Así quedan los precios de la Mugi y los bonos de Renfe en Gipuzkoa
Más de 600.000 guipuzcoanos se beneficiarán de las nuevas tarifas excepcionales, que estarán vigentes hasta el 31 de diciembre
Ya quedan solo tres días. El jueves, 1 de septiembre, entran en vigor las ayudas al transporte público, que en Gipuzkoa se traducen en un 50% de rebaja en los viajes abonados con la tarjeta Mugi sobre la tarifa que corresponda en cada caso, y en la puesta en práctica de los abonos gratuitos para los trenes de Cercanías y Media Distancia de Renfe, que ya se pueden adquirir. Estas medidas extraordinarias, impulsadas por el Gobierno central y que en el caso de la Mugi cuentan con el esfuerzo también del Gobierno Vasco, la Diputación de Gipuzkoa y los ayuntamientos concernidos, estarán vigentes hasta el 31 de diciembre.
El objetivo de la bonificación es aliviar una parte de los costes cotidianos de las familias en plena crisis energética y de inflación. Una escalada de precios generalizada que está mermando la capacidad de compra de los ciudadanos y empobreciendo a la sociedad. De paso, fomentar el uso del transporte público, captando nuevos usuarios de cara al futuro que vean en él una alternativa práctica, fiable y económica al vehículo privado. Y con ese trasvase, reducir las emisiones globales de CO2 a la atmósfera y el consumo de energía, especialmente de las gasolinas, coadyuvando en la lucha contra el cambio climático y en la transición energética.
En el caso de Gipuzkoa, que a diferencia de otros territorios y comunidades disfruta de un sistema de tarifa unificada para todo el transporte público de la provincia gracias a la Mugi, con descuentos progresivos en función del número de viajes y transbordos gratuitos, se da el caso de que los usuarios de Cercanías Renfe –que también está integrado en el sistema– podrán optar por acogerse al bono gratuito que ofrece el tren, abonar su viaje con la Mugi, o alternar ambos.
El uso de uno u otra saldrá más a cuenta dependiendo del trayecto realizado, de si el usuario usa uno, dos o más medios de transporte en su desplazamiento, y del número de viajes que realice cada mes.
El descuento a la mitad se aplicará automáticamente al pasar la Mugi por los lectores en todos los buses y trenes de la red
Obviamente, para quienes solo usan Cercanías o deben coger más de dos transportes, el bono gratuito de Renfe se hace imprescindible. Las dudas pueden saltar entre quienes usan el tren y lo complementan con otro medio para llegar a su destino y lo hacen con mucha asiduidad. Cabe recordar que con la Mugi el transbordo, aunque sea entre diferentes compañías (Renfe y Dbus, por ejemplo), es gratuito, y que cuanto más se usa, menos cuesta el trayecto. Con las nuevas tarifas rebajadas puede llegar a ser de tan solo siete céntimos por dos viajes (el que se paga y el transbordo gratuito).
Cada caso es distinto y tocará hacer cuentas, porque puede llegar a salir más barato aprovecharse del cambio de tren o bus gratis abonando el viaje en Renfe con la Mugi, que utilizar el abono del operador estatal y pagar el segundo trayecto. Dependerá en este caso de los trayectos y del número de viajes que se hagan cada mes.
Entre 0,07 y 3,35 euros
Con la Mugi, el descuento se aplicará de forma automática al pasar la tarjeta por los lectores en todos los operadores del sistema (Lurraldebus, Euskotren, Cercanías Renfe y los buses urbanos de Donostia, Irun, Errenteria, Eibar, Zarautz, Arrasate, Hernani, Lasarte-Oria, Oiartzun y Oñati, a los que se sumarán los de Tolosa cuando se integren en la red), sin que el viajero tenga que hacer ningún trámite.
