Para Zierbena la última bandera y el subcampeonato

Porque después de ver a Cabo da Cruz desenvolverse por la calle 1 con una enorme suficiencia, estaba claro que Zierberna tenía muchos, muchos boletos para ondear su cuarta bandera de la temporada y, de paso, llevarse su primer subcampeonato de Liga en detrimento de Hondarribia, cuyas opciones por la calle 2 quedaban prácticamente reducidas a la nada, como las de Urdaibai y Donostiarra.

Sólo un ligero cambio del viento y la corriente podían darle opciones a Cabo da Cruz, pero su ilusión se diluyó tras el primer largo en el que los galipos mejoraron en cinco segundos el crono de los de Boiro.

Zierbena fue proa de regata marcada de cerca por Hondarribia y por Donostiarra, con Urdaibai cediendo un bote nada más salir ante la imposibilidad de irse hacia la calle 2 que la Torrekua II defendió con uñas y dientes, lo que obligó al juez de mar a dar un par de avisos a la Bou Bizkaia.

En ese largo de ida, y por las calles centrales, se podía competir. Otra cosa era encarar el largo de vuelta, contracorriente y sin la posibilidad que tenían los de Dani Pérez de pegarse al muro, donde la corriente tiraba menos.

Así que fue ciabogar y ver cómo los galipos comenzaban a poner distancia respecto a sus oponentes. Alcanzaron la segunda ciaboga en primera posición, con Hondarribia a seis segundos, Urdaibai a diez y Donostiarra a catorce.

Consciente de que el subcampeonato era imposible –hubiera sido el octavo consecutivo–, la Ama Guadalupekoa trató de echar el cierre a la temporada de la manera más digna posible. Realizó la última ciaboga a nueve segundos de Zierbena, de cuya victoria no había dudas, y con siete de renta sobre una Urdaibai que no quiso dejar ni las migajas.

Los de Iker Zabala, sin posibilidades de lograr una nueva bandera, realizaron un último largo pleno de ambición en el que llegaron a poner en cuestión la segunda plaza de la Ama Guadalupekoa, que logró aguantar el tipo para firmar su séptimo segundo puesto de la temporada. Los bermeotarras fueron terceros por delante de Donostiarra, muy descolagada y seguramente desmotivada, aunque llegó a terminar por delante de Cabo da Cruz.

En la primera tanda, los de Boiro hicieron buena esa calle 1 logrando la victoria con relativa comodidad. Lekittarra, que hizo todo el último largo a la estela de Cabo, fue segunda, mientras que por las calles 3 y 4 Orio y Getaria sufrieron lo indecible para ser séptima y octava, lo que hizo que la Esperantza se cayera de esa sexta plaza y finalice la Liga séptima, un resultado que hay que valorar como merece.