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Daniel Moreno, el nuevo rey de la ensaladilla rusa
El chef del Tragatá de Ronda se lleva el IV Campeonato de Ensaladilla Rusa San Miguel con un plato «sencillo y un toque de piparras»
La ensaladilla rusa es la estrella entre las estrellas de los aperitivos y primeros platos. Es una elaboración fundamental de nuestra gastronomía y su concurso anual ya se ha convertido en todo un clásico de San Sebastian Gastronomika. Daniel Moreno del Tragatá de Ronda se llevó este martes el IV Campeonato Nacional de Ensaladilla Rusa San Miguel convirtiéndose en el rey de reyes.
Con encurtidos, con pimientos o con algún escabeche. Existen tantas ensaladillas rusas como cocineros que las elaboran. Muchos arriesgaron con productos complicados de casar, otros fueron algo más conservadores. Pero la que este martes se alzó con la corona cuenta con un ingrediente especial: La piparra. Una fusión vasco-andaluza que funcionó a las mil maravillas a tenor del resultado. «Hemos querido hacer una ensaladilla sencilla y hemos puesto algo de piparra por encima para que le diera el toque de encurtido», resume Daniel Moreno. No es casualidad que se llevara el primer premio. Se trata de una de las tapas que más éxito tiene en el Tragatá. «No paramos de hacer kilos y kilos», señaló entre risas.
Pero lo cierto es que ya puede ir preparando la despensa en el Tragatá porque el aluvión de clientes que va a tener en su local de Ronda va a ser de órdago. Es lo que le pasó a las propietarias de Chinchín Puerto (Caleta de Vélez, Málaga). Belén Abad participó como jurado durante la cata de las diez ensaladillas que se pudieron degustar. «Ganar el concurso supone un antes y un después. Un atropello en el buen sentido», recuerda. Y no es para menos. «La gente llegó a hacer hasta dos o tres horas de espera hasta que empezaba el servicio para comer la ensaladilla. Fue todo un boom», remarca. Como muestra un botón. «Si antes del concurso sacábamos 25 al día, después llegamos a sacar 106. Lo multiplicamos por tres», reconoce aún sorprendida.
Abad participó en un jurado compuesto por chefs, periodistas, gastronómos y público popular que estuvo presidido por Martin Berasategui, quien de una forma jocosa y sacando a relucir su sentido del humor, cerró el debate de cuál es el origen de la ensaladilla rusa. «Se inventó en la Parte Vieja de San Sebastián», confesó ante la carcajada de todos los presentes.
Berasategui también remarcó cómo año tras año el nivel de las ensaladillas rusas ha sido excepcional. «El nivel ha sido muy alto. Hemos probado diez ensaladillas muy distintas», remarcó el maestro.
