El LABI definirá mañana el plan de desescalada y levantará restricciones la próxima semana
El Consejo Asesor modulará las medidas actuales, que seguirán en vigor hasta el domingo, y a partir del lunes prevé dejar una hora más a los bares o abrir las sociedades
Se acabó la espera. El lehendakari Iñigo Urkullu ya ha puesto fecha a la reunión del Consejo Asesor del LABI que dará el ... visto bueno al nuevo decreto que relajará un poco más las medidas actuales para el control de la pandemia. Será mañana por la tarde cuando se despejen las incógnitas que mantienen en vilo a sectores como el hostelero, pendientes de la ampliación horaria hasta la 1 de la madrugada o la reapertura de las sociedades gastronómicas, cerradas a cal y canto desde que estalló la crisis sanitaria por el Covid-19.
Si bien este mismo martes el portavoz del Ejecutivo vasco, Bingen Zupiria, no adelantó fechas sobre el día en el que se reuniría este órgano institucional, el hecho de que la incidencia acumulada en Euskadi haya encadenado otra jornada más en claro descenso puede haber propiciado la celebración de esta reunión y el tomar una decisión que ya se avanzó en el último consejo si se llegaba a este escenario. La incidencia acumulada a 14 días ha disminuido casi 9 puntos en las últimas horas y se situó ayer en los 137 casos por cada 100.000 habitantes, por debajo de la barrera de los 150 que abre la puerta a flexibilizar más las medidas anticovid. Se confirma, por tanto, esa tendencia a la baja, requisito que puso sobre la mesa el lehendakari para atenuar las restricciones. No obstante, había más condicionantes. Euskadi debía aliviar la presión asistencial en las UCI de sus hospitales, hecho que también se ha logrado tras rebajar al nivel 2 del plan de contingencia, que contempla 5 estadios -las unidades de críticos atienden actualmente a 54 pacientes de covid, la cifra más baja desde el 18 de octubre-.
Medidas pendientes
En este escenario se maneja el Consejo Asesor del LABI, que se pronunciará mañana sobre las medidas que quedaron pendientes de revisar en su última reunión el pasado 31 de mayo, si bien no entrarán en vigor hasta la semana que viene.
La comisión estará pendiente también de la inoculación de las vacunas contra el Covid-19 en Euskadi, donde ya se ha inmunizado a más de la mitad de la población mayor de 16 años.
Entre las medidas que se valorarán mañana está la ampliación a seis personas en mesa en hostelería -ahora son cuatro comensales por mesa- y el cierre de los bares una hora más tarde, a la 1.00 en lugar de a medianoche. Además, se prevé, tal y como ya marcó el último LABI, el aumento del aforo al 60% en exteriores de piscinas, terrazas de hotel, jardines y campings, la ampliación de los grupos de personas en la actividad deportiva o la organización de actividades en el exterior de visitas guiadas, turismo de naturaleza o centros recreativos turísticos.
Las claves
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Modular las restricciones Euskadi debía bajar de los 150 casos y aliviar la presión en las UCI, requisitos que ha logrado
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Pendiente El último LABI avanzó que abriría las sociedades gastronómicas pero dejó en el aire el ocio nocturno
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Menos de 150 La incidencia acumulada continúa en descenso y se sitúa en los 137 casos por cada 100.000 habitantes
El verano se acerca y Euskadi se prepara para dar un paso más en la desescalada estival, aunque mantiene su llamada a la prudencia. Aún no se ha logrado el objetivo de los 60 casos por 100.000 habitantes que establece el Gobierno Vasco y que situarían a la comunidad en el nivel 1 de transmisión baja, por lo que hay que seguir extremando las precauciones, tal y como ha reiterado la consejera de Salud en sus últimas comparecencias. Gotzone Sagardui ha dejado claro la necesidad de seguir llevando la mascarilla, mantener la distancia interpersonal, la higiene de manos, así como evitar espacios cerrados y con mala ventilación e interiores e incluso exteriores con aglomeración de personas.
Cautela sí, aunque también dosis de optimismo. Y es que hay cifras que marcan un antes y un después en lo que a la situación epidemiológica se refiere. Que Euskadi haya bajado de esos 150 casos muestra que por fin se ve luz al final del túnel y la vieja normalidad cada vez está más cerca. Según observan en las plantas de hospitalización y las unidades de críticos de los hospitales, el número de ingresos ha mejorado estas dos últimas semanas de forma muy notable, cifras que tienen su reflejo en los principales indicadores. Sin ir más lejos, el pasado 7 de junio, Euskadi consiguió bajar de los 200 casos por 100.000 habitantes, una cifra que no se lograba desde el verano pasado.
Esta tasa es la que no han perdido de vista los responsables sanitarios, también la propia ciudadanía, al ser el principal marcador por el que se guía el LABI para regular las medidas sanitarias. Su evolución ha sido clave estas últimas semanas, en las que la hostelería, uno de los sectores más afectados, sigue pendiente de los pasos adelante que les permiten dar para ir recobrando poco a poco la normalidad.
Los bares y restaurantes podrán servir a 6 comensales por mesa y tener más tiempo para cenas, pero seguirá limitado el consumo en barra. Tampoco parece probable vistos los mensajes precedentes, que el LABI sea más laxo y permita abrir ya el ocio nocturno como en otras comunidades que pueden hasta las 3.00 horas.
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