que reúne a afectados en Gipuzkoa por la estafa internacional de criptomonedas y otros fraudes ... financieros, ha provocado nuevas denuncias y testimonios. Es el caso de Luis, de Irun, que accede a contar su mala experiencia pero sin salir en fotografías. Esta persona comenzó a invertir en criptomonedas hace siete años, antes del boom, pensando que era una buena oportunidad de inversión viendo la poca rentabilidad que ofrecían los bancos. Pero ya entonces esa primera plataforma con la que operó empezó a hacer «operaciones extrañas y perdió el 80% de lo invertido», unos 8.000 euros que se quedaron por el camino. Ahí comprobó que era una actividad «volátil de mucho riesgo, no es como invertir en Bolsa». Al menos, pudo rescatar parte de la inversión.
No obstante, pasado un tiempo, su rastro debió de quedar en internet y nuevas plataformas se pusieron en contacto con él. Acabó invirtiendo con otros amigos, unos 40.000 euros entre todos. No obstante, la experiencia volvió a ser negativa. «Te embaucan, psicológicamente te atrapan. Ellos te dicen que se encargan de hacer todo y vas viendo cómo sube la rentabilidad y vas invirtiendo más, y sigue subiendo y te sorprende cómo va para arriba, hasta que te das cuenta de que son operaciones ficticias». Eran operaciones en el mercado Forex, un tipo de divisa digital. «Tu podías entrar en la plataforma y ver cómo iba, pero no sabías cómo hacían las inversiones. Al final, cuando querías que detuvieran las operaciones, llamabas a un móvil y te cogía alguien ajeno que nada tenía que ver».
Máster en criptomonedas
Volvió a caer en la trampa y acudieron a la Ertzaintza, aunque la Policía vasca «desconocía cómo funcionaba este asunto y poco pudieron hacer». Conocer a Jessica González, responsable de Victifin en Gipuzkoa y víctima también en su día de otro fraude financiero, de otro tipo, le ayudó a dar un giro e intentar recuperar vía judicial el dinero. «Hay muchos mangantes que se aprovechan de la novedad de la criptomoneda. Hay brokers que te guían y animan para invertir dinero en 'x' lugar, pero luego te das cuentas de que son todos de una calaña terrible. Le pedíamos que parara las operaciones cuando veíamos que caía el dinero pero no nos hacía caso. Además, suelen estar en otros países y es difícil dar con ellos», agrega.
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Luis y sus amigos llegaron incluso a llevar a juicio en Valencia a varios presuntos estafadores, pero el juez absolvió a los acusados «pese a que teníamos un delator y todo. No aceptaron nuestras pruebas y el juez zanjó que era un riesgo que asumimos».
Pese a su mala experiencia, que le llevó a perder en total unos veinte mil euros, Luis cree que la moneda digital ha llegado para quedarse y que la clave es «conocer a fondo el tema». Por ello, ha comenzado a estudiar un «máster» sobre criptomoneda para que las nuevas generaciones aprendan bien cómo funciona este «mundo 3.0 que se está creando y que, si lo estudias bien, es increíble». «Ahora viene la 'blockchain'», una especie de monedero virtual, que para Luis es más importante que internet. «Se va a transmitir valor, de una escritura de un piso, de la compra de un coche. Todo va a ir por la 'blockchain'».
Pese a ello, no tiene previsto volver a invertir de momento, ni siquiera en establecimientos regulados y legales como los existentes en algunas capitales como Donostia. Desde Victifin, la asociación que agrupa a víctimas vascas de esa trama con 17.000 afectados en toda España, al menos una treintena de guipuzcoanos, insisten en la necesidad de denunciar aunque muchos afectados «tengan vergüenza», porque es la única forma de que la Er-tzaintza investigue.
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