Retos para la comunidad escolar

Cultura material, por ejemplo, es la experiencia de la recogida de la manzana, de su triturado, prensado, depósito del mosto en las kupelas de Katxola y de su posterior fermentación. Este es un aprendizaje experimental que hacen las alumnas y alumnos que van al caserío. «El aprendizaje se hace con los cinco sentidos, el caserío huele, las manzanas se tocan y son dulces o ácidas, retumban el motor y las correas del tolare, suena la txalaparta, y se ve el paisaje, que en el entorno de Katxola es espectacular», explican desde la asociación.

En las proximidades del caserío está el imponente teatro de Miramón y, justo encima, el frontón que lleva el nombre del admirado campeón pelotazale Miguel Gallastegi, recientemente fallecido. «Juan Oraá, veterano campeón de remonte, se ha ofrecido con el apoyo de Lantxabe y de un instructor ya veterano en estas funciones, Iñaki Fernández, de la Parte Vieja, organizar una escuela de pelota, como las que existen en El Antiguo o en Alza. La escuela recibirá el nombre de Miguel Gallastegi y cuenta con el apoyo de todos los colegios consultados», comentan desde Lantxabe.

En las fiestas del barrio y en algunas fechas señaladas, la federación provincial de bolos organiza campeonatos en el Jolastoki de Aiete -la gente de la ciudad votó a favor de su cubrimiento para no verse afectados por la lluvia- y de toka, en la plaza de los manzanos de Munto. Ahora la propuesta es crear una Escuela de Bolos y de Toka. «Es un deporte minoritario, difícil de practicar en cada colegio, pero estas escuelas existen en Alza o en Usurbil. Con el apoyo de la federación provincial y los centros educativos de Aiete han comprometido su apoyo», dicen.

«Ese mismo soporte y patrocinio lo encontramos con la Gimnástica de Ulía y las escuelas para organizar una carrera pedestre en Aiete con carácter anual», añaden. «Le llamamos carrera pedestre porque no sólo tiene fines deportivos sobre quién resulta ganador; sirve también para aumentar el conocimiento de las escuelas del barrio y pueden participar todos aquellos que compartan este objetivo», afirman.

Se cuenta también con el visto bueno de toda la comunidad escolar del barrio para participar en el concurso de 'Bertsopaperak', de carácter anual, en la que se presentan hojas escritas con estrofas de bertsos. Este concurso fomenta el uso académico del euskera en el centro, las habilidades de alumnas y alumnos y la puesta en escena del tema elegido para los bertsos. «Partimos de la experiencia del concurso que se organizó en torno a Manuel Matxain, ganado por tres chicas del Lizeo Axular, que interpretaron el bertso txapeldun en la Casa de Cultura hace un par de años», dicen.

«Ahora es necesario juntar a responsables de cada colegio, escuela o liceo y ponerse de acuerdo en procedimientos, fechas, infraestructuras, horarios, etc. Cada centro está delegando en un miembro de su comunidad sea académica o sea del grupo de padres y madres, para cada actividad. Los próximos días asistiremos a las primeras convocatorias. No tener prisa es la premisa que se ha marcado; lo que no se pueda este año, se hará el que viene», concluyen. Asimismo, recuerdan que tanto Katxola como el Bosque de Miramon están a disposición escolar para facilitar el uso de otras actividades deportivas o culturales.