Tolosa demolerá el Puente Nuevo para «disminuir el riesgo de inundabilidad»
Se sustituirá por un nuevo puente con un proyecto que se iniciará en junio durante ocho meses y que asciende a 5,5 millones de euros
Tolosa demolerá y sustituirá el histórico Puente Nuevo por un nuevo paso con el objetivo de «disminuir el riesgo de inundabilidad» del río Oria a su paso por el municipio.
La noticia fue anunciada ayer tras la presentación de la alcaldesa de Tolosa, Olatz Peon, y el director de la Agencia Vasca del Agua-URA, Antonio Aiz. La causa de la intervención se debe a la «necesidad disminuir el riesgo por inundación» de este «entorno urbano muy consolidado» en el que «el cauce se encuentra muy alterado», y que cumple con una función importante de paso tanto para peatones de Tolosa e Ibarra como para los vehículos que se dirigen desde el centro a la autovía.
Según afirman desde URA, basándose en los Mapas de Peligrosidad y Riesgo de Inundación (MAPRI), «la causa de desbordamiento del cauce ordinario del Oria a su paso por Tolosa está relacionada con la superación de la capacidad de la sección del cauce por el caudal de avenida, existiendo además, sobreelevaciones de la lámina de agua generada por los puentes».
El proyecto contará con un presupuesto de 5,5 millones de euros y un plazo de ejecución de las obras de ocho meses que se iniciarán el mes de junio. La documentación ya está disponible en la web de URA y se podrán presentaciones alegaciones hasta el 7 de marzo.
La alcaldesa subrayó la «importancia» de esta intervención haciendo referencia al reciente estudio de Ihobe, sociedad pública de Gestión Ambiental del Gobierno Vasco, que refleja que las lluvias torrenciales aumentarán un 20% en Euskadi debido al cambio climático. «Se prevé un incremento de la inundabilidad en los cursos fluviales en veinte o cuarenta años. Somos conscientes de la magnitud de los daños causados por las inundaciones en Tolosa, por lo que es imprescindible adoptar una serie de medidas preventivas que minimicen las afecciones y eviten los daños causados a la población», señaló Peon.
El Puente Nuevo fue construido durante la segunda década del siglo XX «sin la capacidad hidráulica suficiente», dicen desde URA, para «permitir el flujo de las recurrentes crecidas del río». El puente cuenta con una longitud aproximada de 51 metros repartidos en cuatro vanos de 12,75 metros de largo (en el sentido del flujo del agua) y una anchura de 15 metros perpendicular al sentido de las aguas.
El nuevo proyecto contempla la demolición del Puente Nuevo. Primero se desmontará y retirará completamente el tablero superior y después, se demolerán los pilares actuales hasta su base, que se aprovecharán para apoyar las estructuras provisionales necesarias para la construcción del nuevo puente. A continuación, se construirá el nuevo puente ya proyectado.
Barandilla y paneles móviles
Asimismo, se sustituirá la barandilla en la margen izquierda del paseo que bordea el río, entre el Puente Nuevo y la pasarela del Tinglado con una barandilla metálica apoyada en pilastras de hormigón que «protegerá de las posibles caídas» a los peatones. Se pretende así sustituir dicha barandilla por un murete de hormigón armado de 0,5 metros de altura en una longitud total de 145 metros manteniendo las pilastras existentes, con un diseño similar.
A su vez, se prevé la instalación de muros móviles anti-inundaciones tanto en el inicio de la pasarela del Tinglado como en la puerta de acceso al río Oria en la margen izquierda, aguas debajo del puente de Arramele que se almacenarán en el Parque de Bomberos de Tolosa, quien se encargará de su instalación en caso de aviso de emergencia por crecidas.
Una vez acometidas las obras será necesario proceder a la plantación de arbolado urbano en las zonas afectadas por las obras, tanto en la margen izquierda del río aguas arriba del Puente Nuevo, y en el entorno de la rotonda de la carretera.