Los alumnos vacunados no harán cuarentena cuando se registre un positivo en su aula

«Las escuelas son espacios seguros», insisten los responsables educativos del Gobierno central y las comunidades autónomas. El problema es que en las últimas dos semanas las escuelas han permanecido vacías y sus ocupantes –trabajadores y alumnos–, han estado haciendo una intensa vida social en un entorno en el que los contagios se están multiplicando. El reto de las administraciones es lograr que los centros docentes continúen siendo «espacios seguros» a partir del día 10, cuando muchos adultos y niños que crucen el umbral de las escuelas puedan estar contagiados sin saberlo.

Los ministros de Educación, Sanidad y Universidades mantuvieron ayer una reunión con los responsables educativos de las comunidades autónomas para abordar la inminente reanudación de las clases. Del encuentro surgió la decisión unánime de regresar de manera presencial, una medida por la que apostaba el Gobierno Vasco. Según afirmó tras la reunión la ministra de Sanidad, Carolina Darias, este grado de consenso fue posible gracias a la constatación del «impacto mínimo de la pandemia en los centros educativos». «Ha sido una decisión de país» que atañe a todo el «territorio nacional», añadió.

En cuanto a la duración de la cuarentena para los estudiantes se mantendrá el protocolo actual por igual para menores y adultos, aunque Sanidad está a la espera de una nueva decisión de la Ponencia de Alertas y la Comisión de Salud Pública para la flexibilidad de los días de aislamiento para los infectados. Darias no descartó ayer eliminar las cuarentenas por casos de Covid-19 en los centros educativos. De hecho, está estudiando la posibilidad de que los contactos estrechos en Infantil y Primaria no tengan que enclaustrarse y ampliar la consideración de brote a tres o más casos en colegios e institutos. La ministra recordó que las cuarentenas se han bajado de diez a siete días para los que no estén vacunados, tanto si son niños como si son adultos. «Se han modificado para dar una respuesta estratégica», dijo.

La propuesta de eliminar las cuarentenas está siendo analizada por el departamento vasco de Salud, cuya máxima responsable, Gotzone Sagardui, se limitó ayer a señalar que «se sigue trabajando en los protocolos» y anunció «que si a lo largo de esta semana hay algún cambio se dará a conocer».

Una de las principales razones para mantener el regreso presencial a las aulas ha sido la alta tasa de vacunación, «la mejor arma para luchar contra la covid», insistió Darias. En España hay un 86% de vacunados con pauta completa entre la población de 12 a 19 años, y un 28,8% con primera dosis entre los 5 y 11 años, gracias también al «papel fundamental» de los centros educativos. En Euskadi, desde que Osakidetza comenzara el pasado 15 de diciembre a vacunar a la población infantil menor de 11 años, ya son tres de cada diez niños de entre 5 y 11 años los que han recibido al menos la primera dosis de la vacuna contra el Covid-19.

Según los datos del último boletín de vacunación del departamento vasco de Salud publicados el pasado lunes, el 34,9% de los niños en esta franja de edad cuentan ya con el primer pinchazo de la vacuna y el 4,1% tienen la inmunización completa. Son estos niños los que no deben guardar cuarentena en caso de que se registre un positivo en su aula. Es un porcentaje pequeño que irá creciendo a medida que pasen las semanas y aumente el ritmo de vacunación. Sagardui reveló ayer que Euskadi recibió el lunes 36.000 vacunas pediátricas más, lo que permitirá reforzar la vacunación en el colectivo de 5 a 11 años, que estos días aprovechan también las vacaciones para acudir por ejemplo al frontón Atano de Donostia a recibir su dosis.

Como los meses anteriores, las medidas de prevención proseguirán con rigurosidad, con las reglas básicas como la ventilación cruzada, el lavado frecuente de manos, la higiene máxima y el uso correcto de mascarillas, también en los patios. «En los días siguientes seguiremos viendo una subida de la incidencia», afirmó la ministra de Sanidad. «Estaremos viendo los efectos de Nochebuena y de fin de año. Pero hay una menor gravedad, que tiene que ver con la variante ómicron y la altísima tasa de vacunación».

En el País Vasco, el Departamento de Educación prevé mantener el protocolo de actuación sin apenas cambios. «Se matizará alguna cosa, pero básicamente será el mismo. No va a haber variación», indicaron fuentes de la consejería de Jokin Bildarratz.

Por su parte, el ministro de Universidades, Joan Subirats, afirmó que en la Enseñanza Superior, que empieza un periodo de evaluación, «se está trabajando para que los estudiantes contagiados no pierdan la convocatoria de exámenes».