El viento provoca centenares de incidencias en Gipuzkoa

Las previsiones se han cumplido. Las fuertes rachas de viento que han sacudido la costa guipuzcoana este viernes, sobre todo por la mañana, han provocando multitud de incidencias en el territorio. Carreteras cortadas, vuelos cancelados, problemas en el servicio de trenes, vallas derribadas, árboles caídos, contenedores en la vía... es la fotografía que deja en Gipuzkoa un temporal llamado a poner el foco en el mar, pero que finalmente ha tenido en el viento a su gran protagonista. Cinco personas han resultado heridas en una jornada que ha registrado rachas de hasta 140 km/h en la isla Santa Clara y de 137 km/h en Jaizkibel y que se ha cobrado una víctima mortal en Iparralde.

Afortunadamente la situación cambiará este sábado. La previsión de Euskalmet es de un tiempo tranquilo y agradable. Habrá algunos intervalos nubosos a primeras horas, pero a lo largo de la mañana disminuirán y se abrirán algunos claros. A partir de la tarde las nubes altas serán abundantes, pero no lloverá. El viento soplará del sur, pero con mucha menos fuerza que el viernes. No se esperan grandes cambios en las temperaturas, que seguirán siendo bastante suaves.

El domingo la cercanía de un frente traerá más nubes. La nubosidad será más abundante en el oeste del territorio, donde no se descarta que en algunos momentos pueda llover de forma débil. En el este intervalos nubosos, con amplios claros. El viento soplará de componente sur y las temperaturas serán parecidas o algo más bajas.

El anticiclón de las Azores ha sido el causante principal de este temporal que además de viento ha traido consigo este viernes un gran oleaje de fondo. De hecho, el litoral permanecía en alarma roja por olas de hasta 14 metros, aunque la alerta se ha rebajado a naranja hasta las 15 horas de este sábado. Un cambio en la dirección del viento ha evitado que se cumplieran las previsiones sobre el Cantábrico ya que la altura de ola máxima significante registrada ha sido de diez metros en la boya de Donostia. Lejos de los 20 metros que se han medido en la costa de Santander.

A las olas y las fuertes rachas de viento le han acompañado precipitaciones «importantes», sobre todo en la zona del Bidasoa. Esta comarca, junto con San Sebastián, ha sido la «más castigada» por el temporal. Por ello se ha reforzado el parque de bomberos de Bidasoa con personal de Legazpi, según ha informado la Diputación de Gipuzkoa.

El viento ha soplado con fuerza a lo largo de toda la noche y durante la mañana con rachas han superado los 100 km/h en numerosas ocasiones. Los bomberos de la capital han contabilizadomás de 200 incidencias que se suman a otro centenar de los Bomberos de Gipuzkoa en el resto del territorio, ninguna de ellas de gravedad.

Desde primera hora de la mañana, el temporal de viento ha provocado numerosas incidencias en la red viaria guipuzcoana. La diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, ha informado de que el temporal de viento que está azotando Gipuzkoa desde la pasada noche ha generado una «situación complicada» en las carreteras.

Un árbol ha caído en la A-8 a la altura de Irun, lo que ha obligado a cortar un carril. Poco antes de las 10.00 horas se han finalizado las labores de limpieza, con lo que la vía ha quedado abierta totalmente al tráfico. Idéntica situación ha vivido la la GI-636 entre Irun y Behobia, que ha estado cortada hasta las 17 horas.

Según ha explicado Oiarbide, también en la comarca del Bidasoa, parte de la carretera en la zona de la Isla de los Faisanes, en el barrio irundarra de Behobia, ha permanecido cortada también por la caída de árboles. La situación se ha repetido en Hondarribia. Un árbol caído en la N-636, a la altura del Golf, ha provocado grandes retenciones y otros dos árboles se han desprendido en la zona del Puntal, según ha informado el Ayuntamiento.

Tal y como estaba previsto, la carretera de la costa (N-634) ha permanecido cortada totalmente entre Zumaia y Getaria por riesgo marítimo costero durante la pleamar de la madrugada. Pasadas las 8.30 horas se ha reabierto al tráfico, no obstante, un desprendimiento a la altura de Getaria ha provocado que la vía quede totalmente intransitable. Aunque a las 18.15 horas han concluido las tareas de limpieza, la carretera ha permanecido cortada hasta las 22.30 horas entre Zumaia y Getaria por riesgo marítimo-costero. El tramo entre Getaria y Zarautz ha podido ser abierto mucho antes.

Otro desprendimiento, esta vez en Eibar, ha obligado por la tarde a cerrar el acceso de la AP-8 en Eibar dirección Irun.

La diputada foral ha explicado también que se ha cortado la carretera entre Elgeta y Eibar por «un desprendimiento y muchas balsas de agua».

