«En dos años incorporamos doce bomberos, la mejora es considerable»
Peru Mac-Gragh, Jefe de Bomberos de Donostia ·
El nuevo director del servicio valora el refuerzo de la plantilla ante el aumento de las intervenciones, que ascienden a siete diariasEl parque de bomberos de Donostia transmite una calma muy característica. Todo está en orden, bajo control, pero con la tensión constante de saber que en cualquier momento puede sonar la sirena. Lo hizo, de hecho, en el transcurso de esta entrevista con Peru Mac-Gragh, nuevo jefe de bomberos de Donostia, natural de Zamudio, que se tomó la alerta con la tranquilidad de quien la oye «unas siete veces al día». Fue designado el martes y releva a Ander Gómez, que renunció al puesto tras ser acusado de colar a su hijo vestido de uniforme en el concierto de Fermin Muguruza celebrado en el estadio de Anoeta en junio.
– Para quienes no lo conozcan, ¿quién es Peru Mac-Gragh?
– Tengo 37 años y soy ingeniero de caminos, canales y puertos. Trabajé como bombero de base en el servicio de extinción de incendios de Bizkaia y saqué plaza en Donostia. Llevo un par de años en el servicio, donde hasta ahora he ejercido la función de inspector jefe.
– Apenas lleva unos días en el cargo, ¿cómo afronta esta nueva etapa?
– Con mucha ilusión pero también con responsabilidad. El servicio de bomberos de Donostia va a cumplir 160 años de historia en 2027 y tiene 130 personas detrás. Es una responsabilidad muy grande que afronto con ilusión por todos los proyectos que tenemos por delante.
«Han subido mucho las intervenciones acuáticas, pero somos el servicio más especializado del litoral junto con el de Bilbao»
– ¿Puede adelantar alguno?
– Uno de mis principales objetivos durante mi dirección será que la gente conozca el servicio de bomberos de forma integral. El área operativa es la más conocida. Los camiones, la brigada, las mangueras... pero el servicio es mucho más que eso. Tenemos otras tres áreas muy importantes como son el servicio de prevención, el de Protección Civil, que coordina los diferentes servicios de emergencia a nivel de Ayuntamiento, y el de planificación, que se encarga de la renovación de flota y de obras en el edificio.
– Los servicios de emergencia parecen tener más trabajo que nunca, ¿qué retos enfrentará de cara al futuro?
– Hemos detectado tres grandes retos. En primer lugar tenemos los retos ambientales, los relacionados con el cambio climático. Los fenómenos meteorológicos nos afectan directamente y los suele gestionar el servicio de Protección Civil. Pueden ser galernas, precipitaciones de gran cantidad como la DANA en Valencia o incendios forestales como los que hemos visto este verano, que han marcado récords de extensión. Hacer frente al incremento de estos fenómenos es uno de los retos principales.
– ¿Y a nivel urbano?
– Ahí entran los retos sociales, con los cambios a nivel demográfico y de ciudad. Por ejemplo, uno de los desafíos que esperamos enfrentar es el del aumento de intervenciones acuáticas. Este tipo de turismo ha crecido mucho, y nuestras salidas por incidencias relacionadas con esta actividad también. Tenemos cuatro motos de agua y tres embarcaciones, somos el servicio de bomberos más especializado del litoral junto con el de Bilbao. Otro de los retos sociales que nos encontramos es el envejecimiento de la población y sus efectos se ven en las salidas de rescate a personas mayores en vivienda, que se han incrementado exponencialmente.
«Estamos trabajando con empresas privadas para buscar la mejor solución a los incendios provocados por baterías»
– Siguiendo en el ámbito urbano, últimamente se están viendo incendios provocados por las baterías de los vehículos eléctricos en varias ciudades. ¿Están trabajando en cómo atajar este tipo de incidentes?
– Los incendios por baterías de ion-litio suponen un reto importante no solo a nivel autonómico, sino a nivel mundial para los servicios de extinción. Pueden estar en un coche, en un patinete o en un autobús. Ahora mismo estamos trabajando en unos proyectos del área operativo en colaboración con Irizar e-mobility, por ejemplo. Estamos haciendo ensayos de Thermal Runaway, una especie de embalamiento térmico de celdas y de módulos de batería para usar diferentes agentes extintores y ver cuáles son más eficientes a la hora de extinguir. Todavía no hay una solución clara. Estamos probando, con la ayuda de empresas privadas, para llegar a la mejor solución. Es una fase de experimentación para estar más preparados cuando nos encontremos con una situación así.
– En cuanto a actividad del servicio, ¿observa un aumento en los últimos años?
– Los datos lo reafirman. En 2010 tuvimos unas 1.600 salidas y en 2024 unas 2.500, casi un millar más de intervenciones. Supone una media de siete salidas diarias que se distribuyen por todo el año. En días de situaciones más extremas podemos tener hasta 40. También hay que tener en cuenta que damos servicio a todo Donostialdea, a una población aproximada de 260.000 personas.
– En vista de la carga de trabajo que acumula el servicio, ¿recibe de buen agrado la noticia de la contratación de seis bomberos más de cara a 2026?
– Evidentemente. El compromiso del Ayuntamiento de Donostia es importantísimo y muy positivo para el servicio. Es uno de los refuerzos más importantes, esos seis bomberos que vamos a incorporar en plantilla. Además, está previsto que en 2027 se sumen otros seis, por lo que el refuerzo es considerable. Actualmente tenemos seis brigadas de 17 bomberos, y con estas incorporaciones pasarán a ser de 19 efectivos cada una. A esto hay que sumarle una serie de mejoras internas como asegurar la guardia mínima, las movilizaciones fuera de guardia o la habitación de mandos.