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El licenciado en Historia Etxahun Galparsoro es autor, junto al doctor en Historia Contemporánea Josu Chueca, del informe titulado 'La deportación de los vascos a ... los campos del Tercer Reich', en el que en el año 2020 se identificaron a las 253 víctimas y se aclara el contexto en el que fueron vulnerados sus derechos humanos.
En el estudio se explica que el origen del 90% de los deportados se encuentra en el exilio que provoca la guerra civil en España. «Es verdad que hay un 10% o 15% que se asienta antes de la guerra civil, principalmente en Francia, y normalmente por motivos económicos, pero el origen de la deportación vasca se halla en la guerra civil y en el exilio», apunta. Para el uso del término «deportado» se tiene en cuenta la normativa legal desarrollada por Francia a partir de 1945 en torno al mismo y los procedimientos reglamentados que impuso este país para acreditar la condición de deportado y obtener así determinados beneficios.
Galparsoro, que es además sobrino nieto de Marcelino Bilbao que combatió en la guerra civil, en las filas de la CNT, vivió el exilio en Francia y la deportación a los campos de Mauthausen y Ebensee, constata que la mayoría de estas víctimas han permanecido olvidadas.
Expone que «el exilio perpetuo de los antiguos deportados, la persistencia de la dictadura durante treinta años más y la prohibición para hablar libremente sobre el tema que ello conllevaba fueron factores clave –aunque no los únicos– para que esta parte de la memoria quedara relegada al olvido».
La investigación llevada a cabo por Galparsoro detalla que el campo de concentración de Mauthausen es el más significativo en la deportación de los vascos, el número asciende a 115. Destaca así el papel preponderante que tuvo ese campo en la deportación de ciudadanos de Euskadi y el rol exterminador que desempeñó junto a su anexo de Gusen –con casi la mitad del total de deportados y dos terceras partes del total de muertos–, «en un proceso que poco tiene que ver con la 'Solución final de la cuestión judía' del holocausto».
Por ese motivo, se ha considerado que la fecha más adecuada para el recuerdo de todas las víctimas vascas del nazismo es el 5 de mayo, aniversario de la liberación de Mauthausen, además de ser el 'Día de Homenaje a los españoles deportados y fallecidos en Mauthausen y en otros campos y a todas las víctimas del nazismo de España' instaurado por el Gobierno español. Desde Gogora explican que ese día muchos familiares viajarán para asistir a los actos conmemorativos en los campos, por lo que el Gobierno Vasco ha decidido fijar su tributo dos día antes en Irun.
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