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«El éxito de Euskadi depende en gran medida de que seamos capaces de crecer como país en el contexto internacional». Así de claro fue ... ayer el lehendakari Imanol Pradales, que presentó en las instalaciones de Albaola Itsas-Kultur Faktoria en Pasaia San Pedro su estrategia 'Euskadi global' con varios ejes de actuación a desarrollar durante la legislatura, aunque sin dar mayores concreciones de esas medidas para impulsar al territorio en el ámbito cultura, social o económico. Tras conocer la historia del astillero junto a algunos miembros de su Gobierno, puso el foco en «establecer nuevas alianzas estratégicas con quienes compartamos intereses comunes para crecer juntos».
Con la bahía portuaria de Pasaia a sus espaldas y un par de traineras colgadas del techo, que recordaron al lehendakari su pasado como remero de la Sotera en Santurtzi, el jefe del Ejecutivo vasco llevó a cabo un acto que empezó con su discurso y acabó con unas mesas de trabajo en las que los asistentes –personas relacionadas con la empresa, cultura, ciencia o la academia– pudieron intercambiar sus impresiones. Atípico arranque del discurso de Pradales, en el que recordó algunos pasajes históricos como la llegada de los vascos a Terranova o la vuelta al mundo de Juan Sebastián Elkano. Quiso así remarcar que en Euskadi siempre se han buscado relaciones comerciales con otros territorios del mundo y que ahora se debe reforzar esa vía.
La toma de posesión de Donald Trump como nuevo presidente de los Estados Unidos no pasó desapercibida para el lehendakari, que si bien evitó nombrar al mandatario republicano, aseguró que «asistimos al nacimiento de una nueva era, más compleja e incierta» y añadió que «en el actual escenario internacional se están sucediendo varias crisis y transformaciones que afectan a todos los ámbitos de la realidad y de nuestra vida cotidiana». No fue la única voz del Ejecutivo autonómico que se refirió ayer a lo que pasa en la Casa Blanca. La portavoz del Gobierno Vasco, Maria Ubarretxena, reconoció que Trump «ha realizado algunas manifestaciones desconcertantes», aunque tampoco especificó a cuál de todas ellas se refería. Lo que sí aseguró con contundencia es que Lakua «va a seguir defendiendo y acompañando» a las empresas y al tejido empresarial vasco afincado en EE UU.
Frente a este contexto, el lehendakari planteó seis ejes de acción. En primer lugar propuso «tejer nuevas redes para conectarnos con nodos internacionales que aporten valor económico, político, cultural o científico-tecnológico para Euskadi». También abogó por «nuevas alianzas estratégicas con quienes compartamos intereses comunes, para crecer juntos». Lo que no desarrolló Pradales es quiénes pueden ser esos aliados con los que se construyan nuevas vías de actuación o si esa estrategia pasa por reforzar las relaciones que ya están en vigor. Además, apostó por «tener voz propia en las mesas en las que se toman las decisiones relevantes en Europa, decisiones que nos afectan directamente a los vascos». Por ahí pasan algunas de las peticiones que el lehendakari ya llevó el pasado mes de noviembre a Luxemburgo y Bruselas, como la creación de la Macrorregión del Arco Atlántico, la oficialidad del euskera y el papel de Euskadi como actor clave en el sector industrial.
El lehendakari quiere poner las energías y esfuerzos de su ejecutivo en «generar polos y espacios atractivos para atraer talento y favorecer un ecosistema empresarial globalmente conectado para fomentar la creación de nuevos negocios y empleo en el mercado internacional, así como el refuerzo del arraigo en Euskadi». En Pasaia también se acordó de la diáspora vasca, «a fin de que sean nuestros ojos y oídos, y compartan información y conocimiento que nos ayude a descubrir nuevas oportunidades en el mundo».
Pradales quiso sacar pecho del territorio que preside y apuntó que «Euskadi debe seguir mirando con orgullo al mundo siendo conscientes de nuestro tamaño y de nuestras limitaciones». Y destacó «que es imprescindible la defensa de los intereses sociales, económicos, culturales o políticos de nuestro país. Una estrategia global e internacional, resaltó, «para que los vascos surquemos los nuevos mares y mundos en busca de mayores cotas de bienestar y prosperidad».
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