Ordizia
«La temporada está siendo mucho mejor de lo que esperaba»Actualmente jugadora del equipo sénior femenino, es entrenadora del cadete femenino en el Ordizia Saskibaloia K.E. y seleccionadora del cadete femenino de GipuzkoaSara Imaz Bravo Jugadora y entrenadora de Ordizia Saskibaloia
Amaia Núñez
ordizia.
Sábado, 6 de diciembre 2025, 20:43
Desde que comenzó en el baloncesto cuando era una niña Sara Imaz ha pasado por todas las categorías y,hoy en día, es un referente al ser la primera ordiziarra miembro del staff de la selección de Gipuzkoa.
–¿Cómo se inició en el mundo del baloncesto?
–Como la mayoría de los niños de esta zona, participé en el deporte escolar en la ikastola, lo que me hizo probar varios deportes. Comencé en un equipo de diversas edades, entrenando en Urdaneta y combinándolo con otros deportes como natación o esku pilota. Con el tiempo tuve que elegir un único deporte y fue entonces cuando decidí dedicarme exclusivamente al baloncesto, aproximadamente cuando estaba en tercer año de la ESO.
SELECCIONADORA«Lo que más ilusión me hizo es ver cuánto crecieron a nivel personal como en su juego»CONSEJOS«Que no pierdan nunca la ilusión por venir a entrenar, aprender y compartir tiempo»
–¿Qué tiene este deporte para que pueda gustarle tanto?
–Para mí, el baloncesto es mucho más que un simple deporte, es parte de mi felicidad, como si fuese mi cura. Cada vez que entro a la cancha, dejo atrás todo lo que me preocupa o me agobia. Es mi manera de desconectar del mundo. El baloncesto me ha dado mucho más de lo que nunca habría imaginado: he conocido a personas increíbles que hoy son mis amigos, he vivido experiencias que me han marcado y he aprendido valores como el esfuerzo, la constancia y el trabajo en equipo.
–En casa, los tres hermanos practican este deporte, ¿Viene de familia?
–En realidad, no. Mi padre fue jugador de pelota, y mi madre nunca ha practicado deporte de manera formal. Es cierto que jugó al baloncesto por algunos años, pero no fue algo serio. Como he dicho, empecé a jugar al baloncesto por el deporte escolar, y creo que mis hermanos también, y por haber visto muchos de mis partidos.
–Ha pasado por todas las categorías. ¿Con qué temporada se quedaría?
–La verdad es que no sabría quedarme con una única temporada, pero si tuviera que elegir una o dos, me quedaría con la temporada en la que ascendimos a Liga Vasca. Fue una experiencia increíble y logramos muchos objetivos como equipo, algo que nos costó varios años conseguir; y también con la temporada pasada de junior, por el equipo y las amistades que hice.
–Esta temporada, después de algunos años, Ordizia cuenta con un equipo sénior femenino. ¿Qué lugar ocupa?
–Soy la base del equipo y una de las jugadoras que ha estado desde el principio del proceso de crear el equipo ayudando a formarlo. Me encargo de dirigir el juego, aportar estabilidad y experiencia. Después de varios años sin equipo senior femenino, es un orgullo ver cómo con esfuerzo y compromiso hemos conseguido sacarlo adelante.
–¿Cómo es el ambiente en el equipo sénior y cómo está siendo la temporada?
–Es verdad que al comenzar la temporada tenía algo de miedo sobre cómo sería el ambiente del equipo, ya que éramos jugadoras de diferentes edades y ámbitos, y apenas nos conocíamos. Sin embargo, creo que hemos logrado crear muy buena relación dentro del grupo. En cuanto al desarrollo de la temporada, está siendo mucho mejor de lo que esperaba. No sé qué pensarán las entrenadoras o mis compañeras, pero, desde mi punto de vista, estamos en un punto que jamás habría imaginado: llevamos siete victorias de siete partidos.
–Además también es entrenadora del equipo cadete femenino de participación.
–Empecé hace tres temporadas, con niñas en categoría alevín. Al principio no estaba muy motivada, pero con el tiempo le fui cogiendo gusto. El año pasado continué con el mismo equipo, ya que no quería ir cambiando cada temporada, y jugamos la liga de minis, en la que nos fue bastante bien. Lo que más ilusión me hizo fue ver cuánto crecieron las jugadoras, tanto a nivel personal como en su juego. Además, el año pasado tuve la oportunidad de ser ayudante en el equipo cadete femenino de liga vasca, una experiencia de la que aprendí muchísimo. Este año he asumido la responsabilidad de entrenar a un equipo cadete, lo que supone un nivel superior, pero que también me motiva mucho.
