«Hay modalidades de juego, como las loterías, que la sociedad no las ve como tal»

- ¿Cómo valora los últimos datos de juego en Euskadi?

- Creo que estamos bien. No todo lo que nos gustaría, pero estamos bien. Hemos cogido una senda constante, aunque es tímida, de reducir la oferta y de unos mayores controles sobre las personas que no pueden jugar, esto es, menores de edad y las personas que están inscritas en los registros de prohibidos y autoprohibidos. Para ello actuamos en diferentes líneas, por uno lado las inspecciones -cerca de 4.500 el año pasado-, para controlar los juegos que se están ofertando, que las máquinas estén sujetas a lo que marca en su homologación así como el acceso. Del total de las inspecciones realizadas solo se detectaron 5 casos de chavales jugando, todos ellos en locales de hostelería. Por otro lado insistimos mucho en la prevención, desde diferentes campañas hasta cursos y charlas.

- ¿Preocupa el porcentaje de jóvenes que se inician en el juego 'online'? El reciente informe del Observatorio vasco revela que uno de cada cinco vascos reconoce haber apostado en internet antes de cumplir 18 años.

- Estamos elevando el nivel de medio de edad de incorporación al juego, tanto en jóvenes como en mayores, pero es una de las cosas que debemos seguir trabajando. También es verdad, y no es por escurrir el bulto, que el juego 'online', salvo una pequeña parte, no es responsabilidad del Gobierno Vasco, sino del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, que también hace grandes esfuerzos en ese sentido. Pero sí nos preocupan los incrementos que se dan en el juego 'online' por parte de menores, aunque el porcentaje sea tímido. Creemos que cuanta más discreción tengas, mayor es la apuesta, porque no tienes esa presión del entorno. No igual jugar en un local que en la habitación de tu casa.

- ¿Varía mucho las cantidades que se apuestan dependiendo del lugar?

- La apuesta media en un local de hostelería anda sobre los 5 o 6 euros pero 'online' ronda los 16 euros. Es una gran diferencia.

- Este documento también constata que el juego tiene «una fuerte presencia» en la sociedad vasca y el 66,8% afirma haber visto jugar en el entorno familiar o alguna amistad, en algún momento de su infancia.

- Sí, hay modalidades de juego, como las loterías o la ONCE que muchas veces la sociedad no lo vemos como tal. También a muchísimos nos ha tocado vender boletos de lotería para el club de fútbol del hijo o la hija, y no lo veíamos como algo fatal, también pasa con las quinielas...

- ¿Cree que se puede jugar de forma responsable?

- Sí, perfectamente. Hay que marcarse siempre una cantidad y tiempo máximos para jugar. Pero más que hablar de juego responsable me gusta hablar de la responsabilidad en el juego porque nos atañe a todos: a la administración, a los operadores de juego, a los propios jugadores y a la sociedad. También creo que es una actividad lícita que crea muchos puestos de trabajo, supone cerca del 1% del PIB.