La orquesta del UAE gana la Itzulia en siete movimientos
Una estrategia ejecutada a la perfección desde el primer kilómetro hasta el último permite a Ayuso obtener su primer gran triunfo internacional
Faltaba Jay Vine, postrado en una cama de la UCI del Hospital Universitario Araba y presente en la mente de sus compañeros. Los seis ... integrantes del UAE en carrera, bien dirigidos desde el automóvil por Josean Fernández 'Matxin', obraron con inteligencia y fuerza para descabalgar del liderato a un Mattias Skjelmose que, respaldado por su equipo, Lid-Trek, vendió caro el maillot amarillo. La sucesión de ataques y maniobras comenzó en el primer kilómetro y continuó hasta el último para dar a Juan Ayuso su primer gran triunfo a nivel internacional. Fueron siete movimientos orquestados e interpretados a la perfección.
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Km. 10
Bax y Arrieta, en la avanzadilla.
UAE inicia su ofensiva. Igor Arrieta y Sjoerd Bax se filtran en una fuga numerosa de 23 unidades en la que Visma Lease y DSM sitúan a tres representantes. EF lleva a dos. Gorka Izagirre también es de la partida. Bauke Mollema, compañero de Skjelmose, ejerce de freno y permite a Lidl-Trek tener por delante un corredor para utilizarle de bastón en caso de necesidad. Por la cima de Azurki el pelotón, del que tira Lidl-Trek con Felline y Bernard, circula a 3:35. La ventaja es sustancial, suficiente para marcar el desarrollo de la jornada y condicionar posteriores maniobras. Esa renta se mantiene casi invariable en Gorla y hasta el kilómetro 64.
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Km.66
Arranca Soler en Krabelin.
Restan 70 kilómetros para meta. Tensión en el pelotón al inicio de la subida a Krabelin. Lecerf (Soudal) se adelanta, pero el ataque de verdad, obra de Marc Soler, llega a continuación. UAE sigue en acción. El catalán, peligroso para la general, se va solo y en la cima tiene 45 segundos de ventaja sobre el líder, arropado por Teo Geoghegan Hart. Más adelante recibirá la colaboración de Bora. UAE no da respiro.
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Km.80
Bax espera a Soler.
Matxin mueve piezas. Descolgado en la ascensión a Krabelin y por delante en el descenso, Bax espera a Soler con la idea de tirar de él hasta la cabeza de carrera. Le hace ocho kilómetros hasta el inicio de Trabakua, donde Soler vuelve a tomar responsabilidades para cerrar el hueco con la fuga.
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Km.91
La cabeza fría, en Trabakua.
Pese al desgaste de Soler, el director actúa con frialdad. Consciente del papel que desempeñará Arrieta en los kilómetros posteriores, no ordena frenar al de Etxarri hasta la cima. Solo a pocos metros del alto, cuando Soler se ha aproximado a 12 segundos de la cabeza, Arrieta espera a su compañero y le ayuda a culminar la persecución. A continuación toma la cabeza de la escapada y se vacía en quince kilómetros de máximo esfuerzo hasta el pie de Izua.
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Km.108
El momento de Ayuso.
Mientras Soler sigue a lo suyo en cabeza pendiente del retrovisor y del pignanillo, Tao Geoghegan Hart realiza su último esfuerzo en el pelotón. Ha llegado la hora de los jefes de fila. El propio líder, Skjelmose, es el primero en acelerar. Le acompaña Carlos Rodríguez. En un primer instante Ayuso pierde unos metros y se mantiene al lado del fiel Del Toro. Ataca Ayuso al poco de unirse los cuatro. Deja al danés y deja a Rodríguez. Ve a los fugados, entre los que se descuelga Soler para hacer el último kilómetro de la ascensión a Ayuso, quien corona con 14 segundos de renta sobre el maillot amarillo. Todo está en el aire.
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Km.116
Skjelmose baja mejor Izua.
Ayudado por Carlos Rodríguez, el líder desciende Izua mejor que la pareja Soler-Ayuso, a quienes neutraliza al paso por Barinaga, a 20 kilómetros de meta. UAE tiene dos opciones. Frenar y lanzar de nuevo hacia delante a Soler o mantener un ritmo fuerte con el ex de Movistar hasta el comienzo de Urkaregi para lanzar allí un último ataque con Ayuso. Optan por lo segundo.
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Km.120
Ayuso, mejor en el tú a tú.
Soler impone un ritmo alto en las primeras estribaciones de Urkaregi-San Miguel. El duelo directo Skjelmose-Ayuso está lanzado. Con las reservas al límite, el del UAE se juega su última carta con un ataque seco. Cede el danés, al contrario que Carlos Rodríguez, que de ayudar al maillot amarillo pasa a convertirse en aliado de su compañero de generación. La lucha es desigual. La diferencia en el alto es de 33 segundos. La Itzulia, salvo accidente, está decidida. Obra maestra del UAE.
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