Mikel Oyarzabal: «Con acierto y confianza en nosotros mismos, sabemos que podemos ganar al Real Madrid»

- Llega de otra concentración y otro partido con la selección absoluta. Tampoco descansó como el resto en verano. Hay quien se empieza a preocupar por su estado físico.

- Estoy bien. El hecho de ir con la selección siempre es positivo y si se puede contar con minutos, pues más. Estamos aquí para jugar. Tener todos los minutos que se pueda, también aquí, siempre es bueno. La verdad es que me encuentro bien.

- Llegó de viaje y, pese a tener permiso, se fue a Zubieta.

- Después del viaje, pasar por aquí (Zubieta) y mover un poco el cuerpo viene bien para recuperar. Aquí están encima de nosotros para ayudarnos y solventar cualquier duda, así que por pasar un par de horas y marcharte a casa no pasa nada.

- Entre descansar en casa y marcar el 5-0 a Rumanía, intuyo que elegirá lo segundo.

- A los que hacemos goles y nos gusta hacer goles, siempre nos viene bien marcar y más en un partido así en el que te sientes superior y ves que las cosas están saliendo bien a tu equipo. Terminar con tan buenas sensaciones siempre es positivo.

- Nunca le ha hecho un gol al Madrid. ¿Sería uno más, o especial?

- Siempre es bonito en campos como el del Madrid o Barcelona, equipos que sabes que aspiran a ganar la Liga y hacer grandes cosas en Europa. Me gustaría poder hacer un gol y, sobre todo, poder ganar como lo hicimos el año pasado.

- ¿Besará el escudo si marca?

- Ya he dicho muchas veces que las celebraciones las hago cuando las siento y tal como lo veo en cada momento. Depende de la situación y el modo en el que se dé, habrá una cosa u otra. Ojalá tenga la oportunidad de celebrarlo y tener que pensar en eso.

- ¿La visita al Santiago Bernabéu será un termómetro de lo que es capaz de hacer esta Real?

- Tenemos claro que una buena temporada no se hace ganando en el Bernabéu y haciendo mal otros partidos. Te puede salir mal en Madrid, pero se trata de que en el resto estés más cerca de ganar que de perder y haciendo las cosas bien. Iremos a intentar ganar, pero sin obsesionarse.

- Pero... ¿Se puede ganar, no?

- Sí, obviamente. Sabemos que podemos ganar y tenemos el ejemplo del año pasado. Este año también hemos hecho las cosas bien contra el Atlético de Madrid. Sabemos que podemos hacer daño a cualquier equipo. Obviamente se tienen que dar las circunstancias de que las cosas nos salgan bien, de que tengamos un pelín de suerte, de que sus jugadores más destacados no estén del todo acertados. Pero, sobre todo, de que tengamos confianza en nosotros. Hemos demostrado que podemos hacerlo bien y ganar a cualquiera. Si estamos acertados, ¿por qué no?

- ¿Ha estado el equipo más espeso en las últimas jornadas?

- Al final los rivales también te observan y trabajan para pararte. El partido del Leganés quedó un poco gris por el resultado pero si consigues acertar en dos o tres ocasiones que tuvimos, te vas a casa con un resultado holgado y todo el mundo hubiera visto todo de otra manera. El fútbol muchas veces es estar acertado en las dos áreas y quizás últimamente estamos teniendo más problemas para ver puerta.

- Hablando de los rivales. ¿Nota que le aprietan más? Se lo diré más claro. ¿Sufre entradas más duras?

- Bueno, el fútbol es el fútbol. Hoy en día cualquiera te puede hacer daño y lo de las entradas es inevitable porque estamos en un deporte de contacto. Para eso están ahí los árbitros, para lidiar con todo eso. Son circunstancias del juego.

- Con los árbitros hemos topado...

- Árbitro tiene que haber y, al igual que a nosotros nos gusta hacer nuestro trabajo bien, quiero creer que ellos son profesionales igual que nosotros y su labor es hacer lo mejor posible su trabajo. Querámoslo o no, el árbitro también es un actor que está en la misma película que nosotros y quiere hacer su papel lo mejor posible.

- No hace falta que cite nombres pero, ¿tienen sus preferencias en el vestuario?

- No, la verdad es que no. Cada árbitro tiene sus características, su manera de arbitrar y su manera de comportarse en el trato personal. Todos somos diferentes y no iba a ser lo contrario con los árbitros. Ojalá no se les dé protagonismo al final del partido y nos la den a los equipos.

- Lo dudo mucho pero, si les señalan un penalti a favor, ¿lo tirará?

- No lo sé. Ojalá primero pueda jugar y tener la oportunidad de estar en el campo. Muchas veces son las sensaciones que tienes en el campo las que deciden. Estamos unos cuantos para tirar y depende de las sensaciones que tengamos, veremos.

- Reconocerá, al menos, que llega al Bernabéu con más galones que en pasadas campañas, por su papel en la Real y en la selección.

- Si un jugador no progresa, se estanca y no consigue esa continuidad que en mi caso estoy pudiendo tener. A todos nos gusta seguir creciendo. Creo que seguir jugando partidos, fin de semana va y fin de semana viene, es lo que te hace mejorar. Entrar con 18 años en todo lo que es el fútbol también te hace darle una vuelta a la cabeza y madurar un poco más rápido que otra persona que no está en este mundo.

