Gipuzkoa llega al ecuador del verano con récord de turistas

La sensación cuando se pasea estos días por los barrios céntricos de San Sebastián es que las calles están llenas de gente. Lo mismo ocurre en las playas cuando el sol se quiere dejar ver, o al acceder a un bar para disfrutar de un refresco. Se trata de una impresión que comparten muchos donostiarras y un tema recurrente en muchas conversaciones. «Se debe a que estamos en verano», sintetizan todos. El estío en la capital guipuzcoana se encuentra ligado a una gran afluencia de turistas y este 2016 sigue al alza tanto en Donostia, como en el resto del territorio. Todo apunta a que va a ser un nuevo verano de récord.

Una vez llegados al ecuador del verano, el sector dedicado al turismo avala que las cifras «son muy buenas en julio, y agosto se presenta igual o mejor». Se está trabajando «muy bien» y el balance hasta la fecha resulta «mejor que en 2015, y eso que el año pasado ya fue excelente». Los alojamientos están obteniendo muchas reservas, lo cual «beneficia también a restaurantes y bares, porque significa que viene gente».

Desde la patronal Hoteles de Gipuzkoa explican que «junio y julio han sido muy buenos en el conjunto del territorio, especialmente en Donostia y en la zona costera». No manejan todavía una cifra exacta de ocupación de este mes que se va, aunque su coordinador, Paul Liceaga, estima que «se ha rondado el 90% en la capital y algo menos en el resto». Desde Nekatur, la asociación de Agroturismos y Casas Rurales de Euskadi, afirman que en julio han llegado al 74% en Gipuzkoa, «un dato muy importante teniendo en cuenta que el año pasado se quedó en el 63,36% y en 2014 en el 54,7%», expresa la responsable Idoia Ezkurdia.

En la Asociación de Hostelería de Gipuzkoa se incide en la misma idea: «Estamos trabajando muy bien este verano, con cifras similares a 2015, aunque el consumo en bares y restaurantes no es tanto como puede parecer si se ven lo llenas que están las calles. Muchos vienen a apartamentos y echan mano de los supermercados. Pero en líneas generales estamos muy contentos», concreta su secretario general, Kino Martínez. El dueño del bar Labrit, Juan Carlos Rodríguez, da fe de ello. «El jueves arrancamos con el pintxopote y ya andamos a tope hasta el domingo. Luego, de lunes a miércoles desciende ligeramente el servicio», afirma.

El sabor agridulce llega de la mano de Aparture, que aglutina los apartamentos turísticos regulados en Euskadi. Aquí se ha producido en julio un descenso del 7% en Gipuzkoa en las pernoctaciones: se ha pasado de un 83% en 2015 a un 76% ahora. Sin embargo, su presidente, Asier Pereda, matiza que, «a pesar de que hemos bajado en este aspecto, hemos incrementado en facturación por primer mes este año». Esta situación se debe a que los pisos turísticos no regulados, «en los que los precios son más bajos porque no pagan impuestos», les ha llevado a cambiar la estrategia en 2016: «Hemos reducido los apartamentos normales y aumentado los de calidad para diferenciarnos. El alquiler de estos últimos resulta más caro que los otros, por eso, aunque la afluencia ha sido menor, las ganancias han sido mayores».

Estos buenos datos en el sector se están dando por «la importante presencia del turismo extranjero y la recuperación del estatal». Así lo explica Paul Liceaga, una afirmación que comparte con el director del Hotel Codina, Fran González: «En verano alrededor del 70% de nuestra clientela es de fuera de España, una situación que se invierte con respecto al resto del año». Esto también lo ha observado José María Agirre, propietario de los bares Juantxo y Gandarias, que asegura que «hay más clientes internacionales, y sobre todo vienen a por pintxos, no tanto al restaurante».

Diferencia en agroturismos

La llegada de turistas extranjeros afecta de manera diferente a los alojamientos. Los apartamentos turísticos regulados siguen la misma línea que los hoteles, ya que en julio solo el 15% procede de España, el resto llega desde Reino Unido (16%), Estados Unidos (16%), Australia (7%) o Noruega (7%). No obstante, el visitante estatal manda en lo referente a los agroturismos y casas rurales. «Este mes únicamente el 22% de las reservas han sido por parte de extranjeros, que generalmente proceden de Francia y Países Bajos», argumenta Idoia Ezkurdia, a la vez que explica que «nuestra oferta se completa principalmente con catalanes, madrileños, valencianos y navarros».

