«Visite nuestro piso piloto»
Anuncios inmobiliarios de los últimos años 60: «100.000 pesetas para poder recibir las llaves»
En nuestro tiempo, el mercado inmobiliario está muy loco y quienes se adentran en la intrincada aventura de intentar comprar piso deben pelear en internet ... entre un torbellino de anuncios, la gran mayoría de viviendas de segunda mano.
Hace un tiempo no era así. El medio de información principal era el periódico y en él aparecía publicidad de muchas promociones de pisos en construcción. ¿Les apetece que echemos un vistazo? En la colección de recortes de hoy, centrándonos en algunos anuncios del sector inmobiliario publicados en EL DIARIO VASCO en los años 1968 y 1969.
Entonces era frecuente la fórmula de las cooperativas de viviendas, como la de Oiartzun cuyo anuncio encontramos en noviembre de 1968…

Aparentemente, convertían el lío de buscar casa en algo tan sencillo como abrir una cuenta y empezar a ahorrar dinero.
En los siguientes dos anuncios descubrimos los precios, 265.000 en Herrera (Donostia) y 100.000 de entrada en Capuchinos (Errenteria), que había que aportar para conseguir las ansiadas llaves de un piso…

Lo de visitar 'pisos piloto' similares al tuyo, que aún estaba sin construir, era muy típico en aquellos años del desarrollismo.
Pero es que nosotros lo que queremos es tener «tarima de pino francés 1ª calidad sin nudos en todas las habitaciones y pasillo»…

Entre 694.000 y 1.800.000 pesetas costaban los pisos en aquella promoción de 1969 en el Nuevo Gros. Eso sí, el plano sintético ubicaba la estación de tren casi junto a la calle Miracruz y una gran zona verde difícil de identificar.
La publicidad inmobiliaria siempre resulta algo fría. Mejor darle calidez con la atenta carta de un agente de la propiedad dirigida a los posibles compradores. Apareció tal cual el 18 de abril de 1969 en DV…

Prometían que los materiales empleados eran de «LUJO» con mayúsculas. El misterio estaba en cómo entrarían tres habitaciones, cocina y baño en aquellos pisos con sólo 45 metros cuadrados de superficie.
En el área donostiarra de Ibaeta, la promoción de Lorea invirtió mucho dinero en dar a conocer sus pisos. Hubo temporadas en que casi a diario aparecían anuncios en DV llamando la atención sobre diversos aspectos de la urbanización. Hasta organizaron un concurso con premios (una cocina, un frigorífico y ¡un sillón hinchable italiano!) en el que, para contestar a sus preguntas, tenías que repasar lo afirmado a lo largo de la campaña publicitaria…

En nuestra colección, tenemos muchos más anuncios curiosos de promociones inmobiliarias. Seguiremos la semana que viene con otros de los años 70.
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