La procesión de Viernes Santo reunió a cientos de personas en Segura

Tras dos años de ausencia por la pandemia, Segura ha recuperado este año los actos de la Semana Santa y las procesiones se han celebrado con brillantez. Después de cumplir con los actos del jueves, la jornada del Viernes Santo arrancó con el vía crucis desde la ermita de Santa Engrazi al convento, que realizaron decenas de fieles. Por la la tarde se celebró la función litúrgica, que finalizó con la Ceremonia del Descendimiento en la parroquia. A continuación tuvo lugar el desfile procesional en el casco histórico, con los pasos que salieron el jueves, más el arcángel San Miguel, el Sepulcro y la imagen de la Dolorosa. Cientos de personas aprovecharon el buen tiempo y se acercaron a la localidad del Goierri, para presenciar en respetuoso silencio la marcha religiosa.

La emoción de la procesión de Viernes Santo se sintió en calles de Segura desde que los txistularis salieron de la iglesia tocando el «Gernika» de Pablo Sorozabal. Durante los 60 minutos que duró la marcha religiosa sólo se escucharon a los txistularis, al coro parroquial, y a los los tambores y cornetas de los soldados romanos. La banda de música de Legazpi, que solo participa en la procesión del viernes, aumentó aún más la impresión que transmiten las imágenes que formaron el desfile; San Joan Evangelista, La Oración del Huerto, La Flagelación, Ecce Homo, Cirineo, Cristo Crucificado, La Piedad y La Dolorosa hicieron el tradicional recorrido por las calles a hombros de los costaleros, junto a los pasos vivientes de los niños nazarenos, penitentes y soldados romanos.

El paso viviente del arcángel San Miguel, acompañado por los angelitos, es uno de los protagonistas destacados de la procesión del Viernes Santo. Hasta este año lo encarnaba siempre un chico de 14 años y por primera vez el viernes, una chica, Sara Izagirre, se vistió de San Miguel. Sara tenía la ilusión de salir de San Miguel, de ser la primera chica en hacerlo y lo hizo muy bien, vestida con el llamativo traje que hace singular el paso y con la espada y el escudo en las manos. El viernes en la procesión de Segura se dio otro paso para que todos los chicos y las chicas que quieran puedan ser parte del desfile procesional.

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