Indemnizada tras sufrir una pesadilla de cuatro días en Barajas

Sin maleta, con su vuelo cancelado en el último momento y con la tempestad del temporal Filomena de fondo. Así fue la pesadilla que vivió una viajera de Bilbao durante cuatro días en el Aeropuerto de Barajas de Madrid a la espera de su equipaje y un vuelo alternativo con destino Dublín, ciudad en la que realiza sus estudios. Tras poner una reclamación a través de la entidad vasca Erreklamatu, los tribunales han condenado a la aerolínea a indemnizar a la joven con casi 2.000 euros.

La odisea de esta joven estudiante empezó el 9 de enero de 2021. Había comprado un vuelo con origen Bilbao y destino Dublín con escala en Barajas, pero en el último momento la aerolínea Iberia canceló la conexión con la capital irlandesa a causa del temporal Filomena. Así, la chica permaneció cuatro días en el aeropuerto madrileño a la espera de que llegasen soluciones que dieran por concluido lo que se había tornado en un mal viaje.

Desde la entidad vasca Erreklamatu, formada por un grupo de abogados de Bilbao especialistas en reclamaciones de vuelo, manifiestan que «esta es una de las situaciones más extremas que hemos visto en el desempeño de nuestro trabajo de reclamaciones de vuelos». Señalan además que, este tipo de situaciones son «una buena muestra de la falta de diligencia de las aerolíneas, y del desprecio con el que en muchas ocasiones tratan a sus clientes». Advierten a su vez que si «no nos informan correctamente acerca de las incidencias y, además, nos privan de la atención que por ley nos asiste», los pasajeros están en su derecho de «reclamar el vuelo para conseguir una indemnización» pues este tipo de comportamiento «es una actitud totalmente punible».

Tras ponerse en contacto con Erreklamatu, la joven y su familia procedieron a reclamar su vuelo y ahora el Juzgado de lo Mercantil número 3 de Bilbao ha condenado a Iberia a indemnizarla con un total de 1.990,82 euros.

Por ello, la aerolínea le reembolsará el precio del vuelo cancelado (Madrid-Dublín), le pagará los gastos del desplazamiento a Alicante y del vuelo alternativo, le indemnizará con 186,23 euros por la pérdida del equipaje y con otros 1.400 euros «en concepto de indemnización por las condiciones en las que la actora permaneció durante los días 9-12 de enero en el Aeropuerto de Barajas, sin ningún tipo de atención por parte de la demandada».

En Erreklamatu celebran que «estamos contentos con el resultado, cumple nuestras expectativas. Solicitamos lo que la sentencia acoge», y aseguran que la joven protagonista de esta pesadilla no procedió a la reclamación «por el tema monetario, sino por el disgusto y la situación que tuvo que sufrir». Fue la madre de la joven estudiante la que insistió con mayor ahínco con este trámite. «Vivió cuatro días con la incertidumbre de tener a su hija a cientos de kilómetros de distancia sin poder hacer nada», lamentan desde la entidad bilbaína especialista en reclamaciones de vuelo.

La odisea que vivió esta joven vasca comenzó en Bilbao y, como Ulises en su regreso a Ítaca, su viaje estuvo lleno de complicaciones, incluso tempestades. Tras permanecer desatendida y prácticamente incomunicada cuatro días en el aeropuerto madrileño, donde «durmió en un banco sin posibilidad de cargar su móvil y dosificando los momentos de comunicación con su familia», se desplazó a la estación de Atocha «con la borrasca Filomena de por medio» donde cogió un AVE a Valencia. Allí, unos familiares pudieron asistirla durante un día antes de partir a Alicante, donde finalmente pudo encontrar un enlace a Irlanda con un vuelo alternativo que le llevó a su destino final: Dublín.

No se trata del primer caso que Erreklamatu tiene que llevar a los tribunales en 2021. A finales de 2019 un vecino de Bilbao que había reservado un vuelo Munich-Bilbao, vio en la aplicación de la compañía que su vuelo había sido cancelado sin que le ofrecieran alternativa alguna. De inmediato, decidió comprar otro billete por su cuenta. Con posterioridad, el horario del vuelo inicial fue simplemente modificado y le convino más, por lo que desistió del segundo vuelo y optó por la alternativa que le ofrecía la aerolínea alemana. El Juzgado de lo Mercantil número 2 de Bilbao condenó el pasado mes de junio a la compañía aérea Lufthansa a abonar a este pasajero el billete de un vuelo alternativo que adquirió por su cuenta al ver cancelado su trayecto original.

En esta línea, Erreklamatu recuerda que en caso de cancelación de un vuelo, «el pasajero tiene derecho al reembolso del precio del billete o a un transporte alternativo que le lleve a su destino lo antes posible, o en una fecha posterior que él decida y en condiciones similares a las del servicio contratado».

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