Mercadona instala cepos en sus carros para combatir el robo de 500 unidades al año en Gipuzkoa
Se trata de un dispositivo que establece un perímetro de seguridad alrededor de los supermercados y que, de rebasarse, bloquea las ruedas de la unidad
La última novedad en Mercadona no es su brillo de labios, su paleta o sus novedades en cuidado del pelo, sino el medio millar de carros de compra que se roban o desaparecen de sus supermercados en Gipuzkoa cada año. Ante tal cifra, la compañía valenciana ha instalado un novedoso mecanismo de seguridad que permite a cada establecimiento determinar un perímetro por donde se puede mover el carro y así evitar este tipo de hurtos. Si se rebasa dicho área, las ruedas de la unidad se bloquean de forma automática.
Desde la compañía aclaran que se trata de un sistema de seguridad que combina una señal de bloqueo de radiofrecuencia, una antena perimetral y un sistema de frenado automático de ruedas para retener el carro de compra. En otras palabras, una vez el dispositivo de seguridad detecta que el carro se ha alejado más de lo debido de la tienda, se activa el 'cepo' y la unidad queda inmovilizada en el sitio, sin que el cliente pueda empujarlo o moverlo más.
Mercadona comenzó a implantar este sistema en 2017 después de que la compañía del empresario Juan Roig notase un incremento significativo de este tipo de hurtos en sus tiendas. Teniendo en cuenta la media estatal de robos de carros de compra en supermercados de Mercadona, en Gipuzkoa desaparecen alrededor de 520 carros de compra al año. Según datos que maneja la compañía, «de media se roban 65 carros cada curso en cada tienda del Estado».
120 euros el carro de Mercadona
520 carros de compra robados al año en Gipuzkoa es un dato a tener en cuenta, si bien desde la propia empresa insisten en que es «una media aproximada» y que hay tiendas en las que apenas se producen hurtos de este tipo. La razón de la instalación de este sistema de seguridad es «garantizar tener los carros dentro de las instalaciones de Mercadona para que el cliente pueda realizar su compra de una forma cómoda», añaden.
El primer supermercado de Mercadona de Gipuzkoa en el que se implantó este sistema de seguridad fue en el de Belartza, uno de los más grandes del territorio y que fue abierto a finales de 2017. Después le siguió el de Elgoibar y más tarde fueron instalando este sistema en las otras 6 tiendas (Hernani, Andoain, Oiartzun, Irun, Lazkao y Eibar) del territorio.
Pero, ¿para qué se roban los carros de compra? En la mayoría de casos, los hurtos están relacionados con episodios de vandalismo –cuadrillas de chavales que lo utilizan para hacer botellón– o con personas que se llevan el carro hasta su coche o casa por comodidad sin ninguna intención de devolverlo. Fuentes del Departamento de Seguridad añaden que los carros también se roban para venderlos.
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Y es que, aproximadamente, el precio de un carro de compra puede ascender hasta los 120 euros, aunque para las grandes cadenas el precio baja de forma significativa si aumenta el volumen del pedido. Entre una unidad de plástico y otra de metal el precio no varía mucho, pero si se tiene en cuenta que en Gipuzkoa desaparecen 500 carros en los distintos supermercados de Mercadona cada año, el coste para la compañía es significativo. Pese a todo, la compañía asegura que «ha notado» un descenso de este tipo de hurtos desde que comenzó a implantar este mecanismo de seguridad y se muestra «satisfecha» porque el objetivo «siempre es garantizar un servicio óptimo al cliente, de forma que pueda realizar la compra de forma adecuada».