Con la rebaja, la escala de tarifas queda entre un mínimo de 0,07 euros para los últimos trayectos de un usuario intensivo de bus urbano y un máximo de 3,35 euros por un viaje esporádico entre Donostia y Bilbao o Vitoria. Añadida esta bonificación al descuento ordinario de la Mugi, estos precios representan una rebaja de entre el 74% y el 95% respecto al billete ocasional (1,85 euros en los operadores principales). Los viajes 'sueltos' de los usuarios ocasionales sin la tarjeta de transporte se seguirán pagando íntegros. No se benefician del plan de descuentos, que afectan solo a las tarjetas y abonos multiviaje, ya que la bonificación está pensada para usuarios recurrentes del transporte público.
En torno a 600.000 guipuzcoanos, nueve de cada diez habitantes del territorio, se beneficiarán de las tarifas rebajadas, dada la enorme penetración que tiene la txartela de transporte en la sociedad. A finales del año pasado había activas 615.800 tarjetas Mugi, de las que en 2021 fueron utilizadas con mayor o menor intensidad más de 555.000. Estos usuarios activos pagaron con la Mugi más de 58 millones de trayectos.
El bono de Renfe, ya a la venta
El bono de Renfe se puede adquirir desde el miércoles pasado. El primer día se vendieron en Gipuzkoa 1.357. Se compra en las taquillas de las estaciones, máquinas autoventa y mediante la aplicación (APP) de Renfe Cercanías. En este último caso, la APP generará un código QR que se descargará en el móvil y que podrá ser leído por el personal de Renfe para permitir el acceso a los andenes. También se originará un código de siete dígitos con el que se podrá obtener el abono en soporte físico o bien cargarlo en el que ya disponga el cliente en las taquillas o las máquinas autoventa.
Aunque es gratuito, para obtener el pase de Renfe hay que dejar una fianza de 10 euros en Cercanías y 20 en Media Distancia
Para obtener estos abonos habrá que depositar una fianza de 10 euros en el caso de Cercanías, y 20 en los de Media Distancia (hay descuentos para familias numerosas), que se devolverán si se realizan 16 viajes o más hasta el 31 de diciembre. El título gratuito de Cercanías permitirá realizar todos los viajes que se necesiten dentro del núcleo elegido. En el caso de Gipuzkoa, entre Irun y Brinkola/Oñati. En el de Media Distancia, en cambio, el abono será válido para un trayecto predefinido, en el que también se podrán efectuar todos los viajes que se necesiten.
Durante los cuatro meses que estarán vigentes los nuevos abonos recurrentes, Renfe suspenderá la venta de los abonos habituales (en Gipuzkoa mensuales), que mantendrán la vigencia con la que han sido comprados. Los viajeros pueden solicitar si lo desean la devolución de la parte proporcional.
9,2 millones de coste a repartir entre gobiernos, Diputación y municipios
La bajada temporal de tarifas para los usuarios habituales del transporte público entre el 1 de septiembre y el 31 de diciembre tendrá un coste estimado en 9,2 millones de euros en Gipuzkoa, que serán sufragados entre las distintas administraciones. Según las estimaciones provisionales, el Gobierno central cubrirá más de la mitad de ese montante (5,5 millones), y el resto correrá a cargo del Gobierno Vasco (unos 2,2 millones), la Diputación de Gipuzkoa (algo más de 800.000 euros) y los ayuntamientos concernidos (cerca de 700.000 euros, de los que la gran mayoría corresponderán a San Sebastián).
En cifras redondas, Madrid financiará algo menos del 30% de la rebaja, Vitoria lo que falte hasta el 40%, y el 10% restante correrá a cuenta de Diputación (Lurraldebus) y municipios (autobuses urbanos).
Cuantos más viajes tiene un operador mayor es la compensación que debe sufragar su institución responsable, ya que son más los usuarios que se benefician de la rebaja. Entre los municipios de Gipuzkoa con servicio local de autobús y que forman parte de la red Mugi, el mayor esfuerzo lo asumirá San Sebastián (Dbus), con unos 624.000 euros, frente a los 447 de Hernani.
Tras el de la capital, el siguiente ayuntamiento al que más le costará la medida será el de Irun (32.000 euros), y a este le siguen Errenteria (13.000), Arrasate (2.800), Zarautz (2.300), Oiartzun (1.600), Eibar (1.100) y Lasarte-Oria (623), además del mencionado Hernani. No hay datos disponibles para Oñati.
