El PSE cierra filas con Urkullu en su pulso con Sánchez para mantener el plan sanitario vasco
El partido de Mendia pide que se respeten las decisiones de Euskadi para afrontar la pandemia y ve posible «compatibilizarlas» con las del Ministerio
Las nuevas directrices para hacer frente a la pandemia aprobadas el miércoles en el Consejo Interterritorial de Salud, que el Ministerio de Sanidad considera ... de «obligado cumplimiento» y de las que el Gobierno Vasco se desmarcó antes incluso de la votación, han abierto una nueva brecha entre Iñigo Urkullu y Pedro Sánchez, aunque no entre los dos socios de gobierno en Euskadi, PNV y PSE.
Los socialistas vascos cerraron filas ayer con el lehendakari y, en un mensaje diferenciado del que llegaba de representantes del Gobierno central o de presidentes autonómicos socialistas, pidieron a Sánchez que se respete la «casuística» de cada autonomía en la gestión de la pandemia -lo que en Euskadi significaría salvaguardar las previsiones del plan Biziberri que determina las medidas sanitarias que se deben aplicar en funciones de los niveles de incidencia del Covid-19 y lanzaron un mensaje conciliador con la idea de reconducir la polémica. «Es posible compatibilizar las medidas vigentes en Euskadi con el planteamiento del Ministerio de Sanidad», defendieron fuentes del PSE.
Fue un intento de calmar las aguas en un tema sensible que ha vuelto a generar una rebelión autonómica a Sánchez una vez que se empezaban a apagar los ecos por la no prolongación del estado de alarma, que dirigentes como Urkullu habían reclamado incluso por carta. En esta ocasión, las conclusiones del Consejo Interterritorial de Salud han provocado un nuevo terremoto que ha llevado a plantarse a comunidades autónomas como Madrid, Galicia, Andalucía y Castilla y León. El Gobierno Vasco ha sido uno de los más contundentes en su rechazo al nuevo plan de la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que el lehendakari definió ayer como una «invasión competencial» que se adopta «de manera unilateral», y que llegó a calificar como «imposición». Advirtió que Euskadi «seguirá su propia hoja de ruta» y mantendrá las medidas actualizadas el pasado lunes por el LABI.
«Es curioso que Sánchez decidiera no prorrogar la alarma y ahora nos venga con planes sin consenso y como imposición»
Iñigo Urkullu | Lehendakari
«Cuando las cosas se estaban haciendo razonablemente bien, vuelven a sacar el café para todos, te guste o no»
Andoni Ortuzar | Presidente del PNV
«Pedimos al Gobierno de España que se respete la casuística de cada autonomía; en Euskadi hemos sido responsables»
PSE-EE
«Es lógico que Sanidad ponga un marco común para que esto no sea el ejército de Pancho Villa, con cada uno por su lado»
Patxi López | Diputado del PSE y exlehendakari
«Las relaciones del lehendakari con Sánchez y con sus socios del PSE están marcadas por el desconcierto y el desorden»
Carlos Iturgaiz | PP+Cs
Este nuevo encontronazo entre Urkullu y Sánchez desde que estalló la pandemia dejaba a su socio de gobierno, el PSE, en una posición incómoda, situado entre dos aguas. Aunque los socialistas vascos apostaron por mantenerse leales al lehendakari y se posicionaron a favor de que el Gobierno central respete las medidas que ya se están ejecutando en Euskadi, aun entendiendo «la preocupación del Gobierno de España y su voluntad de fijar unos mínimos comunes» en cuestiones como el ocio nocturno. «Creemos que es posible compatibilizar el planteamiento del Ministerio de Sanidad con el ejercicio de nuestras competencias», defendieron fuentes del PSE.
Lealtad entre socios
No es la primera vez que el partido liderado por Idoia Mendia cierra filas con el ala jeltzale del Gobierno a la hora de criticar una decisión del Ejecutivo de Sánchez. Hace una semana, la propia Mendia se desmarcó públicamente de la oferta trasladada por el Gobierno central para el traspaso del Ingreso Mínimo Vital y reivindicó, al igual que Urkullu, que la transferencia sea «integral».
La posición del PSE en este asunto tampoco es monolítica, ya que el diputado socialista por Bizkaia y exlehendakari, Patxi López, consideró «lógico» que todas las comunidades acaten las decisiones adoptadas por el Consejo Interterritorial para que «esto no sea el ejército de Pancho Villa y cada uno vaya por su lado». Además, apuntó que «no hay que hacer una pelea absolutamente de todo en este país» y señaló a Urkullu que «hay momentos en los que uno tiene que sumar y no buscar la diferencia».
El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, criticó que el Gobierno de Sánchez «vuelve a tirar del café para todos» después de haberse negado a prorrogar el estado de alarma a partir del 9 de mayo, como le reclamaban Urkullu y el PNV. Para el líder del EBB, «quien tiene competencias y está sobre el terreno es quien debe decidir» sobre las cuestiones sanitarias, por lo que respaldó la decisión del Gobierno Vasco de mantener su plan sanitario.
Iceta pide que se acaten las directrices de Sanidad y avisa de que son «obligatorias»
El ministro de Política Territorial y Función Pública, Miquel Iceta, estuvo ayer en Bilbao para inaugurar el edificio de la Antigua Aduana, donde tenía previsto ofrecer una rueda de prensa, por lo que no pudo eludir el incendio autonómico desatado tras el Consejo Interterritorial de Salud del miércoles, en el que él mismo participó junto a la ministra de Sanidad, Carolina Darias. Iceta negó que las directrices de dicho consejo sean «una imposición» para las autonomías y, tras recordar que son de «obligado cumplimiento», pidió «encarecidamente que se cumplan» porque la pandemia «no conoce de fronteras administrativas». También dijo que ve «lógica» la existencia de unas «pautas comunes de actuación» y aseguró que «respeta pero no comparte» la postura de Euskadi ante esa reunión, en la que el Gobierno Vasco decidió no participar.
El ministro indicó que hoy se podrá ver «negro sobre blanco» el planteamiento acordado por el Consejo Interterritorial tras su publicación en el BOE, de manera que «no haya ninguna confusión». Iceta apuntó que esa publicación en el BOE es lo que provoca que sea «una orden de obligado cumplimiento para las autonomías». Añadió que, cuando se puede, los acuerdos se adoptan por consenso, pero si no es posible se hace una votación, que es lo que se produjo en el Consejo. «Hay comunidades que prefieren regularse a sí mismas y no ver la interferencia de otras instituciones y, en cambio, hay otras, la mayoría, que prefieren que haya pautas de actuación común», explicó.
Preguntado por la posibilidad de que Euskadi no acate la propuesta de Sanidad, Iceta señaló que a veces cae «en el error de adelantar acontecimientos», pero en este caso evitó hacerlo e invitó a las autonomías a «leer el plan que se publicará en el BOE».
Iceta también fue preguntado por la pretensión de EH Bildu de entrevistarse con los directores de las tres cárceles vascas para «departir» sobre la situación de los reclusos de ETA. El ministro respondió que, si «cualquier partido político» quiere mantener contacto con el director de una cárcel, «puede hacerlo con toda tranquilidad», pero advirtió de que «el tratamiento penitenciario lo deciden los jueces». Por ello, señaló que «no magnificaría el valor de esas reuniones».
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