Sade apuesta por un hostel en el Bellas Artes
Propuesta ·
Recupera un viejo proyecto hotelero que casa con el Peppuc: mantiene las fachadas, rehace la cúpula, construye un doble levante y habilita tres plantas de parking
La Sade apuesta por darle un uso turístico al edificio Bellas Artes, en concreto trabaja en lo que podría ser un hostel para este ... emblemático inmueble en desuso desde hace 38 años. Así lo aseguraron fuentes de los tres grupos municipales de la oposición que ayer analizaron en una reunión con el Departamento de Urbanismo las alegaciones presentadas por la propietaria a la revisión del Plan Especial de Protección del Patrimonio Urbanístico Construido (Peppuc). En ese encuentro, tanto el director de Urbanismo, Jon Chávarri, como la concejala del ramo, Nekane Arzallus, hablaron de «un hostel» –habitaciones grandes con muchas camas– como la mejor alternativa de uso para un edificio que, según la normativa, debe mantener la actual estructura de huecos de las fachadas.
Las relaciones entre la Sade y el Ayuntamiento en lo que respecta al futuro del Bellas Artes han sido tradicionalmente como el Guadiana, pero en los últimos meses ambos han convenido tomarse un respiro en el meandro del entendimiento. El cambio en la gerencia de la empresa y algunas sentencias judiciales han hecho que las partes acerquen posiciones y busquen un acuerdo realista que desatasque definitivamente el futuro de la parcela. Si no es una luna de miel, lo parece. La Sade ha asumido que el Ayuntamiento no le dejará tirar el inmueble para reconstruirlo de nuevo y el gobierno municipal valora esta nueva actitud y se muestra receptivo a los pequeños cambios que pretende introducir en la ficha de los edificios protegidos.
Documento de alegaciones
Las alegaciones que ha presentado la Sade a la revisión del Peppuc, un documento de 19 páginas al que ha tenido acceso DV, es toda una declaración de intenciones en relación a la dirección en la que trabaja la empresa. La portada de este documento incluye la imagen de la maqueta de un antiguo proyecto hotelero, un aspecto exterior que es el que pretende ahora rescatar para el edificio.
El gobierno municipal ve bien la propuesta porque mantiene fachadas y huecos del edificio original
La Sade plantea conservar las fachadas, con su actual estructura de huecos (introduciendo algunas modificaciones en las buhardillas amansardadas); vaciar el edificio por dentro para dar lugar a una nueva estructura; implantar dos levantes sobre la cubierta; rehacer la cúpula y disponer tres plantas de parking subterráneo.
Los proyectos de hotel barajados hasta la fecha encontraban grandes dificultades de encaje con la distribución de huecos de las fachadas. Asumida la realidad de que no se podrán tocar, la Sade se plantea un edificio con 8 plantas sobre rasante y tres sótanos de garaje.
Habitaciones amplias
Según explicaron fuentes de EH Bildu, PP y Elkarrekin Podemos que estuvieron ayer en la reunión, el director de Urbanismo, Jon Chávarri, y la concejala Nekane Arzallus dejaron claro que la idea de la empresa es convertir el edificio en «un hostel», una modalidad de alojamiento que ofrecería menos problemas de adaptación a los condicionantes arquitectónicos de las fachadas del Bellas Artes y que permite habilitar habitaciones más amplias y con más camas que las necesarias para un hotel.
La construcción resultante tendría tres plantas bajo rasante y ocho sobre el nivel de la calle
El gobierno municipal ve con buenos ojos este planteamiento de la Sade y ambas partes buscan ahora sumar adhesiones, primero a la revisión del Peppuc y, después, al cambio de uso en el que se ha empezado a trabajar para el edificio.
La propietaria del edificio declinó hacer declaraciones a DV sobre la cuestión para mantener el clima de entendimiento con el gobierno municipal y en espera de que revisión el plan de protección del patrimonio asuma sus planteamientos. Una vez salga adelante el nuevo Peppuc, será el momento de detallar proyectos concretos para el edificio, apuntó la Sade. El Departamento de Comunicación del Ayuntamiento también rehusó confirmar que haya un proyecto concreto para el Bellas Artes: «Dentro de los usos terciarios reconocidos para esa parcela cabe un hotel, un apartahotel, un hostel, oficinas, comercios...».
La antigua ikastola Claret también se convertirá en un hotel
La ikastola Claret cerró el año pasado sus puertas poniendo fin a 92 años de historia. Su privilegiada ubicación en el extremo de la avenida de Navarra más próximo a la Zurriola no ha pasado desapercibida para los promotores que se han hecho con la propiedad del inmueble y que desde hace meses tramitan en el Ayuntamiento un proyecto para convertir el inmueble en un hotel. Así lo aseguró ayer EH Bildu que afirmó tener confirmación de este hecho por parte del gobierno municipal.
Este grupo municipal criticó la «falta de transparencia» del ejecutivo PNV-PSE en relación a estos proyectos de hotel en Claret y el Bellas Artes e insistió en la necesidad de establecer «una moratoria» de licencias para alojamientos turísticos y decretar el Centro y Gros-Ulia como «zonas saturadas» para este tipo de actividades.
«PNV y PSE no han aprendido nada de la difícil situación que está atravesando la ciudad en estos meses como consecuencia del modelo de ciudad impulsado por Eneko Goia», criticó EH Bildu. La coalición soberanista indicó que «el peso del sector turístico ya es del 12% del PIB en Donostia y, como demuestran estos nuevos proyectos hoteleros, la intención del gobierno municipal es que este sector siga creciendo en detrimento de otros sectores mucho más beneficiosos para la ciudad».
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