
Secciones
Servicios
Destacamos
Juan Ignacio y Andrés Viedma
Lunes, 9 de junio 2025, 07:54
La edición 2025 de la gran aventura infantil se desarrolló entre los días 11 al 19 de abril, con el clásico formato que mezcla solidaridad, conducción en el desierto, y turismo enfocado a los más pequeños de la casa.
Una edición que fue muy especial, ya que, gracias a los caprichos de la naturaleza, los asistentes disfrutaron del poco habitual espectáculo de poner ver lagos en el desierto. Las abundantes lluvias de este año han llenado de agua unos lagos que afloran cada vez con menos frecuencia y que son difíciles de ver. Como curiosidad, hay que comentar que el recorrido original de una de las etapas del viaje, cuyos reconocimientos se hicieron en mayo de 2024, pasa por el centro de uno de los lagos, ya que en aquel momento solo había tierra y polvo, donde ahora hay una gran masa de agua habitada por flamencos rosas.
Las lluvias, que siguieron presentes, han acompañado a la caravana durante su periplo por Marruecos, aumentando considerablemente la dificultad de conducción en pistas, ya que los caminos se convirtieron en auténticas trampas de barro.
Con 38 vehículos y 120 personas, se iniciaba con un complicado paso del estrecho, ya que hubo que cambiar de puerto de partida de España debido al temporal que azotaba la zona esos días, y que hacía imposible el embarque desde Tarifa.
Lluvia que acompañó a la caravana durante las dos primeras jornadas en suelo marroquí, aunque los aguaceros dieron pequeñas treguas que permitieron completar las actividades previstas, como la visita a las ruinas de Lixus. Situada a sólo 3 km de la actual localidad de Larache, Lixus fue de una de las principales ciudades de la provincia romana de Mauritania Tingitana y es una visita muy interesante de la zona.
1 /
Dado que Semana Santa no es precisamente una época en la que se puede asegurar el tiempo meteorológico, en la 21 edición del Desierto de los Niños, el barro se convertiría en el inesperado protagonista ya que dificultó de manera muy notable la conducción por el desierto, normalmente con mucho polvo y sequedad en el ambiente. La cantidad de agua hizo que los participantes tuvieran que extremar las precauciones para evitar disgustos.
Que llueva en el norte es algo relativamente habitual en esas fechas, pero que lo haga en el desierto, una vez cruzado el Atlas, no lo es tanto. Pero una fortísima tormenta descargó sobre la zona pocos minutos antes de la llegada de la caravana, con lo que se formaron ríos que cruzaban las carreteras, cortándolas en algunos puntos, y se anegó el desierto. Los lagos secos dejaron de estar secos y por los áridos ríos de arena comenzó a circular el agua.
1 /
De esta forma, el barro se convertiría en el inesperado protagonista de esta edición, pues dificultó de manera muy notable la conducción por el desierto. Con estas complicadas condiciones salió a la luz el excelente trabajo que realizaron los modernos sistemas de tracción que equipan los Hyundai que encabezaron la caravana. Los SANTA FE, KONA, TUCSON y el IONIQ 5, pasaron la prueba del barro con nota, demostrando unas cualidades impresionantes. El nuevo Hyundai SANTA FE se estrenaba en terreno inhóspito, y demostró una impresionante capacidad de adaptación a los terrenos difíciles.
Leopoldo Satrústegui, presidente y CEO de Hyundai ha declarado que «para Hyundai es un orgullo llevar 21 años con el proyecto solidario de El desierto de los Niños, donde apoyamos principalmente aspectos relacionados con la educación y el deporte. En esta edición hemos puesto la primera piedra de unas instalaciones deportivas en la población de Ramlia. En Hyundai estamos convencidos de que tanto la educación como el deporte son la base fundamental para el progreso de la sociedad. Desde Hyundai sentimos cada año que podemos ayudar más y en cada edición nos superamos, y en estas 21 ediciones han pasado más de 2.500 niños por el desierto, donde hemos hecho escuelas, pozos, bibliotecas, repartido material escolar, pero sobre todo hemos potenciado la educación y el deporte en esas zonas desfavorecidas de Marruecos. Esperamos cumplir muchos años más colaborando con El Desierto de los Niños junto con la Fundación ALAIN AFFLELOU, cuya gran labor es digna de destacar - graduó los ojos de 798 personas locales-, así como con Bujarkay y colaborando en el desarrollo de los pueblos más desfavorecidos del desierto marroquí».
Destacó de una manera especial el IONIQ5, que mostró una sorprendente facilidad para rescatar vehículos atascados en el barro. Su sobresaliente e instantáneo par motor, unido a la tracción extra que aportaban los neumáticos Hankook Dynapro AT2 que montaba el coche este año, se convirtieron en unas herramientas súper eficaces a la hora de ayudar a otros vehículos de la caravana. El IONIQ5 arrastraba los coches clavados en el fango como si fueran plumas.
Se entregaron materiales a la «Association Tafilalet pour les Handicapés» de Erfoud, y el camión de Bujarkay distribuyó todo el material escolar, adquirido en Marruecos, beneficiando a niños y comunidades que dependen de la ayuda humanitaria.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Así se hace el lechazo deshuesado del restaurante Prada a Tope
El Diario Montañés
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.