Urkullu avisa de que «no dudará» en adoptar las decisiones necesarias para frenar contagios
El lehendakari muestra su «preocupación» por el cumplimiento de las medidas anticovid en el inicio de la Semana Santa
El lehendakari, Iñigo Urkullu, ha vuelto a recurrir a su cuenta de Facebook para mostrar su «preocupación» por el cumplimiento de las medidas establecidas para hacer frente a la pandemia provocada por el Covid-19 y recuerda que el seguimiento de todos los indicadores de la incidencia «es permanente cada día» para, a renglón seguido, advertir de que «en el mejor interés para la salud de la sociedad vasca no dudaremos en adoptar cuantas decisiones ayuden a ello». Es decir, para advertir de nuevas posibles restricciones.
Urkullu ha difundido sus reflexiones pocos minutos después de que miles de aficionados despidiesen en Lezama al Athletic incumpliendo las normativa sanitaria y se hicieran públicos los últimos datos epidemiológicos, a todas luces negativos: crecen los contagios en Euskadi, hasta alcanzar los 643 nuevos positivos en el día de ayer, y también aumenta la presión hospitalaria, con 64 nuevos ingresos en planta y 90 enfermos críticos en las UCIs de los hospitales vascos, 6 más que la víspera.
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En su mensaje Urkullu considera necesario reconocer «la dificultad de prever» la incidencia de las diversas variantes «de la cepa salvaje» del coronavirus .y asegura que es «imposible» prever las circunstancias que las condiciones meteorológicas en periodos de puentes festivos, fines de semana largos y periodos vacacionales «puedan hacer más o menos alterables secuencias que se estiman en periodos temporales naturales vinculados a las tasas de incidencia acumulada sean en siete y catorce días y, por lo tanto, a la efectividad de las medidas adoptadas».
Teniendo en cuenta estos factores, el lehendakari afirma que las decisiones sobre medidas restrictivas que se adoptan en el seno del LABI se basan «exclusivamente a criterios sanitarios asumiendo riesgos también en el mantenimiento de un equilibrio en lo sanitario, emocional y económico», con el fin de «velar por la salud pública individual y colectiva». Unas medias que «comportan también la necesidad de medidas complementarias en lo económico que el conjunto de las instituciones vascas está afrontando en base a sus competencias», ya sea a modo de Fondo Covid del Gobierno Vasco u otras propias de cada nivel institucional sean Diputaciones sean Ayuntamientos.
Urkullu reitera que las decisiones que adopta el LABI están limitadas por el real decreto de Estado de Alarma, que impide por ejemplo adelantar el toque de queda, petición que ha realizado al Gobierno central en reiterada ocasiones, o por autos como del TSJPV que permitieron la apertura de la hostelería.
En este contexto, el lehendakari apela al cumplimiento de las restricciones sanitarias en vigor. «No hay mejor medida» hasta que sea posible una inmunidad generalizada «tras el proceso de vacunación» que la «prevención individual y colectiva cumpliendo con aquellas medidas, todas y cada una, que ayudan a cortar, si es posible impedir, la cadena de transmisión y la afección a casos positivos de personas contagiadas y sus contactos«.
Tras reiterar que el virus «viaja en las personas», reconoce que «existe un riesgo en la movilidad, en la agrupación por tiempo excesivo fuera de los grupos de convivencia habituales con y sin las medidas de prevención, así como el uso de espacios interiores poco o mal aireados o ventilados«.
«El virus viaja en las personas, existe un riesgo en la movilidad»
El lehendakari subraya que estamos en fechas «muy complejas», no solo los días festivos de Semana Santa, «también la Semana de Pascua así como el trimestre hoy iniciado», y tras haber vivido «el disfrute de un fin de semana largo» con el festivo de San José «así como los primeros días de esta semana». Y lo hacemos «después de que ya tras las decisiones adoptadas el 5 de marzo en LABI dijéramos que en aquel momento afrontábamos tres semanas críticas. «Las hemos consumido y la tasa de incidencia está en una tendencia ascendente continuada y preocupante».
El lehendakari argumenta las restricciones adoptadas por el LABI, referidas principalmente a la movilidad y a la ocupación de espacios interiores en hostelería en municipios que superan una tasa de 400 casos por cada 100.000 habitantes, cuya relación se actualizará una vez a la semana, en vez de dos como se realizaba hasta febrero, porque «si una localidad ha estado semanas o varios días con una incidencia superior a 400, conviene que cuando consiga reducir esa tasa pueda consolidarla durante varios días. Ello redundará en una mayor seguridad en materia de salud pública para su población«, afirma.
Además, «debe tenerse en cuenta que, especialmente, en poblaciones de entre 5.000 y 12.000 habitantes las tasas son muy inestables y con pocos casos pueden sufrir alteraciones importantes. Un municipio de este tamaño puede registrar una importante bajada en la tasa porque durante tres días acumula buenos datos; pero puede ocurrir exactamente lo contrario durante los días siguientes. También en estos supuestos conviene una consolidación clara de la tendencia a la baja durante varios días«.
Urkullu, que advierte de los riesgos de la movilidad, pero no hace en cambio ninguna referencia al polémico salvoconducto para los vascos que tuviesen una reserva hotelera para Semana Santa formalizada antes del 26 de marzo. Cabe recordar que preguntado al respecto, les animó «a que disfruten» de estas vacaciones tras apelar a la responsabilidad.