ETS revisará mil viviendas de Donostia antes de construir la estación del TAV
La revisión, que arrancará la segunda quincena de septiembre, se centrará primero en las fachadas y posteriormente, en el estado de cada inmueble y los elementos comunes
La cuenta atrás de las obras de construcción de la nueva estación de Alta Velocidad de Atotxa en Donostia se inició a principios de julio. Por delante, 42 meses de trabajos que en unas semanas abordarán las inspecciones técnicas previas de edificios y viviendas situadas en el entorno de donde se situará la terminal ferroviaria.
Euskal Trenbide Sarea (ETS), ente público del Gobierno Vasco informó este miércoles de que a partir de la segunda quincena de septiembre, se inspeccionarán fachadas, y se iniciarán los contactos con las personas responsables de la administración de fincas de las comunidades de los edificios más próximos a la zona de obras. Por de pronto, ya se han empezado a colocar notas informativas para las personas residentes en los edificios que serán objeto de inspección, y se prevé que puedan ser en torno a un millar de viviendas.
En las próximas semanas se irá cerrando un calendario de citas individuales con cada persona propietaria. Estos trabajos, que se prolongarán durante tres meses, los llevará a cabo el personal técnico de la UTE Inspección Edificios Atotxa, «que estará debidamente acreditado», advirtieron.
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42 meses se estima que tendrán que pasar para que Donostia pueda dar la bienvenida a la nueva estación de Atotxa de Alta Velocidad.
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En noviembre comienza la construcción de una pasarela provisional para enlazar el paseo de Francia con Blas de Otero
La unión de empresas encargada de estas tareas elaborará un informe técnico que permitirá evaluar el estado actual de los edificios ubicados en la zona de las obras. En una primera fase se inspeccionarán todas las fachadas y posteriormente, se trabajará en la revisión del estado de cada vivienda, así como en los elementos comunes.
Los trabajos de la nueva estación, que cuentan con un presupuesto de 80,4 millones de euros (IVA incluido) y un plazo de ejecución de 42 meses, «garantizarán en todo momento el mantenimiento del servicio ferroviario», comentó ETS a través de una nota.
Cierre de Mundaiz
Los trabajos para hacer posible que la Alta Velocidad llegue hasta el centro de la capital guipuzcoana comenzaron el 7 de julio y se estima que se prolongarán hasta finales de 2023 o principios de 2024.
Las dos primeras semanas, las tareas se efectuaron en espacio ferroviario, donde se realizaron labores de topografía para la implantación de la obra, la preparación de las oficinas y el acopio de materiales. Ha sido, sin embargo, a partir del 28 de julio cuando se han empezado a producir las primeras perturbaciones al tráfico, como consecuencia del cierre del camino de Mundaiz, que se prolongará durante 2 años. La ocupación de este tramo tiene por objeto ampliar la plataforma ferroviaria para permitir el desvío provisional de las vías generales de la estación.
A partir de noviembre comenzará la construcción de una pasarela peatonal provisional que comunicará el paseo de Francia, -entre la estación actual y el hotel contiguo- con la plaza Blas de Otero. Este paso elevado contará con ascensores y sustituirá al actual -situado tras la Puerta de Brandemburgo-, que será clausurado y demolido a partir de la primavera de 2021. El pasadizo subterráneo de Egia permanecerá abierto hasta que la nueva pasarela peatonal entre en funcionamiento.