El virus se expande sin control y Euskadi notifica 643 nuevos positivos
La presión hospitalaria también crece, con 64 enfermos de Covid ingresados en solo un día y 90 personas en estado crítico en las UCI, 6 más que la víspera
Euskadi ha estrenado las vacaciones de Semana Santa en máximo riesgo de pandemia. Las jornadas festivas arrancan con los contagios al alza y los indicadores epidemiológicos en cifras que no se veían desde hace semanas, un punto de partida que no anticipa nada bueno, ya que estos días son especialmente propicios para el aumento de la movilidad, con el impacto que suele tener en las cifras de nuevos casos positivos y en posteriores hospitalizaciones.
Con el añadido además de la final de la Copa que disputarán este sábado la Real Sociedad y el Athletic de Bilbao en Sevilla. Pese a los insistentes llamamientos para que se cumplarn las normas sanitarias anticovid , bajo el eslogan 'La Copa se queda en casa', y las advertencias por parte de distintas autoridades de que este sábado no se será más permisivo «porque hay vidas humanas en juego», la previa del esperado partido ya está dejando imágenes con flagrantes incumplimientos de las restricciones.
En las últimas horas se han detectado 643 nuevos casos en Euskadi, 12 más que la víspera. Se trata de la cifra más alta de las últimas siete semanas. De las 8.771 pruebas diagnósticas que se realizaron el miércoles, el 7,3% fueron positivas.
Del total de contagios, 239 se detectaron en Gipuzkoa, 29 más que la jornada anterior, 302 en Bizkaia y 99 en Araba.
En Gipuzkoa se han detectado 239 contagios en las últimas horas, 302 en Bizkaia y 99 en Araba
La presión hospitalaria es también muy elevada. En las últimas horas han sido ingresadas en planta 64 personas con coronavirus, 25 más que la víspera. En las unidades de críticos el número de camas ocupadas por pacientes covid Hay 90 enfermos críticos, seis más que la víspera.
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La consejera de Salud, Gotzone Sagardui, no ha ocultado esta semana su preocupación por estos datos. «La tendencia sigue siendo ascendente. Me preocupa sobre todo el futuro impacto que pueda tener. No hemos bajado lo suficientemente para que se alivie la situación de los hospitales», ha lamentado.
El Departamento de Salud no actualiza hasta mañana viernes la información relativa a la incidencia acumulada a 14 días, una tasa especialmente relevante desde que el LABI de la semana pasada decidió fijar en 400 casos por cada 100.000 habitantes el umbral para aplicar restriciones más duras. La incidencia acumulada sigue marcando una tendencia al alza y la de de Euskadi se situaba ayer en 292 casos por cada 100.000 habitantes.
Por territorios, Álava se asoma al umbral de 400 casos en el que se ha fijado el cierre perimetral, con una tasa acumulada lada de 371 casos, por delante de Gipuzkoa (286) y Bizkaia (268). El próximo martes se actualizará la relación de municipios y territorios que serán cerrados. Gasteiz y Bilbao están en serio riesgo, con una tasa de 392 y 354 casos respectivamente. La de Donostia se sitúa en 199.
Mientras tanto, Lazkao, Ordizia, Beasain, Ataun, Idiazabal, Olaberria, Zaldibia, Zegama y Urretxuestán confinados perimetralmente y sus vecinos solo pueden salir del municipio si tienen una causa justificada para desplazarse, como ir a trabajar, al médico o a cuidar a una persona dependiente, o se trasladen al municipio colindante para hacer la compra o mientras practican deporte. O si tenían el salvoconducto de una reserva hotelera para estos días realizada antes del 26 de marzo. Arrasate es el último municipio que ha superado la barrera de los 400 casos.
El Departamento de Salud actualizará también este viernes la información relativa al número reproductivo básico. Ayer se situaba en el 1,14. Especialmente preocupante es la cifra guipuzcoana, la más alta de los tres territorios (1,24). En Araba y en Bizkaia es del 1,09. Este indicador está por encima del 1 desde el 11 de marzo, lo cual anticipa un empeoramiento de la situación epidemiológica, ya que significa que una persona infectada, de promedio, va a contagiar a más de otra persona. Es decir, que la epidemia va a seguir en fase ascendente