El Gobierno Vasco cuestiona que Cruz Roja flete autobuses para inmigrantes

El envío de autobuses desde ciudades costeras andaluzas hasta el norte por parte de la Cruz Roja ha causado «sorpresa» y sobre todo «preocupación» en el Gobierno Vasco. El secretario general de Derechos Humanos, Convivencia y Cooperación, Jonan Fernández, tachó de «procedimiento cuestionable el modo utilizado por la ONG», que supuso la llegada de medio centenar de jóvenes de Mali a la estación de autobuses de San Sebastián este pasado lunes.

En el caso del otro grupo, los 31 varones de Guinea Conakry que arribaron el miércoles a la intermodal de Bilbao, fueron atendidos por esta organización, pero llegaron a través de las redes que mueven a los migrantes.

Fernández advirtió también que si en estos transportes de Cruz Roja aparecen menores no acompañados, la actividad podría situarse, incluso, «fuera de la legalidad». En el caso de San Sebastián, de los 46 jóvenes que llegaron, cuatro tenían menos de 18 años, aunque solo dos lo admitieran desde el principio. Las distintas pruebas realizadas determinaron que otros dos más rondaban también los 16 años y los cuatro han pasado ya a vivir bajo la tutela de la Diputación, una vez que se les ha aplicado el protocolo habitual en estos casos en el que hay menores no acompañados.

En un acto celebrado en Vitoria, Fernández dijo que no podía «ocultar la preocupación por lo que ha pasado» estos días y por la posibilidad de que esto adquiera un «carácter de hecho normalizado». Afirmó también que el Ejecutivo autonómico va a pedir «transparencia» en torno a la llegada de inmigrantes procedentes de otros puntos de España. Fernández aclaró que el Gobierno Vasco está en coordinación con las diputaciones y los ayuntamientos para atender las necesidades básicas de estas personas hasta que se aclare su situación. De momento, en San Sebastián ninguno ha pedido el derecho de asilo ni ha mostrado interés por ello. Desde el principio mostraron su intención de llegar a Francia. En la estación de autobuses, incluso, antes de que llegara la Guardia Municipal o la Ertzaintza, se refirieron a los barrios periféricos de París. Posteriormente, hablaron de Barcelona y Madrid.

Puede que alguno ya esté allí, porque de los 46 que llegaron, 15 se fueron el miércoles del albergue y ayer mismo se registró una ausencia a la hora de la comida. Pueden desplazarse a donde quieran y todo indica que poco a poco abandonarán la ciudad.

En cuanto a los migrantes procedentes del 'Aquarius', el secretario general de Derechos Humanos del Gobierno Vasco explicó que prevén que en el plazo de algo más de dos semanas se puedan distribuir entre las diferentes comunidades autónomas. «Estamos a disposición de los que nos plantee el Gobierno de España. Las instituciones vascas tenemos dispuestos los recursos».