Osakidetza empieza a recurrir a personal jubilado para tratar de descolapsar ambulatorios

Su labor será tramitar las centenares de bajas que se han solicitado durante estos primeros días. Cada uno de estos trabajadores jubilados harán cerca de 70 bajas diarias, aliviando así el trabajo de los médicos en activo. No obstante, en las OSI que no han logrado incorporar nuevos efectivos serán los médicos de familia los encargados de gestionar todas las bajas. Ya han recibido un documento 'excel' con todas las solicitudes, apuntan desde Osatzen, sin entender esta medida cuando lo que se busca es «descargar» a estos profesionales de ese trabajo más administrativo.

En cualquier caso, la gestión de estos documentos es solo uno de los nuevos retos a los que se está enfrentando el personal sanitario tras la irrupción de la variante sudafricana, mucho más transmisible que las anteriores cepas. La confusión que generó el cambio de protocolo hace cinco días sigue sin resolverse. «Estamos recibiendo muchas llamadas de gente confusa porque no saben cuándo terminan la cuarentena», admiten desde Osatzen, que aclaran que el nuevo protocolo elaborado por el Ministerio de Sanidad, junto con las comunidades, está dirigido solo a aquellos que han sido diagnosticados a partir del 30 de diciembre. Es «absurdo», pero quienes han dado positivo antes van a tener diez días de aislamiento y después, siete, un cambio «inexplicable» para muchos expertos.

Las dudas de la población van más allá. A quienes no saben cuántos días tienen que permanecer en sus casas o, dependiendo del caso, en sus habitaciones, se suman quienes han solicitado la baja online sin recibir ninguna respuesta. Los miles de contagios diarios en Euskadi han saturado la red de Osakidetza y son muchos los contagiados que pese a haber pedido la incapacidad laboral por Covid-19 no han recibido ninguna confirmación y aguardan su baja días después de haberla solicitado.

«El descontrol es importante y cada OSI hace lo que puede», se defienden desde Osatzen, que tienen una sensación de «mucho volumen» de trabajo. La semana pasada fueron muchos los profesionales sanitarios que, como el resto de la sociedad, cayeron contagiados, y quienes se resisten al virus deben afrontar el doble de trabajo con menos personal. «En definitiva, un caos. Y la gente sigue teniendo como referencia al médico, no le sirve lo que diga la enfermera, cuando estas son las especialistas y las que están llevando todo ese tema».

¿Y cuando termina el aislamiento, qué? Esta es una de las preguntas más repetidas. «El protocolo dice que pasado una semana ya no se transmite, pero escasean los estudios de transmisibilidad con esta variante». Por eso, desde Osatzen se limitan a seguir el plan de Sanidad, aunque dudan de si realmente se trata de una decisión sanitaria y no «política o económica». Sea como fuere, terminado el confinamiento no es necesaria ninguna prueba diagnóstica.