¿Gratis para todos o descuentos selectivos?
Gipuzkoa descarta elevar la edad para viajar sin pagar, fijada en los 6 años, y aboga por la rebaja progresiva en función del uso y la renta
El transporte público está de moda. La iniciativa del Gobierno de dejar gratis desde el 1 de septiembre y hasta fin de año los bonos ... de Cercanías y Media Distancia de Renfe para los usuarios habituales y subvencionar rebajas de hasta el 30% en los medios locales y autonómicos, que en Euskadi llegan al 50% al haber sido ampliadas por las instituciones vascas, ha puesto en primera línea del frente la política de movilidad como mecanismo para abaratar la vida de los ciudadanos en un momento de encarecimiento general de la vida, y de los carburantes en particular. Con millones de usuarios que dependen a diario de buses, trenes, topos o metros para llegar a sus lugares de trabajo, estudio u ocio, algunas instituciones han visto en el transporte un foco de atención sobre el que desplegar iniciativas con las que ganarse el favor ciudadano, habida cuenta de que constituye una materia de amplio espectro y arraigo social.
La última en sumarse es la Generalitat Valenciana, que a partir del día 9 dejará viajar gratis en los medios de transporte bajo su gestión a todos los jóvenes menores de 30 años, que solo tendrán que sacarse una tarjeta personalizada. Otras administraciones, como el Ayuntamiento de Valencia, han insinuado que los buses urbanos de la capital se sumarán a la iniciativa. Como los bonos de Renfe, este programa tiene como fecha de caducidad el 31 de diciembre.
Otras regiones, como Galicia, apuestan por la gratuidad del transporte para jóvenes de forma permanente. Desde mayo del año pasado, todos los gallegos menores de 21 años pueden viajar gratis en los autobuses dependientes de la Xunta, además de en algunos otros medios, como el barco de la ría de Vigo o el ferrocarril de vía estrecha en el área de Ferrol.
Euskadi, vía propia
Gipuzkoa y Euskadi marcan distancia con este tipo de iniciativas. Tanto la Diputación como el Gobierno Vasco entienden que, más allá de no cobrar billete a los niños menores de 6 años, la edad no debería constituir un factor determinante para este tipo de beneficios. Ambas administraciones prefieren focalizar el esfuerzo presupuestario que toda bonificación significa en ayudar a los colectivos que más lo necesitan, como parados, perceptores de ayudas sociales, jubilados, familias numerosas, discapacitados, y también jóvenes, aunque sin llegar al gratis total. Y hacerlo a través de descuentos progresivos que hagan más barato los viajes cuanto más se use el transporte público. Esto es, descuentos en función de uso y renta, no de edad. «No sé si tiene mucho sentido regalar el viaje a un futbolista de Primera División porque tenga 20 años», razona una fuente institucional.
El modelo que defienden las áreas de Movilidad de la Diputación y el Gobierno Vasco, dirigidas por los socialistas Rafaela Romero e Iñaki Arriola, respectivamente, es el que ya está implantado en Gipuzkoa a través del sistema Mugi. Esto es, un sistema integrado con tarifa unificada para todos los medios de transporte que operan en un territorio, sin importar de qué administración dependan, con tarifas bonificadas que, además, sean más bajas cuanto más se use el transporte público.
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De hecho, la aspiración del Gobierno Vasco es extender el modelo Mugi a Álava y Bizkaia, de modo que en el futuro pueda existir una tarjeta (o varias con el mismo uso) que permita a los ciudadanos vascos coger cualquier medio de transporte público en cualquier punto de Euskadi y con las mismas tarifas.
Descuentos en Gipuzkoa
Es lo que sucede ya en Gipuzkoa, donde pagando con Mugi, y a diferencia del resto de territorios y comunidades, cuestan lo mismo los trayectos en un medio local (buses urbanos), provincial (Lurraldebus), autonómico (Euskotren) o estatal (Renfe), ya que se tarifica en función de la distancia recorrida, no el medio elegido. Con el añadido de que el transbordo es gratuito, aunque se produzca entre operadores diferentes, como de Renfe a Dbus, o de Euskotren a Lurraldebus, por ejemplo.
En el momento actual, con las bonificaciones vigentes, los descuentos generales con Mugi respecto del billete ordinario son del 74% para los primeros 20 viajes, del 79% del 21 al 50, y del 95% a partir del trayecto 51. Así, un primer viaje en un bus urbano cuesta entre 0,35 y 0,48 euros (según la localidad), el viaje 21 entre 0,28 y 0,39; y el viaje 51 entre 0,07 y 0,09. En trayectos interurbanos, un viaje entre Donostia y Bilbao va desde los 3,35 euros del primer trayecto del mes a los 0,65 a partir del 51. Son la mitad de precio que en circunstancias normales, ya que hasta el 31 de diciembre está activo el descuento adicional del 50%.
A estas bonificaciones generales hay que añadir las adicionales para los colectivos necesitados. Así, los jóvenes de entre 6 y 24 años reciben un 25% de saldo adicional al recargar su Mugi; los mayores de 65, discapacitados y titulares de la tarjeta social, un 8% más de lo que ingresen; y las familias numerosas entre un 25% y un 100% en función de si combina el título de familia numerosa con otro (parado, joven, mayor de 65, etc.).
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