3.000 escolares han recibido recursos tecnológicos para esquivar la brecha digital
El refuerzo educativo online ha sido clave para que estos niños desfavorecidos de Primaria y Secundaria pasen de curso
itsaso álvarez
Sábado, 22 de agosto 2020, 07:31
Regina lo pasó muy mal cuando, decretado el estado de alarma y cerrados los colegios, vio que su hija Francisca, de 13 años y estudiante ... de primero de la ESO en Hijas de la Cruz, en Bilbao, no iba a poder seguir el ritmo de la clase sin ordenador. Nacida en Camerún, a cargo en exclusiva de su familia -tiene también otra hija más mayor- y sin un sueldo fijo al mes, la crisis sanitaria multiplicó de la noche a la mañana los problemas de esta madre y esta niña, que no tiene iPad como algunos de sus compañeros de clase y que iba a tener que depender sí o sí de la tecnología para completar las tareas que le encomendaban.
«Mi teléfono resultó útil un tiempo, pero no para dar clase a diario. Algunos documentos que enviaba la tutora eran imposibles de abrir, había que mandar a diario trabajos, imprimir algunos contenidos teóricos...», se preocupó Regina. Los responsables de Tximeleta, un proyecto de Cáritas que da apoyo escolar a menores de familias desfavorecidas en Bilbao y a cuyos locales en la parroquia de San Antón acude Francisca cada tarde después del colegio, hicieron lo posible para que en la familia de Regina y en otras en igual situación, el impacto de la brecha digital no se viese magnificado por la crisis sanitaria del Covid-19. Recordemos que los datos de PISA ponen de manifiesto que en España un 5% de los alumnos no tiene acceso a un ordenador en casa, pero en entornos socioeconómicos desfavorecidos este porcentaje sube al 14%, lo que implica que los niños de estas familias tampoco son tan habilidosos como otros a la hora de utilizarlo.
El caso de Regina y Francisca se incluyó en el programa Aukerak Suspertzen-Recuperando oportunidades, una iniciativa nacida en el seno del Departamento de Empleo y Políticas Sociales del Gobierno vasco que, en coordinación con la consejería de Educación, ha hecho llegar recursos tecnológicos (ordenadores, tablets, tarjetas SIM...), documentales y apoyo educativo telemático a niños de Primaria y Secundaria durante el confinamiento. Menores que ya de entrada se encontraban en situación de desventaja social.
El programa, que ha sido desarrollado por una decena de entidades sociales además de Cáritas, está integrado en el fondo 'Inor atzean utzi' (No dejar a nadie atrás), dotado con diez millones de euros, para hacer frente a los efectos que ha generado o agravado la pandemia. Incluye actividades tradicionales de apoyo escolar, pero también otros 'extra'. Así, la madre de Francisca ha recibido formación en tecnología para poder ayudar a su hija, además de clases de castellano, lengua que aún no domina del todo, y tutoriales de técnicas de estudio muy útiles que de ahora en adelante podrá implementar con su hija. Lo más importante es que «la niña no se ha quedado atrás, ha terminado el curso bien y ha entregado todos sus trabajos a tiempo con la ayuda de su madre y de su ordenador», señala. Como ella, hasta 3.000 chavales en Euskadi han corrido el riesgo de quedarse descolgados este curso de no ser por iniciativas como ésta.
El proyecto continúa durante el verano y se extenderá hasta diciembre. «Se pretende que no haya una brecha digital ni formativa a consecuencia de la falta de recursos o de posibilidades. Era necesario dar seguridad a las familias que no tenían los medios y ha sido positivo hacerlo de manera online», subraya María Berlanga, del área de Familia e Infancia de Cáritas Bizkaia. A través de esta entidad, Aukerak Suspertzen ha llegado a familias de Bilbao, Getxo, Ermua y Sondika. El perfil de casi la mitad es el de una mujer sola a cargo de uno o varios hijos. Desde septiembre, otros 300 menores más de Bermeo, Gernika y Durango se verán beneficiados.
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