Este éxito turísticos viene fundamentado por la marca San Sebastián. Kino Martínez indica que «la gente está viniendo este año por el atractivo de la ciudad. No se hacen muchas referencias a la Capitalidad Cultural Europea 2016 entre los visitantes, pero sí notamos que cuando hay alguna actividad interesante dentro de su programación se anima a salir más la gente de aquí». Sus palabras van en la misma línea que las de Paul Liceaga: «La Capitalidad es un atractivo más que puede llevar a que algunos alarguen su estancia, pero nadie viene expresamente por ello». Por su parte, Juan Carlos Rodríguez valora que «este año hemos notado un incremento a raíz del Jazzaldia. Se ha propuesto una música más comercial y mucha gente venía después de los conciertos diciéndonos que les habían agradado las actuaciones».

Aunque desde los alojamientos todavía no lo dan por sentado, y creen que se trata de algo que se debe constatar a largo plazo, explican que la situación geopolítica ha podido contribuir a atraer turistas extranjeros. «La inseguridad que se da en otros destinos ha podido ayudar a esta afluencia. Pero todavía no lo podemos afirmar», dice el coordinador de Hoteles Gipuzkoa. Por su parte, Fran González manifiesta que «puede que el terrorismo yihadista esté trayendo a turistas a España, y con ello a San Sebastián, ante la situación en otros países». No obstante, todavía se presenta únicamente como una hipótesis que barajan desde la asociación.

De lo que no hay dudas es de que San Sebastián se erige como el foco principal en Gipuzkoa, y le siguen otras zonas costeras. Desde Nekatur respaldan esta jerarquía, dado que «la gran mayoría se decanta por la zona de Donostialdea, y luego funcionan muy bien Costa Urola, Bidasoa y el Bajo Deba». Paul Liceaga también refuerza esta idea en el caso de los hoteles, dado que «la mayoría de turistas vienen a la capital».

Como buena noticia en este 2016, en el sector destacan que ha aumentado la estancia media. Asier Pereda resalta que «este julio la reserva de los apartamentos ha sido de 6,16 noches, mientras que la del año pasado se quedó en 5,37». En los agroturismos y casas rurales aseguran que «la media el verano pasado fue de 2,9 y en esta ocasión estaremos en 3,2». En los hoteles también creen que se mantendrá esta tendencia, y la causa se debe «principalmente a la llegada de turistas extranjeros de largo recorrido, como de Estados Unidos, México o Australia. Una vez que hacen un viaje de estas características buscan quedarse aquí un buen tiempo».

Poco margen de mejora

A las puertas de agosto, el sector turístico se muestra muy optimista. Se espera que como mínimo sea igual que julio, aunque «siempre se produce un pequeño repunte, ya que se trata de un mes vacacional y cuenta con atractivos como la Semana Grande de San Sebastián», concreta Paul Liceaga. Con relación al año pasado, «resultará difícil un incremento, porque las plazas están prefijadas y agosto ya es de por sí un mes de alta ocupación», argumenta el coordinador de Hoteles Gipuzkoa. Lo constata Fran González al asegurar que «los datos de 2015 son tan buenos que tenemos poco margen de mejora», aunque los dos tienen la esperanza de crecer un poco.

En Nekatur y Aparture también recibirán agosto con los brazos abiertos, dado que las expectativas son «muy buenas». La primera de las dos asociaciones indica que «de momento ya tenemos reservado el 76,57% de la ocupación», por lo que quieren superar el 88% de 2015, dado que «siempre se producen reservas de última hora». Con una cifra similar trabajan en la agrupación de apartamentos turísticos regulados, al tener ocupado a estas alturas el 77,5% de su disponibilidad para el mes en el que entramos.

Restaurantes y bares se quedan a la espera de que la reservas para pernoctar sean elevadas. «Creemos que agosto seguirá la misma buena línea, porque desde los hoteles se habla de manera positiva y eso traerá gente», concreta Kino Martínez. José María Agirre tiene claro que «se va a mejorar con respecto a julio». Eso sí, todo el sector anhela que «el buen tiempo acompañe, porque eso ayuda a que haya más turistas y se queden más tiempo».