La activación de la emergencia sanitaria pone en guardia al sector turístico de Gipuzkoa en vísperas del puente
Incertidumbre entre los hoteleros y hosteleros por las restricciones que puedan adoptar el Gobierno Vasco
La incertidumbre vuelve a reinar en el sector hotelero y hostelero de Gipuzkoa después de que el Tribunal Supremo haya avalado el uso del pasaporte Covid en Euskadi y el Gobierno Vasco haya decidido decretar la emergencia sanitaria, el paraguas jurídico que permite la implantación de nuevas restricciones. También se activará, aunque de momento se desconoce cuándo, la Ley vasca Antipandemia, que recoge esta medida.
«Con la decisión del Supremo tendremos un marco jurídico completo para analizar las medidas a adoptar en función de lo que la legalidad permita y la situación epidemiológica requiera»», ha explicado este martes la consejera de Salud, Gotzone Sagardui, quien no ha adelantado las restricciones que se podrían implantar.
La falta de certezas sobre las futuras limitaciones ha puesto en guardia al sector turístico en vísperas del puente de la Constitución, una escapada de 5 días de duración en plena campaña navideña, para la que se han engalanado e iluminado especialmente ciudades como Donostia.
Los hosteleros de Gipuzkoa aguardan a conocer en qué se concretarán las restricciones, aunque se muestran hastiados de estar, «de nuevo», en el punto de mira. «Lo que sabemos es que han autorizado el pasaporte Covid. No es que estemos en contra del pase sanitario, pero sí en que se exija solo en hostelería, cuando en la actual ola la mayoría de contagios se están dando en niños de corta de edad, que no son nuestros clientes. ¿Qué se soluciona cerrando un bar?», señala Haika Aizpurua, miembro de la junta directiva de Hostelería Gipuzkoa. A juicio del sector, el pasaporte Covid debería exigirse en «cualquier área» para empujar a las personas no vacunadas a que lo hagan y den el paso.
Aizpurua tiene un negocio de ocio nocturno, está ultimando las obras de otro y gestiona un restaurante, «así que la incertidumbre en mi caso es total». Avanza que los hosteleros recurrirán a los tribunales si finalmente se establecieran medidas restrictivas de horario y aforos «solo para nosotros».
«¿Para qué sirve que me cierren el local y luego la gente se junte en la calle bebiendo? Ya hemos visto qué ha pasado en anteriores olas». También critica la «incongruencia» que a su juicio supone «que los Ayuntamientos estén con la retirada de las terrazas que se ampliaron por el coronavirus y el lehendakari hable a la vez de que es preferible estar al aire libre porque hay menos riesgo de contagio».
Aizpurua advierte de que si se vuelven a aplicar medidas que reduzcan horarios y aforos «supondrá la puntilla para muchos establecimientos, porque no estamos hablando de negocio, sino de supervivencia. Algunos hosteleros ya no pueden aguantar más».
«¿Qué se logra cerrando o limitando el horario de un bar cuando los que se están contagiando son niños?»
Haika aizpurua
Hostelería Gipuzkoa
A la espera de que el Gobierno Vasco concrete las restricciones, «ya se están dando cancelaciones» de reuniones prenavideñas como comidas y cenas de empresa. «Las empresas no se atreven», dice.
Los alojamientos turísticos no están teniendo, de momento, muchas cancelaciones, pero sí muchas preguntas e inquietud entre sus clientes. «Las empresas que han ofrecido políticas de cancelación más flexibles están recibiendo llamadas de clientes preocupados por la situación epidemiológica en Gipuzkoa, pero por el momento, la mayoría no están cancelando sus reservas», explica el presidente de Aparture, Asier Pereda. Las cifras de reservas que maneja la Asociación de Apartamentos Turísticos de Euskadi son «por el momento», buenas, con ocupaciones que rozan el 90% en las noches del sábado y el domingo. «Sin embargo, de cara a navidades y primavera de 2022, las reservas se han ralentizado significativamente», lamentan.
Desde la sección alojamiento de Hostelería Gipuzkoa prevén para el puente una ocupación superior al 75%, a la espera de lo que pueda pasar los próximos días. «El 48% de los asociados nos comunican que han tenido cancelaciones, el 52% no», explica su responsable, Alberto Aguas. Entre el 50-60% de los viajeros que esperan son madrileños y catalanes, un 15,20% franceses y el resto provienen de otras comunidades.
«Llaman cliente preocupados por la situación, aunque de momento no están cancelando las reservas»
asier pereda
Aparture
Los alojamientos rurales agrupados en Nekatur tienen una ocupación prevista del 67% para el puente de diciembre, un buen dato ya que supera el 65% de hace dos años. Pero sus responsables no esconden su inquietud ante las restricciones que se avecinan y la previsión meteorológica, que suele incidir en las cancelaciones.
En el sector desconocen hasta dónde llegarán las medidas con las que el Gobierno Vasco quiere contener la escalada de contagios. Muchos recuedan aún lo sucedido con la Semana Santa, aunque la situación actual es distinta. Sorpresivamente, el LABI aprobó una disposición adicional por la que se permitía a aquellos ciudadanos que tuviesen una reserva de alojamiento hecha con anterioridad al 26 de marzo seguir con sus planes aunque residiesen en un municipio confinado o se desplazasen a uno que estuviese cerrado.
