Apuestan de nuevo por un gobierno con once carteras, tres en manos socialistas
El PSE aspira a reforzar su peso en el Ejecutivo con un departamento que agrupe todas las competencias de empleo
d. guadilla/a. surio
Domingo, 30 de agosto 2020, 08:02
Iñigo Urkullu contará durante los próximos cuatro años con una estructura de gobierno muy similar a la de la pasada legislatura. Al igual que ... durante los últimos cuatro años habrá once departamentos, tres de los cuales estarán en manos de los socialistas. Queda por resolver cuáles serán las competencias finales y la denominación oficial de alguna de esas consejerías, una tarea que deberán cerrar durante los próximos días el propio lehendakari, Andoni Ortuzar e Idoia Mendia. El papel de la líder del PSE sigue siendo una de las principales claves a resolver. Tanto si decide o no entrar en el Gobierno como si los socialistas apuestan de manera clara por reclamar una vicepresidencia, una opción que sigue estando sobre la mesa. Es probable que Mendia desvele a principios de esta misma semana su decisión.
Los socialistas aspiran a gestionar más presupuesto, con departamentos de fuerte sesgo social. Y el PNV a un Ejecutivo coherente en su funcionamiento y que conserve los actuales equilibrios de poder, aunque se lleve a cabo una reorganización interna en las áreas de gestión entre las consejerías en sintonía con las prioridades del acuerdo de gobierno y con las nuevas necesidades por la situación sanitaria, social y económica.
La principal incógnita reside en la continuidad o no de algunos consejeros sobre los que han estado colocados los focos los últimos meses: Nekane Murga, al frente de Salud; Cristina Uriarte, en Educación, e Iñaki Arriola, en Medio Ambiente, Ordenación del Territorio y Vivienda. Esta semana se sabrá también cuáles son los perfiles políticos que el PSE quiere incorporar al Ejecutivo de coalición. Es decir, si va a proponer finalmente a Mendia para que se haga cargo de un departamento social de peso -quizá Empleo, con la competencia de Lanbide- y esta consejería puede estar adscrita, por ejemplo, a una Vicepresidencia segunda.
La presencia del PSE puede contribuir a engrasar la comunicación con el presidente Sánchez, que en algunos momentos de los últimos meses ha atravesado altibajos.
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