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Víctimas del IRA respaldan el texto que pide esclarecer los crímenes de ETA sin resolver

«Vemos paralelismos entre lo que ocurrió en Irlanda del Norte en 1998 y las repercusiones de las decisiones catastróficas», asegura la South East Fermanagh Foundation

AINHOA MUÑOZ

Lunes, 30 de abril 2018

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La empatía entre víctimas de ETA y el IRA será, sin duda, el punto de unión de la jornada que mañana acogerá San Sebastián para exigir a la organización terrorista que aclare los 358 casos que aún quedan por resolver, en vísperas de que anuncie definitivamente su disolución.

Víctimas del IRA que vivieron en primera persona el terror del Ejército Republicano Irlandés, que buscaban con su lucha armada un Estado soberano independiente respecto al Reino Unido, han respaldado el manifiesto 'ETA quiere poner el contador a cero', promovido por intelectuales y damnificados por el terrorismo y que se presentará mañana en un hotel donostiarra con el objetivo principal de instar a la banda a que colabore con la Justicia para esclarecer los crímenes sin resolver y condene su «historia de terror».

A la presentación asistirán víctimas del IRA pertenecientes a la South East Fermanagh Foundation (SEEF), entidad norirlandesa que agrupa a damnificados por la violencia en el Ulster, anunció el colectivo vasco de víctimas del terrorismo, Covite. «Desafortunadamente, vemos paralelismos entre lo que ocurrió en Irlanda del Norte en 1998 y las repercusiones de aquellas decisiones catastróficas. Queremos resaltar los errores y sus potenciales consecuencias», afirmó Ken Funston, portavoz de la entidad, en alusión al fin del IRA.

El manifiesto

  • 1 ETA no ha cumplido los mínimos necesarios para un fin con Justicia. No ha aportado la información sobre los autores materiales de cientos de asesinatos y que no está a disposición de las familias, la sociedad y la justicia.

  • 2 ETA no ha condenado la historia del terror. La petición parcial de 'perdón' de ETA es parte del teatro propio de la banda. No condenar la historia del terror significa que seguirán legitimando los asesinatos con mentiras y construcciones ideológicas.

  • 3 ETA no ha cumplido los mínimos necesarios para un fin con reparación. Los terroristas, ahora con careta de 'sensibles', han sido incapaces de pedir perdón a todas las víctimas. Resulta especialmente cínico y cruel que publiciten una petición de perdón a las víctimas, y a la vez, justifiquen el asesinato de muchas de ellas. Justificar sus crímenes por la existencia de un conflicto y prolongar sus tentáculos en la estrategia política no es mostrar arrepentimiento. Su calculada alusión al perdón siembra la sospecha de si simplemente se debe a un requisito impuesto y para salvar la cara de los autodenominados mediadores internacionales y que no deja de ser una cuestión formal vacía de significado.

  • 4 ETA no ha cumplido los mínimos necesarios para un fin asumiendo su responsabilidad. Invocando la teoría del conflicto, ETA diluye su responsabilidad dando a entender que todos hemos sido responsables del terror. La impunidad moral, social y política intenta abrirse espacio.

  • 5 ETA chantajea a las víctimas y a la sociedad. ETA manipula los sentimientos de la sociedad española, tentada de pedir 'generosidad' a las víctimas del terrorismo, obviando que ello implica la renuncia a derechos legítimos, entre ellos la reivindicación de justicia, que es a su vez un componente de la reparación. Esta demanda es un chantaje moral íntimo y personal.

  • 6 ETA manipula el pasado. La organización se justifica diciendo que hubiera querido que existiera paz y libertad democrática tras el bombardeo de Gernika, pero que no la hubo. Miente: a partir del 78 hubo libertad democrática en toda España y si no fue más pacífica es por culpa de la propia ETA.

Otro organismo que también ha respaldado el texto -que ayer acumulaba ya más de 14.000 firmas de las 15.000 que se han propuesto conseguir a través de la plataforma Change.org- ha sido la asociación Memoire et vigilance en Pays Basque, promotora de una campaña que exige la retirada de la escultura de Baiona que simboliza el desarme de ETA, obra del artista guipuzcoano Koldobika Jauregi. Según recordó Covite, algunos de sus miembros irrumpieron con paraguas a modo de protesta en su inauguración.

El 'héroe del monopatín'

Durante el acto de mañana se prevé la asistencia de un gran número de personas. El encargado de leer el manifiesto que, entre otras cosas, pide «deslegitimar la violencia con vistas a generaciones futuras y para la consecución de cualquier objetivo político», será Joaquín Echeverría, padre de Ignacio, el 'héroe del monopatín' fallecido en el ataque yihadista de Londres de junio de 2017. En esta comparecencia pública también intervendrán el filósofo Fernando Savater; la eurodiputada de UPyD Maite Pagazaurtundua, hermana de Joseba Pagazaurtundua, exjefe de la Policía Local de Andoain asesinado por ETA en 2003; y la presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, hermana del edil del PP Gregorio Ordóñez, que murió a manos de la organización terrorista en 1995.

Por otro lado, entre los firmantes del manifiesto se encuentran destacados intelectuales y representantes del mundo de la cultura, como los escritores Fernando Aramburu, Juan José Millás, Félix de Azúa, Raúl Guerra Garrido, Jorge Martínez Reverte, Fernando Iwasaki y Francisco Javier Irazoki. También suscriben el texto las historiadoras Carmen Iglesias, directora de la Real Academia de la Historia, y Cayetana Álvarez de Toledo; los juristas Francesc de Carreras, José María Ruiz Soroa y Carlos Fernández Casadevante; el catedrático Fernando Reinares; el psiquiatra Raúl Nehama; y el director del Centro Memorial para las Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez, entre otros.

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