PNV y PSE sellan su alianza para gobernar Euskadi los próximos cuatro años

El guión se ha cumplido como estaba previsto. Y, en vísperas de que el Parlamento de Vitoria acoja mañana el pleno de investidura, los líderes de ambos partidos -Andoni Ortuzar y Eneko Andueza- han estampado su firma sobre la mesa especial que acoge la Cámara vasca en su segunda planta para así blindar el acuerdo programático pactado entre la formación jeltzale y los socialistas vascos, y que ha contado con el plácet casi unánime de sus respectivas organizaciones internas.

El propio Pradales, Ortuzar y Andueza han firmado ante la atenta mirada de la presidenta del Parlamento Vasco, Barkartxo Tejeria, el 'guión', programático que orientará las políticas publicas de Euskadi entre 2024 y 2028. Bajo el nombre de 'Ongizatean hazi. Bienestar, Progreso, Transformación y Autogobierno para una Euskadi global', en una rueda de prensa posterior a la firma ambos partidos han dado a conocer algunas pinceladas prioritarias del acuerdo de bases que sustentará el programa oficial del nuevo Gobierno.

En realidad, el contenido íntegro se conocerá mañana durante el pleno en el que, gracias a la mayoría absoluta que suman PNV y PSE, se proclamará a Pradales lehendakari en primera vuelta. El motivo, básicamente, es no dejar todas las cartas boca arriba sobre la mesa al resto de partidos. Más aún teniendo en cuenta que el candidato de EH Bildu, Pello Otxandiano, también presentará mañana su candidatura a lehendakari -sin ningun viso de que prospere- en un intento de confrontar modelos. «No vamos a hacer 'spoilers'», ha bromeado Ortuzar. Se trata, según ha apuntado después Andueza, de una «estrategia política» para no dar munición a la oposición. Ya también por «cortesía parlamentaria» hacia Pradales, a quien le compete desgranar mañana durante 90 minutos los detalles del acuerdo.

No obstante, jeltzales y socialistas han hecho público un avance de 26 páginas -el documento completo suma un centenar- que se articula principalmente en cinco ejes prioritarios de actuación, los mismos que sustentaron el preacuerdo que pactaron las delegaciones del PNV y el PSE el pasado día 10. Son: las personas en el centro; modelo de crecimiento y bienestar; transformación energética y sostenibilidad; convivencia, memoria y derechos humanos; y crecer en autogobierno. Cinco pilares que serán la hoja de ruta del quehacer del Gobierno de Pradales, que aún tiene que cerrar la estructura interna del Ejecutivo y el reparto de carteras. Será el sábado, después de que jure su cargo en el acto solemne que acogerá Gernika, cuando previsiblemente se dé a conocer el nombre de todos los consejeros que integrarán su gabinete. Cuestión que este miércoles han seguido sin querer desvelar.

Una vez firmado el pacto, Ortuzar y Andueza han comparecido ante los medios de comunicación en la sala de prensa del Parlamento Vasco, donde ambos han mostrado su satisfacción por el acuerdo alcanzado. «El acuerdo -ha manifestado el presidente del PNV- va a permitir constituir un Ejecutivo vasco fuerte y contar con un programa de gobierno sólido, capaz de dar respuesta a las demandas, necesidades y anhelos del pueblo vasco, además de garantizar unos servicios públicos de máxima calidad».

El líder de la formación jeltzale ha recalcado que los dos partidos han venido trabajando «con determinación» desde el pasado día 22, justo un día después de que se celebraran las elecciones vascas y conociesen el resultado de las urnas que les otorgaba esa tranquilizadora mayoría absoluta. «Ambas formaciones hemos hecho nuestros mejores esfuerzos para que este acuerdo fuera posible», ha insistido Ortuzar que, al igual que Andueza, ha hecho extensible el agradecimiento por el pacto alcanzado a los equipos negociadores por haber conseguido empastar y fundir dos programas distintos «en una sola acción de gobierno».

«Gracias a este pacto, Euskadi va a contar a partir de la próxima semana con un Gobierno Vasco respaldado por una mayoría absoluta en el Parlamento Vasco y con un acuerdo de bases programáticas que servirá de hoja de ruta para toda la legislatura; unas bases que abordan todas las cuestiones que interesan y preocupan a la ciudadanía», ha manifestado Ortuzar. Un acción política clasificada en los cinco ejes prioritarios anteriormente mencionados y que, a su vez, descansan sobre 32 áreas de actuación en las que se priorizan cuestiones somo la Sanidad, la transición energética, el fomento del empleo digno de calidad o medidas para fomentar la emancipación juvenil, entre otras cuestiones.

«Sinceramente -ha reconocido Ortuzar- es un gran programa que va a garantizar unos servicios públicos de excelencia, que va a impulsar el desarrollo y el progreso de nuestra economía, que va a promover empleos dignos y de calidad y que va a situar a Euskadi y al autogobierno vasco en el lugar que les corresponde en este momento histórico». El presidente del EBB ha pedido igualmente al resto de fuerzas políticas «que sepan leer de manera positiva y constructiva este acuerdo, porque es nuestra voluntad tenderles la mano para conseguir políticas, leyes y programas de máximo consenso a lo largo de toda la legislatura».

