Amós García: «No veo la necesidad de una tercera dosis para la población de entre 18 y 60 años»

Mayores de 60 años y sanitarios. Los mayores de 60 años podrán recibir una tercera dosis de la vacuna contra el SARS-coV-2 tal y como recomendó el miércoles la Ponencia de Vacunas del Ministerio de Sanidad ante el aumento de contagios en el Estado. Amós García comparte esta decisión de que debe ser este colectivo, tras el de los mayores de 70 años, el siguiente en ser vacunado con una nueva dosis de refuerzo. También avala la inmunización para profesionales sanitarios y sociosanitarios. «Es una medida lógica, ya que es un sector fundamental en estos momentos por el embate de la pandemia. Es clave que estén bien protegidos ya que por su exposición al riesgo tienen mayor posibilidad de infectarse aunque la gran mayoría ya tienen dos dosis».

Mejor calidad protectora. Defiende que a partir de los 70 años, – «y también los 60»–, es necesario recibir la tercera dosis de esta vacuna. Lo primero que deja claro es que esta es una dosis «que se pone a personas que tienen su sistema inmunitario en buen estado». Pero que sin embargo, requieren de ese refuerzo ya que tras evaluarse toda la fase 4 de ensayo clínico de la implementación de la vacuna «se observa» que con la pauta que en principio estaba establecida de 2 dosis «no es suficiente para generar una buena protección». Por eso, «sí la recomiendo para las personas mayores de 70 y 60 años». Explica que «cuando nos hacemos mayores» los sistemas inmunitarios «también envejecen» y este hecho provoca que la capacidad del mismo para dar una respuesta adecuada a la vacuna «sea inferior» a la de una persona más joven.

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Tercera dosis entre los 18 y los 60 años. Es claro García cuando se le plantea esta posibilidad: «No veo la necesidad de esa tercera dosis» en personas de esa franja de edad. Argumenta esta respuesta con tres motivos. Para empezar, «no hay evidencia científica que señale que en las personas de entre 18 y 60 años esa tercera dosis aumente la calidad de la respuesta protectora que generamos con 2 dosis». También cree que «en estos momentos una situación epidemiológica que requiera condiciones absolutamente excepcionales de implementación de medidas como esta no se da en nuestro país». Y por último, considera imprescindible tomar este tipo de decisiones «en clave pandemia». Recuerda que «el problema global en el que estamos requiere de respuestas globales y no solo recetas locales».

Vacunación y nuevas variantes. Antes de pensar en poner una tercera dosis a personas que ya han recibido las 2 dosis en países desarrollados «sin que haya evidencias científicas sólidas para poner una tercera vacuna», dice García, «convendría llevar las primeras dosis a las miles de personas que no han recibido ninguna vacuna en los países en vías de desarrollo». Además de ser «una cuestión de justicia y equidad», recuerda, «es por una cuestión de interés epidemiológico». Se explica. «Si dejamos espacios geográficos sin vacunar, sus ciudadanos van a seguir enfermando y esto lo que puede generar son nuevas variantes».

Excepciones. El único motivo por el que ya se puede vacunar a ciudadanos de entre 18 y 70 años con la tercera dosis es en el caso «de las personas inmunodeprimidas que necesitan una dosis adicional». Esta nueva inyección sería la que deben recibir aquellas personas que tienen su sistema inmunitario debilitado. En función de la situación de estas personas «la pauta defensiva que se logra inmunizándoles con las dos dosis no es suficiente». Dice García que «no genera una respuesta robusta por la debilidad de su sistema inmunitario y por lo tanto necesitan una dosis adicional».

Terceras dosis puestas en Euskadi. Hasta ayer Osakidetza había puesto la tercera dosis al 80,3% de los mayores de 90 años, al 68,9% de los vascos de entre 80 y 89 años y al 27,9% de los ciudadanos que están en la franja de 70-79 años. Además, entre los menores de 70 años habían recibido esa nueva dosis el 2,4% de los vascos. En principio, ciudadanos con un sistema inmunitario debilitado.