Dos muertos por las inundaciones en Estados Unidos, que se prepara para más lluvias

«Una masa de aire estival rica en humedad sobre gran parte del este y centro de EE UU continuará provocando áreas con tormentas eléctricas, desde dispersas hasta generalizadas, capaces de causar fuertes aguaceros e inundaciones repentinas», ha advertido el Servicio Meteorológico Nacional (NWS) en un pronóstico que avisa de un tiempo pasado por agua hasta mediados de semana.

La noche del lunes las lluvias torrenciales inundaron partes de los Estados de Nueva York, Nueva Jersey, Pensilvania y Maryland, que provocaron el cierre de carreteras y autopistas, sumergieron coches y dejaron varados a los automovilistas.

Dos personas han fallecido cuando su vehículo fue arrastrado por el agua a un río en Plainfield, Nueva Jersey, sin que los servicios de emergencia que se encontraban en el lugar pudiesen rescatarlas, según han informado las autoridades locales. Así, la tragedia ha vuelto a llamar a la puerta en una ciudad que fue azotada por una tormenta el pasado 3 de julio, que provocó dos muertos. «Nosotros, Nueva Jersey, nosotros, Estados Unidos, nosotros, el mundo, estamos siendo arrastrados por el clima», ha expresado el gobernador estatal, Phil Murphy.

El tráfico aéreo también se ha visto afectado en la zona. Los aeropuertos del noreste del país están sufriendo importantes cancelaciones tras los aguaceros torrenciales. Hasta este martes por la mañana, se habían cancelado 377 vuelos en los aeropuertos de Nueva York, Washington y Boston, según datos de FlightAware.

A borbotones. Así entraba durante la pasada noche el agua en el metro de Nueva York hasta el punto de anegar el andén de una de sus estaciones mientras los pasajeros miraban la escena con preocupación en el interior de uno de los vagones del suburbano. Las fuertes lluvias que azotan la Costa Este del país norteamericano son las causantes de estas inundaciones que han puesto en alerta a las autoridades de la Gran Manzana, sobre todo después del temporal que asoló Texas la semana pasada y que provocó al menos 131 muertos.

Son varias horas ya bajo el aguacero. Las tormentas de gran intensidad han azotado desde la tarde del lunes las costas del Atlántico Medio en Estados Unidos y causado graves inundaciones desde Nueva York a Virginia. Como se ve en decenas de vídeos virales, el agua ha entrado en las estaciones y los túneles de metro, anegado negocios y arrastrado vehículos, además de obligar a la cancelación de cientos de vuelos. La alerta por posibles inundaciones repentinas entró en vigor el lunes (cuando en España era ya de madrugada) y se extiende en algunas zonas hasta las seis de la mañana de este martes (la una de la tarde hora española), aunque el Servicio Meteorológico Nacional ha pedido precaucación ya que habrá aguaceros durante todo el día y la situación puede agravarse de un momento a otro.

Los pasajeros del suburbano en Nueva York se han visto sorprendidos por cascadas que bajaban por las escaleras e inundaban los andenes del metro. En algunos casos, el agua también ha entrado dentro de los vagones. Las escenas de pánico se han repetido en estaciones de Manhattan y otros tramos de la Gran Manzana, con pasajeros que a duras penas podían hacer frente a las torrenteras mientras subían a la superficie.

Y es que la ciudad ha vivido la noche de este lunes su segunda hora más lluviosa desde que hay registros, después de que cayeran más de 51 mm entre las 7 p. m. y las 8 p. m., hora local. Una precipitación récord solo superada por los 89 mm producidos por los remanentes del huracán Ida en 2021. En total, la urbe neoyorkina recogió un total de 67 mm, superando cualquier marca para un 14 de julio, que databa de 1908.

Los servicios de emergencia han notificado rescates de decenas de personas atrapadas en zonas anegadas en lugares como Schotch Plains y New Providence (Nueva Jersey). Se han emitido alertas en el este y centro de Pensilvania, Staten Island y el resto del sureste del Estado de Nueva York, además de Colonial Heights, Petersburg o los condados de Charles City, Dinwiddie y Prince George, en Virginia. También llueve intensamente en Connecticut.

Esta pasada madrugada, el frente más grave había dejado en algunos una lámina de lluvia de hasta dieciocho centímetros de altura. El departamento de emergencias de Nueva York recomendó a los ciudadanos que no descendieran a aparcamientos subterráneos y a los residentes en bajos que se preparasen para evacuar, aunque finalmente no resultó necesario. A los vecinos de este Estado y de Virginia afincados en depresiones también se les dio la voz de alarma por si fuera necesario su traslado a zonas elevadas. Tres líneas de metro en Manhattan, así como varias de tren y autobús, quedaron cortadas temporalmente. La Policía cerró autopistas convertidas en piscinas.

Según el Servicio Meteorológico Nacional, el principal problema de estos temporales es que los forman cadenas de tormentas cargadas de gran humedad y con movimientos muy lentos. La combinación de ambos factores provoca que desaten fuertes precipitaciones sobre espacios muy concretos. Es lo mismo que sucedió hace apenas diez días en Texas y que desencadenó una de las peores tragedias en la cuenca del río Guadalupe, con más de 300 víctimas entre fallecidos y desaparecidos.

Las predicciones apuntan a que este martes continuarán las lluvias y pueden afectar a cientos de miles de viajeros en Nueva York, además de nuevas restricciones en los aeropuertos. El gobernador de Nueva Jersey, Philip D. Murphy, ha declarado el estado de emergencia. Por su parte, el candidato demócrata a la alcaldía de la ciudad, Zohran Mamdani, ha considerado que las infraestructuras de la ciudad deben modernizarse para adecuarse a «esta nueva realidad climática».