El 1x1 de las jugadoras del Eibar ante el Levante

Audaz. Su centro al segundo palo deparó el tanto armero.

Perjudicada. Tras una incuestionable primera parte, la catalana se retiró al inicio de la segunda mitad con molestias en el muslo izquierdo que ya llevaba vendado.

Corregida. Regaló un balón a Sintia, que reclamó un penalti de Mireia que no se señaló, pero la arandina lo enmendó.

Emprendedora. Se abrió camino por su banda.

Fundamental. Si la capitana tiene un buen día, el equipo funciona como una máquina bien engrasada. Eso sí, fundió toda su batería en el empeño.

Cuidadosa. La mediocentro de Burkina Faso vigiló y cubrió todos los huecos a los que no llegó Arene.

Crecida. La jovencisima atacante cedida por el Atlético de Madrid se va soltando y, además de su destacable presión, protagonizó alguna que otra llegada incisiva.

Impetuosa. Trató de sorprender a la portera con un disparo lejano en la primera mitad, pero al inicio de la segunda mitad tuvo que pedir el cambio por molestias físicas.

Punzante. Envenenado disparo que se le desvió , además de un buen remate a la media vuelta. La tanzana consiguió estrenar su cuenta con un cabezazo a la salida de una falta.

Prudente. Su colaboración reforzó la labor de contención.

Arrojada. Relegada al banquillo en las dos últimas citas, la eibarresa mantuvo el nivel de profundidad que había ofrecido Patri Ojeda.

Cumplidora. Va cogiendo la forma tras la lesión que le dejó sin poder realizar la pretemporada.

Risueña. La centrocampista aragonesa disfrutó de los últimos minutos.

Jovial.