Aplazan hasta el 15 de mayo el desahucio previsto para mañana del donostiarra de 84 años

El Juzgado de Primera Instancia número 1 de San Sebastián ha aplazado hasta el próximo 15 de mayo el desahucio de un anciano donostiarra de 84 años previsto para mañana, atendiendo a la situación de especial vulnerabilidad de esta persona por su salud y su edad, ha informado Maite Ortiz, abogada del afectado.

El perjudicado, Patxi Zubiaurre, firmó con la empresa Abacrédit, dedicada al préstamo, un crédito hipotecario de 104.000 euros con la garantía de su piso ya pagado en "unas condiciones usureras", según denunció en su momento Stop Desahucios.

Ante la imposibilidad de pagar el préstamo, la vivienda, situada en calle Balleneros, fue subastada y adjudicada al acreedor por la mitad de su valor de tasación, mientras el citado juzgado fijó el lanzamiento para mañana por la mañana a petición del acreedor.

Sin embargo, según ha relatado este martes Ortiz, el Juzgado de Primera Instancia número 1 ha acordado a primera hora de esta tarde el aplazamiento del desahucio, en un auto en el que ha aceptado una petición realizada por la letrada el pasado viernes, en la que pedía que se tuviera en cuenta la avanzada edad del afectado, así como su delicado estado de salud.

En este escrito, la abogada argumentó además la existencia de distintos movimientos para intentar alcanzar un acuerdo extrajudicial en este asunto, al tiempo que aportó un informe sobre el estado de salud del anciano que acredita sus deficiencias respiratorias y de corazón.

Por su parte, la representación legal de la empresa prestamista se opuso a este aplazamiento y solicitó que no se atendiera la petición de la abogada del anciano. El hombre suscribió un préstamo hipotecario de 104.000 euros, a pagar en mayo de 2014, con interés ordinario del 19,5%. Perdió en subasta su vivienda, adjudicada al acreedor por el 50% de su valor de tasación, es decir por 125.000 euros.

Fuentes del caso han indicado a que, entre las gestiones extrajudiciales que se están realizando para intentar evitar este lanzamiento, se encuentra la posibilidad de que un particular, que ya ha mostrado su interés en este asunto, adquiera el domicilio del afectado a la empresa prestamista y posteriormente permita al anciano residir en la vivienda hasta su fallecimiento, a cambio de una renta mensual de 150 euros.