¿Por qué fue amonestado Aritz Elustondo con tarjeta amarilla tras la intervención del VAR?
El central blanquiazul fue sancionado con cartulina en una acción que Gil Manzano tuvo que revisar por posible expulsión
El VAR echó humo ayer en el Reale Arena con tanto trabajo. El colegiado Gil Manzano tuvo que estar pendiente del pinganillo en más de una ocasión para escuchar lo que le transmitía el árbitro del VAR, Alberola Rojas. Sobre todo en la primera mitad, en la que se sucedieron las jugadas más decisivas del encuentro.
Sin embargo, la acción que más desconcierto provocó entre los aficionados de la Real Sociedad por su resolución fue la que que tuvo a Aritz Elustondo y Santi Mina como factores principales. Pasados los diez minutos de juego de la primera mitad, el defensor txuri-urdin despejó un balón y con la inercia propia del golpeo acabó por contactar con los tacos de su bota la pierna del atacante del Celta que intentó bloquear la acción del guipuzcoano.
Los dos jugadores acabaron chocando y tendidos sobre el césped por la propia inercia de la jugada. Mina sufrió más rasguños, ya que su espinilla quedó marcada con los tacos del realista. Gil Manzano no observó en ningún caso falta del beasaindarra en ese mismo instante, pero desde la sala VAR sí que avisaron al trencilla extremeño para que acudiese al monitor a revisar el lance por una potencial tarjeta roja directa al realista.
Hay que recordar que el VAR interviene en cuatro situaciones: gol, penalti, tarjeta roja directa e identificación de jugadores. Gil Manzano, sin embargo, tras acercarse a a la pantalla, no consideró que la fricción de Elustondo fuera merecedora de expulsión, pero sí que rearbitró la jugada y decretó falta a favor del Celta y mostró la cartulina amarilla al guipuzcoano.
¿El árbitro puede sancionar falta fuera del área tras consultar la repetición con el VAR? La respuesta es sí. Para ello, tiene que darse bajo el contexto de una revisión por parte del colegiado de una potencial tarjeta roja, como en este caso, o cualquiera de los otros tres supuestos anteriormente citados. Esto es, el árbitro puede pitar una falta y amonestar a un jugador, bajo cualquiera de las cuatro situaciones de VAR, a pesar de que en un primer momento no hubiese observado nada.