El PNV se despide de Ardanza: «Sin su legado sería difícil entender la Euskadi próspera y en paz que hoy conocemos»

«Con gran pena, enorme dolor y el sentimiento de una notable pérdida para el Partido Nacionalista Vasco, y para Euskadi entera, acogimos ayer el fallecimiento de José Antonio Ardanza Garro, el lehendakari Ardanza, en su casa de Kanala». Así ha arrancado Ortuzar su intervención, para después hacer llegar su cariño y cercanía a toda su familia, en especial a su esposa, Mari Glori Urtiaga, y a su hijos, Nagore y Aitor. «Quienes hemos conocido en vida al lehendakari Ardanza sabemos que su familia natural y su familia política han sido los dos basamentos principales sobre los que ha construido su fecundo proyecto de vida; y hoy ambas familias somos solo una en este momento tan trascendental, y juntas despediremos a quien ha sido una de las figuras políticas vascas más relevantes de la segunda mitad del siglo XX en nuestro país y fuera de él», ha expresa el dirigente jeltzale, que trabajó durante nueve años junto con Ardanza, como recordó ayer en un mitin en Sestao en el que no pudo reprimir las lágrimas.

De la misma manera en que lo ha hecho Iñigo Urkullu -que esta mañana también ha dado lectura a una declaración institucional-, Ortuzar ha hecho un repaso de la vida de Ardanza para destacar que, antes de ser lehendakari e instalarse en Ajuria Enea, fue «militante clandestino de Euzko Gastedi durante el franquismo». «Sufrió exilio y tras la dictadura asumió la Alcaldía de Arrasate en las primeras elecciones municipales democráticas». De ahí pasó a ser diputado general de Gipuzkoa, y después llegó a la Lehendakaritza «en unas difíciles condiciones» previas a la escisión en el seno del PNV. «Esta trayectoria deja patente la vocación de servicio a su país que siempre ha mantenido el lehendakari Ardanza, y también su férreo compromiso con el PNV, especialmente en las situaciones políticas más complejas», ha continuado Ortuzar.

Por ello, el líder de la formación jeltzale, en nombre de todo el partido, se ha querido mostrar «vivamente agradecido» a Ardanza y ha reconocido su legado político, «sin el que sería difícil entender la Euskadi próspera y en paz que hoy conocemos», ha apuntado. De hecho, Ortuzar ha puesto en valor «su denodada lucha en favor del autogobierno y del fin de la violencia marcó una época». En este sentido, ha dicho, «es remarcable el elevado desarrollo que conoció el Estatuto de Gernika durante sus catorce años en la Lehendakaritza, así como las múltiples iniciativas para que ETA desapareciera de nuestras vidas». Entre ellas, ha destacado el Pacto de Ajuria Enea y, posteriormente, la iniciativa que llevó su nombre, el 'Plan Ardanza'.

«Más allá de su trayectoria institucional, el PNV se enorgullece de haber contado con un militante como José Antonio Ardanza durante más de sesenta años en los que siempre ha estado al servicio de los ideales abertzales y democráticos», ha remarcado Ortuzar, quien ha despedido a un «jeltzale genuino» que deja «su legado y su ejemplo».