–¿Qué objetivo se ha marcado para esta temporada?
–Esta temporada, al ser mi primera experiencia entrenando en esta categoría, me he propuesto disfrutar y aprender todo lo posible. Considero que, antes que los resultados, lo más importante es crecer como entrenadora y seguir obteniendo experiencia. A partir de esa base, mi meta es llevar al equipo lo más alto que podamos llegar, siempre priorizando el esfuerzo, la mejora continua y el trabajo colectivo. Además, si lográramos clasificarnos entre las dos primeras en esta primera fase, sería un gran motivo de orgullo y motivación.
–¿En qué faceta se encuentra más cómoda?
–Aunque disfruto mucho de ambas facetas, actualmente me siento más cómoda como jugadora, ya que no tengo tantas responsabilidades. Aun así, ser entrenadora me resulta muy satisfactorio, sobre todo cuando veo que lo que trabajamos en los entrenamientos se refleja en los partidos.
–Esta temporada llega la oportunidad de formar parte del staff técnico de la selección de Gipuzkoa...
–La oportunidad de formar parte del staff técnico de la selección de Gipuzkoa no la busqué ni me la planteé; simplemente surgió y vino dada. A pesar de eso, ha sido una experiencia muy enriquecedora que me ha aportado muchísimo a nivel de entrenadora. Además, me permitirá aplicar todo lo aprendido en mi propio equipo.
–Y con ello, llega el primer torneo Euskadi-Navarra en la que quedan campeonas en categoría cadete femenino.
–Ha sido una experiencia increíble y sobre todo, muy enriquecedora, tanto en lo personal como en lo deportivo. Participar en mi primer torneo 'Euskadi-Navarra' y conseguir el título fue algo muy especial. No solo por el resultado, sino por todo el proceso que hubo detrás. Durante el torneo aprendí muchísimo: a gestionar la presión, a adaptarme a nuevas situaciones y a mantener la calma en momentos decisivos. Esta experiencia me ha reafirmado que el baloncesto es algo más que un deporte: es una escuela de valores, esfuerzo y compañerismo.
–Es la primera mujer del Ordizia Saskibaloia K.E. en formar parte del grupo de entrenadores de la selección de Gipuzkoa. ¿Qué le hace sentir?
–Es un enorme orgullo para mí haber tenido la oportunidad de formar parte del grupo de entrenadores de la selección de Gipuzkoa, y aún más por ser la primera mujer del Ordizia Saskibaloia K.E en conseguirlo. Es un reconocimiento que va más allá de lo personal; representa también el esfuerzo, la constancia y la pasión que he puesto en el baloncesto desde pequeña. Me enorgullece poder abrir un pequeño camino para que otras chicas del club vean que también pueden llegar a estos espacios y que el trabajo y la dedicación realmente dan sus frutos.
–¿Cómo compagina todo esto con su vida personal y estudios?
–Creo que compagino todo bastante bien. Soy una persona organizada y eso me permite mantener un equilibrio entre los estudios, mis responsabilidades y mi vida personal. Es verdad que el baloncesto me exige dedicarle bastante tiempo, pero aun así siempre saco espacio para todos los demás ámbitos de mi vida: los estudios, mi familia, mis amigos... No dejo que una cosa me aparte de la otra, porque cada parte es importante para mí. De hecho, cuando tengo que estudiar, el baloncesto se convierte en mi momento de desconexión.
–¿Cómo ve al club?
–Creo que el club este año ha hecho cambios que están siendo muy beneficiosos, tanto para el propio club como para todos los jugadores que formamos parte. La creación de muchos equipos nuevos ha sido otro gran paso, porque ofrece más oportunidades de jugar, desarrollarse y seguir creciendo. Cuantos más grupos haya, más espacios se abren para que cada jugador encuentre su sitio y pueda evolucionar tanto individual como colectivamente.
–Sabiendo que es un referente para las categorías inferiores, ¿qué les diría?
–Que disfruten cada momento. El baloncesto, como todo en esta vida, se vive mejor cuando lo haces porque te gusta de verdad. Que no pierdan nunca esa ilusión por venir a entrenar, por aprender y por compartir tiempo con sus compañeros. También les diría que luchen por sus sueños, por grandes o pequeños que parezcan.