La dupla Merino-Alcántara se repite 25 años después
Rafinha y Mikel Merino reviven una pareja que se formó en la temporada 1996/1997 cuando el Celta de Vigo hizo coincidir en el mismo vestuario a Mazinho y Ángel Miguel, padres de los futbolistas
La llegada de Rafael Alcántara 'Rafinha' a la Real Sociedad en este mercado de invierno ha servido, además de para fortalecer a una plantilla de ... altísimo nivel y multiplicar el talento de la mediapunta txuri-urdin, para recuperar una dupla de centrocampistas -la que forman él y Merino- que ya se vio a mediados de los años 90, solo que con otros colores y con otros protagonistas. Sus padres.
Rafinha se une ahora a los Oyarzabal, Januzaj, Silva y Merino. Precisamente en la temporada 1996/1997 el centro del campo del Celta de Vigo también tenía en su medular a la dupla Alcántara-Merino. Los progenitores de los actuales futbolistas de la Real eran dos de las piezas básicas de la zona ancha del equipo vigués. Eran Mazinho, padre de Rafinha, y Ángel Miguel Merino, aita de Mikel.
Ambos compartieron vestuario solo una temporada, pero caprichos del destino, la historia ha querido que sus hijos, ahora en la Real Sociedad, también jueguen juntos en el mismo equipo un cuarto de siglo más tarde y en la misma demarcación del campo. Hace 26 años el conjunto celeste fichaba a todo un campeón del mundo como Mazinho procedente del Valencia, por una cantidad cercana a los 135 millones de pesetas (810 mil euros). Allí le esperaba Merino padre, que había llegado a tierras gallegas en la temporada 1994/1995 tras seis campañas en su querido Osasuna.
Un año sin mucho éxito
El año en el que Mazinho y Ángel Miguel coincidieron el Celta terminó el curso en 16º posición con 49 puntos. Un año complicado para el conjunto celeste en el que cosecharon más derrotas que victorias y empates (17 partidos perdidos, 12 ganados y 13 en tablas), y se quedaron a cuatro puntos de la promoción de permanencia que marcaba el Rayo Vallecano.
Tras esa temporada el padre de Mikel Merino ponía rumbo a la UD Las Palmas después de que los insulares pagaran 630 mil euros por él. Tras dos años en las Islas Canarias fichó por el Leganés donde jugó las siguientes dos campañas. Ya en el ocaso de su carrera, Merino recalaba en el Burgos, penúltimo club de su carrera antes de colgar las botas el año siguiente, en 2003, después de una última temporada en el Ceuta.
Mazinho se mantuvo fiel al Celta hasta la temporada 2000/2001 cuando decidió fichar por el Elche, el que sería su último club en España. Tras su curso en el conjunto ilicitano, el padre de Rafinha volvía a su Brasil natal para jugar con el Vitória antes de anunciar su retirada.
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