En San Sebastián, la caída de un árbol a la altura de la curva de Anoeta, en San Sebastián, hacia las 4:37 horas ha provocado el accidente de una furgoneta. En consecuencia, tres personas han resultado heridas y han sido trasladadas al hospital.

A Urgencias han sido trasladadas también cinco personas en Gipuzkoa por accidentes relacionados con el viento tales como caídas al suelo o golpes contra vehículos estacionados al ser arrastrados por las fuertes rachas.

El temporal se ha cobrado una víctima mortal en Iparralde. Un agricultor de 72 años ha fallecido al chocar contra un árbol que había caído sobre la calzada debido al fuerte viento en la localidad de Ilharre.

En el aeropuerto de San Sebastián, el vuelo de Iberia programado para las 7.30 horas con destino a Madrid ha quedado cancelado, mientras que el Madrid-San Sebastián de las 7.55 ha sido desviado a Pamplona. Los vuelos Madrid - San Sebastián de Iberia de las 13.10 y 16.10 también se han desviad a la capital navarra.

La fuerza del viento también ha afectado al tráfico de Euskotren, ya que unas vallas han caído a las vías bajo Lasalle, con lo que el tráfico de trenes ha estado cortado hasta las 6:15 horas. Los servicios de cercanías de Renfe en Gipuzkoa también se han visto alterados durante la mañana por averías derivadas del viento, aunque a las 15 horas se ha recuperado la normalidad.

A lo largo de la mañana, los bomberos de la capital han contabilizado más de 200 actuaciones. La peor parte se la han llevado las instalaciones del Real Club de Tenis de San Sebastián donde se han desprendido las cubiertas de la piscina. Lo mismo ha ocurrido con las planchas del mercado de artesanía del Buen Pastor.

La capital permanece blindada ante este temporal. El acceso a los tres paseos marítimos (Paseo Nuevo, Peine del Viento y espigón de la Zurriola) están cerrados. Los accesos a las playas están cortados, como también lo están varios parques de la ciudad.

Por su parte, los Bomberos de la Diputación Foral de Gipuzkoa han atendido sobre un centenar de emergencias, sobre todo relacionadas con caídas de árboles y problemas de tráfico.

En Irun, la iluminación navideña se ha desprendido en el barrio de Amute, y se ha ido la luz en la zona de la Benta y Bernat Etxepare, además del desplazamiento de varias motocicletas en diferentes puntos de la ciudad. Por otra parte, se ha suspendido la feria de productos de caserío que cada sábado se organiza en la calle San Pedro.

Además, ante el riesgo de inundaciones por crecida del río Bidasoa, el Ayuntamiento de Irun ha activado el protocolo de actuación en Behobia con el cierre de compuertas en las zonas más expuestas. Se ha solicitado no aparcar en el parking de la calle María Juncal Labandibar y el bidegorri más cercano al río se ha cerrado al paso.

En Arrasate varios autobuses se han visto afectados por un desprendimiento de tierras en las cocheras de Musakola. El momento el transporte urbano municipal ha visto reducidas sus unidades en servicio de 4 a 3 vehículos, y el Ayuntamiento espera alquilar una cuarta unidad «durante los próximos días» para normalizar el servicio.

Oñati también ha sido una de las localidades afectadas por el temporal. Un desprendimiento ha generado problemas entre Oñati y San Prudencio. Esta vía es actualmente la única salida de la localidad tras el cierre de Udana por obras. Las ya habituales caravanas se han agudizado por el derrumbe y ha complicado la circulación. «Esta carretera es insufrible, si pasa algo como hoy estamos vendidos», se quejaban los conductores.

En Pasaia se ha suspendido el servicio de motoras entre San Pedro y San Juan.

En Zarautz, el agua ha inundado el malecón, mientras que en San Sebastián el Cantábrico no se ha provocado problemas destacables, a la espera de las revisiones correspondientes tanto en el Paseo Nuevo como en el resto del litoral cerrado.

Como dice aquel refrán, después de la tormenta llega la calma. Algo así va a ocurrir este fin de semana con el temporal, aunque en ningún momento se llegará a la paz total en el mar. En cualquier caso, «el sábado las precipitaciones darán un descanso y las temperaturas subirán», apunta Martín, pero «seguirá llegando oleaje de viento», con olas en torno a los siete u ocho metros de altura significante.

Habrá que aprovechar estas horas de tregua para reponer energía y afrontar el domingo con fuerza, día en el que entrará un frente frío que llegará desde Galicia a Euskadi. Primero lo hará por Bizkaia, a eso de las doce del mediodía. Unas horas después alcanzará Gipuzkoa. El oleaje, además, no bajará hasta última hora de la tarde, cuando se quedará en los seis metros de altura. Si bien el domingo no habrá tantas lluvias, el lunes volverán los chubascos a nuestro territorio.