Hacia un nuevo plan de accesibilidad

Promocionar la accesibilidad no es otra cosa que hacer efectivo el derecho al acceso de todos y todas las tolosarras a los entornos físicos, productos y servicios de uso público, de manera libre y lo más autónoma posible. Esto supone la identificación de las barreras existentes y las acciones necesarias para la eliminación de esos obstáculos.

Tolosa tiene un Plan de Accesibilidad que se redactó hace ya veinte años y que, lógicamente, es necesario actualizar, porque el municipio ha cambiado mucho y también se han modificado necesidades y objetivos. «Pasado ese tiempo, es necesario volver a reflexionar sobre cuál es la situación de nuestro pueblo, y decidir cómo tenemos que avanzar en el futuro», aseguran desde el gobierno municipal.

El propósito del Ayuntamiento es revisar y actualizar el plan para evaluar el grado de accesibilidad de las calles y edificios públicos de la localidad, e identificar y priorizar futuras mejoras. En cualquier municipio existen aún calles, parques, edificios, transportes e instalaciones públicas a las que personas con distintos tipos de movilidad reducida no pueden acceder de manera autónoma. Un Plan de Accesibilidad es la herramienta para analizar todas esas situaciones y proponer las medidas necesarias para su superación.

Este documento se pretende completar con la participación de la ciudadanía. Para ello, se realizarán al menos tres sesiones abiertas a lo largo del proceso. El primero de ellos será el 10 de enero, en el salón de plenos del Ayuntamiento, a las 17.00 horas. Esta sesión servirá para hacer una primera presentación del trabajo que pretende realizar el Ayuntamiento, y se expondrán los aspectos a analizar, criterios, y fases.

En la segunda sesión se darán explicaciones sobre el diagnóstico realizado y se recogerán las propuestas de la ciudadanía y los agentes. En el tercero, el Ayuntamiento dará cuenta de lo redactado en el plan. Las fechas de estas dos últimas sesiones se darán a conocer más adelante. Si se considerara necesario, además, se podrán realizar sesiones complementarias. A estas reuniones podrá asistir cualquier persona interesada.

El Plan de Accesibilidad analizará cuatro ámbitos: la vía pública, el transporte, la comunicación y los edificios públicos.

En las áreas de uso público se analizará la situación de calles, plazas y parques, como la anchura de las aceras, los pasos de peatones, las barreras arquitectónicas, la pendiente, o la idoneidad del mobiliario urbano.

●En el apartado del transporte se analizará la situación de las paradas de transporte público, los asientos de las marquesinas, la altura para realizar la subida y-o bajada, o los aparcamientos habilitados para personas con movilidad reducida, entre otros.

●En la sección de comunicación se valorará la idoneidad de señales, semáforos, bolardos, escaleras, papeleras y otros elementos de las vías públicas y edificios. Y en cuanto a los edificios públicos, se realizará un inventario e inspección de los edificios, teniendo en cuentra, entre otras cosas, la anchura de las puertas, los aseos adaptados, vestuarios, entradas y salidas o el grado de deslizamiento del suelo.

Hace veinte años por estas fechas, cuando se aprobó el Plan de Accesibilidad, la situación de Tolosa en cuanto a las barreras arquitectónicas (baches, aceras altas, escaleras...), como obstáculos para el peatón, y sobre todo para los coches de niños o personas minusválidas -incluyendo edificios públicos-, dejaba mucho que desear. Esta obviedad y la necesidad de atajar el problema derivó en el encargo por concurso, a una empresa especializada llamada Ikersare, de un plan de accesibilidad, que determinó cuál era la situación concreta de Tolosa y qué detallabatambién los pasos que hay que dar para superar todas estas barreras. A partir de 2004 se han ido, poco a poco, traduciendo en acciones tangibles las necesidades dimanadas de un plan que, lógicamente, se ha quedado obsoleto y es necesario actualizar.