Por su parte, Andueza también ha mostrado su satisfacción por la «importancia» de un acuerdo programático que, según ha defendido, «depende en gran medida el futuro de Euskadi». A este respecto, el secretario general del PSE ha mencionado cinco cuestiones para evidenciar, según ha recalcado, la relevancia del pacto. Primero, ha enumerado, «este acuerdo va a hacer posible un Gobierno de coalición con mayoría absoluta en este Parlamento Vasco». «Hace solo dos meses, cuando algunos estaban empeñados en presentar esto como un duelo entre dos, esto estaba en duda. El Partido Socialista logró un excelente resultado y hoy es posible este acuerdo gracias a ese buen resultado», ha puesto en valor.

En segundo lugar, Andueza ha destacado que el futuro Gobierno liderado por Pradales estará dedicado «a lo fundamental». Es decir, a las cosas del comer: salud, políticas sociales, vivienda, educación, reto demográfico, empleo, innovación, transporte, transición energética, igualdad, convivencia…

El tercer punto que ha querido resaltar ha sido el de que este Ejecutivo es «transversal». «Yo espero que sea un Gobierno del que nos podamos sentir orgullosos todos, pero, sobre todo, que sea capaz de sintonizar con una amplia mayoría social. Y creo que los dos partidos hemos hecho un ejercicio de generosidad, para aparcar nuestras diferencias».

Andueza ha continuado recalcando, en cuarto lugar, que el eje PNV-PSE estará dispuesto a tender la mano al resto de fuerzas políticas. No obstante, ha resaltado que «esta es la hoja de ruta de los dos partidos para los próximos cuatro años». «Es la hoja de ruta para afrontar retos enormes, que van a requerir ambición, atrevimiento, y romper algunos moldes», ha dicho Andueza, quien ha confiando es que ambos partidos puedan trabajar «sin ataduras, atendiendo únicamente al interés y los deseos de una mayoría social». «Tendremos siempre la mejor disposición para el acuerdo, pero nosotros hemos asumido la responsabilidad de llevar el timón de este país y a nosotros nos corresponde tomar la mayoría de las decisiones».

Por último, el líder de los socialistas vascos ha reconocido sentirse «orgullo» porque, según ha manifestado, «en el acuerdo están presentes asuntos que hemos puesto sobre la mesa en nuestro programa: la política de cuidados, el fomento del transporte sostenible, la contratación de personal como elemento clave para mejorar nuestra sanidad, una política de vivienda dirigida a nuestros jóvenes…». «Este programa -ha concluido- tiene una orientación progresista, está pensado para proteger los servicios públicos, luchar contra las desigualdades y construir una Euskadi más justa».

Una vez expuesto sus análisis, Ortuzar y Andueza han defendido a ultranza una acción de gobierno conjunta y leal que deberá superar, han querido recalcar ante las preguntas de los periodistas, sus discrepancias. Que las hay. Un ejemplo claro: la vivienda. Una materia que ha levantado ampollas en esta última legislatura entres los socios de Gobierno, y que llevó incluso al Ejecutivo de Urkullu a presentar un recurso de inconstitucionalidad por la norma estatal al entender que invade competencias vascas, pero con el rechazo del PSE. No obstante, los líderes de PNV y PSE han querido recalcar que ambos comparten objetivos a este respecto.

Otra patata caliente es el modelo de autogobierno vasco. Jeltzales y socialistas, a diferencia de las dos anteriores legislaturas, no han acordado una discrepancia pactada al respecto. Y se han conjurado para impulsar en esta próxima legislatura una reforma estatutaria para actualizar la carta de Gernika sobre la base de los trabajos realizados por la ponencia de Autogobierno. De hecho, en el documento de bases queda plasmado que PNV y PSE se comprometen «desde la lealtad y complementariedad para facilitar la estabilidad institucional a través del diálogo y el acuerdo».

Ortuzar ha defendido la «voluntad política» de ambos partidos para llegar a un consenso. «Esperamos también que esa voluntad política se refleje también en otros grupos políticos y que seamos capaces de iniciar un proceso de conversaciones que desemboque en un acuerdo lo más amplio posible en el ámbito vasco y que luego sea un acuerdo que sea posible también en la negociación con las instituciones del Estado». «Cada uno pondrá sobre la mesa sus elementos y habrá que hacer un esfuerzo de articulación de consensos lo mas amplios posibles», ha reiterado el dirigente jeltzale.

En la misma línea se ha pronunicado Andueza, que ha defendido que este acuerdo «tiene reflejados los puntos de acuerdo y la voluntad política de seguir avanzando en materia de autogobierno y también en un futuro pacto estatutario en aquellas cuestiones que nos unen». «Desde luego el PNV no se va a reconvertir al socialismo vasco, ni el PSE se va a reconvertir al nacionalismo. Por tanto, ambos tenemos que tener margen para defender nuestra identidad, nuestros valores, principios y posición política al respecto», ha continuado Andueza, quien ha confiando que esta legislatura sirva «para avanzar y poner el acento en lo que nos une y no en lo que nos separa».