Vecinos de la Parte Vieja denuncian «irregularidades» en otras cuatro licencias hosteleras en Donostia
La asociación vecinal de la Parte Vieja tiene constancia de que la jefa del Servicio de Actividades del Ayuntamiento y su hijo intervinieron en los expedientes, ya remitidos a Urbanismo
La asociación de vecinos de la Parte Vieja ha puesto en conocimiento de la concejala de Planificación Urbanística y Vivienda y el director de Urbanismo de San Sebastián la existencia de «irregularidades» en otras cuatro licencias hosteleras del barrio. Según ha denunciado este viernes Parte Zaharrean Bizi, en estos expedientes intervinieron la jefa del Servicio de Actividades del Ayuntamiento y la asesoría en ingeniería de su hijo, lo que supone una «omisión del deber de abstención» de la funcionaria por vínculos familiares directos.
«Posiblemente, habrá más casos no solo en la Parte Vieja, sino en el resto de la ciudad, y corresponde al Ayuntamiento investigarlos», han advertido Iñigo Cabañas y Xabier Arberas, directivos de la asociación vecinal, quienes han recordado que «la omisión del deber de abstención constituye una falta disciplinaria grave o muy grave y acarrea sanciones».
Estos cuatro nuevos expedientes denunciados se suman al que adelantó DV el miércoles del conocido del bar Ostertz del paseo del Muelle, que en 2020 obtuvo licencia para vender alcohol pese a ubicarse en una zona que está declarada saturada de actividades de hostelería, lo que contraviene la ordenanza municipal de distancias entre locales.
Los representantes de Parte Zaharrean Bizi han asegurado asimismo que «al menos en dos ocasiones» transmitieron «oralmente» esta situación a «personas de Presidencia y Alcaldía». También han puntualizado que en las cuatro licencias denunciadas ahora «puede que no se hayan infringido las ordenanzas, pero que la funcionaria no se abstenga al intervenir su hijo ya es grave».
La agrupación de vecinos de la Parte Vieja se ha referido por otra parte a las 42 denuncias que presentaron por obras sin licencia en establecimientos hosteleros, expedientes sancionadores que el Departamento de Urbanismo paralizó al entender que no tenía competencias en la materia y que ahora, tras emitir los servicios jurídicos municipales un informe en sentido contrario, han empezado a reactivarse.
«Hay un 'modus operandi', una pauta de actuación del Ayuntamiento con el mismo resultado en todos los casos. Es parte de un sistema o forma de funcionar que sufrimos los vecinos del barrio ante cantidad de irregularidades urbanísticas de la que siempre se beneficia el sector hostelero», han lamentado.
Por último, los representantes vecinales han recordado las «más de 50 denuncias» que interpusieron por el uso de locales comerciales cerrados como almacén auxiliar por parte de bares y restaurantes. «El consistorio empezó a actuar a raíz de nuestras denuncias y en el Pleno de junio de 2024 se aprobó establecer una moratoria de un año para la legalización de estos locales. Sin embargo, más de medio año después ni la asociación de comerciantes Zaharrean ni Parte Zaharrean Bizi hemos recibido comunicación alguna al respecto, por lo que entendemos que se siguen legalizando locales para estos fines», han subrayado.
Cabañas y Arberas han puesto más ejemplos de las dificultades que encuentran para realizar su labor de fiscalización de las decisiones de Urbanismo. «Se nos niega información de manera sistemática 'por no ser parte interesada' cuando las denuncias las ponemos nosotros, los controles de la Guardia Municipal llegan hasta un mes después de la denuncia cuando el problema igual ya no existe, y siempre se califican los incumplimientos de las ordenanzas como falta leve cuando la normativa establece que la reiteración es una infracción grave. Sale muy barato infringir las normas con total impunidad. Es una locura cómo funciona este Ayuntamiento», han concluido.