- Lo ha dicho bien. Fin de semana va y fin de semana viene. ¿Cómo lo hace para no acusar la carga?

- Todos los que estamos aquí nos cuidamos lo suficiente como para que, si nos toca jugar todos los fines de semana, lo podamos hacer. Hay un entrenamiento que no se ve, que es el que haces fuera de aquí. Siempre te gustaría hacer cosas que tus amigos pueden hacer, pero hay veces que toca decir que no. No solo yo, cualquiera a quien le tocara jugar todos los minutos posibles, haría lo suyo para estar disponible.

- Si hay quien se preocupa es porque ve que usted es un líder o un pilar en este equipo, aunque no le gusta que se diga eso, ¿no?

- Por mucho que la gente diga eso, yo no creo que sea así. Por mucho que un jugador esté bien, si el resto no lo está, es imposible sacar las cosas adelante y creo que esto es de todos: tanto de los que juegan como de los que entran después, también de los que no juegan y de los que participan en los entrenamientos de Zubieta haciendo que sean provechosos. Al final eso es lo que hace que un equipo funcione y le vaya bien a final de temporada.

- ¿No se siente como un jugador con un peso específico grande en el equipo?

- Pero al final, son las experiencias adquiridas y los partidos los que hacen que vayas cogiendo responsabilidades, más que ser un tipo de jugador u otro. Se trata de que yo y los que llevan más años podamos hacer el camino más fácil a los que llegan de abajo, para que se adapten lo mejor posible y, entre todos, poder hacer una gran temporada.

- Eso de dar órdenes, echar una bronca o felicitar, ¿va con usted?

- Eso va con la personalidad de cada uno. Sí, obviamente hay momentos en los que hay que echar una bronca, y otros en los que hay que felicitar, pero es algo extensible a todos. Para que un equipo funcione tiene que haber confianza en el grupo y cualquiera le tiene que poder decir a un compañero que esto está bien o aquello está mal. Así podemos mejorar todos juntos.

- No está de acuerdo, entonces, con los que echan de menos una voz autoritaria y carismática en el campo.

- Desde fuera es fácil decirlo. Dentro no lo vivimos así. Somos lo suficientemente maduros y mayores como para saber cuándo se hacen las cosas bien o mal. Uno puede tener un mal día y los primeros en reconocerlo cuando lo tenemos somos nosotros. Entre nosotros estamos para ayudarnos. Hay momentos en los que ayudarse es pegarse un grito para espabilar y otras veces hay que saber lidiar con una situación en la que uno tiene un problema, y saber llevarlo para que pueda superarlo sin pasar un mal rato.

- Llega de una concentración en la que ha coincidido con jugadores como Carvajal, lateral derecho madridista con quien le tocará pegarse. ¿Eso es bueno o malo?

- Cuando pasas los años ya conoces a mucha gente. Muchas veces te enfrentas a los mismos que la pasada temporada. Carvajal intentará pararme, lógicamente, y yo que no consiga hacerlo.

- ¿Han hablado en la concentración del partido? ¿Le comentan algo sobre la marcha de la Real?

- Sí se comenta un poco lo bien que vamos o dejamos de ir, pero sin darle mucha bola.

- Se va Robert Moreno, viene Luis Enrique y... ¿ustedes en medio?

- Son cosas que pasan en el fútbol de una manera u otra y no me voy a mojar ahí. No voy a decir nada al respecto. Son cosas que no están en nuestras manos. No podemos decidir nosotros. Quienes quieran explicar lo que ha pasado, ya lo harán.

- También se habla de Zubieta como posible sede de concentración de la absoluta para la Eurocopa en junio y, más que probablemente, usted estará en la selección. ¿Qué le parece? .

- Ni me va, ni me viene. Es otra decisión que no depende de mí. Lo que tenga que ser será. En este tipo de situaciones, lo que a uno le importa es estar en un sitio bueno, y tener buenos medios. Zubieta los tiene. Había también otras alternativas. Ya se decidirá.

- La visita al Bernabéu, o la llegada del Eibar de la semana que viene. ¿Cuál le motiva más?

- Cada uno tiene su punto. Jugar en el Bernabéu es especial porque quieres medirte contra uno de los mejores de Europa y siempre gusta ganar en su estadio. Eibar es mi pueblo, al que le tengo mucho aprecio y cariño, y donde me gusta estar siempre que puedo con amigos y familia. También será bonito por esa parte.

- El Becerril en Copa...

- Por cómo se ha planteado la competición, este año no te puedes despistar. A partido único, a 90 minutos, en cualquier momento un equipo te puede hacer daño. Trataremos de que el partido se parezca más a lo que nosotros queremos que a lo que quieren ellos. Pero seguro que será complicado.

- Qué le sugiere el equipo palentino.

- No lo conocía. Estuve en el sorteo celebrado en Las Rozas y cuando salió el emparejamiento tuve la oportunidad de saludar y estar unos segundos con un trabajador del club. Nos dijimos que ya nos veríamos en diciembre.