Haile y Paul, dos embajadores

No han podido lamentablemente coincidir por sus agendas. Eso sí, los aficionados a este deporte han recuperado las buenas vibraciones que siempre han transmitido estos fondistas. Excelentes atletas, personas con una enorme cultura, siempre agradables y cercanos, lejos del divismo de otras estrellas del deporte. Haile y Paul han estado muy ligados a nuestras carreras de cross. Gebrselassie venció en el cross de Lasarte en 1994, hace 25 años, y su excelsa simpatía nos invadió a todos los que pudimos tratar con el entonces soldado del ejército (luego sumó galones). Y Paul Tergat ganó el cross Muguerza de Elgoibar en 1999. Otro atleta con una personalidad extraordinaria. Cautivó por su seriedad y por su saber estar. Después se convirtió en un empresario –y sigue siendo– de éxito.

Los dos atletas han sido protagonistas de los dos acontecimientos atléticos de la semana. Tergat con el cine como marco y deleitando con su discurso, y Haile ha enamorado con su eterna sonrisa a los populares que ayer estuvieron en la Feria de la Carrera, y hoy y mañana lo seguirá haciendo, con pistoletazo de salida incluido. Haile ha sido un número uno del fondo y del maratón. Luce su condición de exrecordman mundial de los 42 kilómetros, pero nunca olvidará sus orígenes humildes y su cercanía con los runners después de ser un líder carismático en los diferentes pelotones de maratones emblemáticos.

Haile yPaul mantienen una amistad sensacional desde la época de sus espectaculares duelos en Juegos Olímpicos y mundiales en pista. Ningún aficionado a este deporte podrá olvidar aquellas finales en la prueba de 10.000 metros en los Juegos de Atlanta 1996 y Sidney 2000 y en los mundiales de Atenas 1997 y Sevilla 1999. Siempre ganó Haile, siempre fue segundo Paul. Memorable el final y el sprint en Sidney separados por 9 centésimas.

Haile y Paul no han coincidido en Donostia pero frecuentemente se citan en sus países para no perder la amistad que les une desde entonces. Grandes.